Capítulo 33:Un mejor amigo es el que te secuestra con buenas intenciones.

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¿Dónde rayos me estás llevando Yoel?

Se lo había preguntado tres veces pero su única respuesta fue;

ーYa lo sabrás, amore.

Siempre dejándome con la intriga, maldito mejor amigo.

Lo bueno de todo esto es que Nathan está presente adónde quiera que vayamos, al principio su presencia y cercanía me causó nervios, tartamudeos y otros síntomas de loca enamorada a primera vista y cómo no enamorarse de un chico tan sencillo, lindo y guapo.

No estoy exagerando.

Y con todo suspiro de ensueño me atrevo a decir que definitivamente sus hoyuelos son el adorno perfecto en sus lindas y finas mejillas. Esos enorme y sexys hoyos se creó para lucir en él.

ーPerfecto...

ー¿Qué?

Parpadeo uno... dos... tres veces dándome cuenta de la estupidez de mis actos.

Lo estaba observando embobadamente directo a los ojos desde hace varios minutos sin darme cuenta hasta ahora y lo más vergonzoso es que él se percató desde un principio pero nunca dijo nada al respecto manteniendo silencio y sonriendo, y automáticamente hizo que sus hoyuelos se presentaran frente a mí logrando desconcentrarme otros segundos más.

ー¿Eh? ¿Qué? ーVolteo la cabeza hacia la ventana con la intención de buscar alguna excusa. ーD-decía que... ー¿qué le digo?, estoy en blanco ーprefiero ir de copiloto. ーBenditamente se me ocurrió en microsegundos.

Brinco de mala gana al asiento a un lado de Yoel.

También es una oportunidad de escaparme ーlastimosamenteーde la cercanía de Nathan del cual consigue desconcentrarme considerablemente. Todavía es pronto para que se dé cuenta que me he enamorado perdidamente de él... O tal vez ya lo sabe.

¡Oh mierda! Melissa disimila más el interés que tienes en él. Me regañó mi subconsciente.

Es inevitable cuando lo tengo tan cerca.

ーLlegamos.

Yoel detuvo la camioneta e inmediatamente dirigí la mirada al frente encontrando una hermosa cabaña.

¡Espera!

Una hora de viaje sólo para traerme a una cabaña... ¿Para qué?

ー¿Qué hacemos aquí? ーGiro mi cabeza hacia él cruzandome de brazos bastante molesta.

No respondió.

Sólo se dignó a mirarme con una tristeza reflejados en sus bellos ojitos.

Por favor no hagas eso, sabes que me duele verte de esa manera.

Cuando estuve a punto de mencionar lo que tanto deseaba oír, Nathan interrumpió;

ーTe trajimos aquí para violarte.

Roja como un tomate, y abriendo más grandes los ojos, y tragando duro... mi mente comenzó a imaginar la escena. No Yoel incluído, solamente Nathan.

Si seré violada por ti no me resistiré en lo absoluto, además si no me opongo no sería abuso sexual.

Sé que aquel comentario fue una broma, aun así creo que esta noche el violado serás tú, Nathan.

Okay, también es una broma de mi parte.

¡Mejores Amigos! ||Parte 1|| ||Finalizado||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora