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Cocinamos pollo al jugo, con ensalada rusa. Una de millones de comida favorita de Nathan. Últimamente Nathan pasa aquí, cosa que me encanta su compañía. Antes me sentía sola aquí, ahora no. Pero no todo es color de rosa.

—pero Nathan por Dios, Dustin es mi amigo, no seas un celoso ¡el hecho que me mande mensaje no significa nada!- Su defecto es ser celoso, cosa que no me agrada.

—si claro, no entiendo por que te escribe, a caso quiere algo contigo ¿o que?- resople y seguí comiendo molesta, acabe rápido, lave los platos y me retire. Dejándolo solo.

Me metí a bañar y me puse una ropa cómoda para dormir, no escuche a Nathan espero que se arrepienta de la desconfianza que me da. Me acosté en mi cama y cerré los ojos, conciliando el sueño, estaba apunto de dormir cuando escucho que susurraban mi nombre.

—Alanna, mi amor...- ya sabia el cuento, venia con su cara de perro a pedir perdón, típico de el.

— no quiero oírte, no entiendo por que eres un desconfiado- me incorpore y le dije sus cuatro verdades.

por favor Alanna no seas cruel, yo solo no quiero que me engañes- susurraba, esperando que lo entienda.

—¿¡desconfías de mi?! yo no te engañaría, entiende deja tus celos no llevan a nada y buenas noches- mis palabras sonaban crueles pero era la verdad, como pude me arrope de pies a cabeza.

Unos colmillos de animal se posaron en mi hombro, ¡demonios!

— auch, bobo me dolió- me destape y jale su cabello.

—a mi me duele que seas cruel conmigo- me puso carita de perro mojado.

—yaa, no seas dramático, te perdono pero quiero que me vallas a ver una papita a la cocina- me miro, y puso su cara incrédula.

— ahora Nathan, ahora pues- salto de la cama y se dirigió a la cocina.

llego con unas papas, las agarre y las abrí, son mis favoritas.

— ¿me darás un besito?- acercándose a mi mejilla, y mordiéndome el lóbulo de la oreja.

—estoy comiendo, déjame comer ¡por dios! tu quieres que me enoje- fingí enojo, pero era total mentira, no quiero que me bese y el beso sepa a papas con sabor a mayonesa.

—ya no se que hacer contigo, estas muy loca últimamente- hice mimos con mi cara arremedandolo.

—ya mi amor, lo siento soy una exagerada- repartí besos por su cara. y lo que no quería que pasara paso, me beso y el beso sabe a papitas.

Tire las papas a un lado y comenzamos a un juego de besos, la ropa sobro y nuestros cuerpos se unieron en uno solo.

—solo hazlo- susurre.

y así lo hizo, me hizo el amor de una manera diferente, con amor. Amor puro.

A tu lado, cariño. -primera temporada-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora