A tu lado, cariño. -primera temporada-

#60

El taxi se estaciono en mi edificio, le pago al señor y bajo, camino al edificio y me topo con un tipo algo raro con su mirada sobre mi, como si supiera quien era yo, no me quitaba la mirada de encima. Subí no sin antes volver a mirar el tipo que seguía mirándome con una sonrisa algo oscura y hipócrita. Un sonido me hace saltar del susto, es mi celular. 

-¿hola?- saludo algo desconcertada y temerosa, tengo miedo que sea el tipo ese. 

-corazón, que ha pasado ¿porque te vas sin avisarme? estoy como un loco me acabo de decirme Catalina que te sentiste mal ¿te sientes mal aun?- sigo caminando hacia el ascensor.

-tranquilo Nathan, ya estoy algo bien estoy subiendo al departamento, No te preocupes mi amor dormiré un poco creo que es eso, solo cansancio- miento.

-ahorita voy para allá- abro mis ojos es tan terco,Dios.

-Nathan por favor estoy bien, y no se te ocurra venir y perder clases, por favor Nathan por una vez en la vida hazme caso-algo alterada hablo.

-esta bien Alanna, no iré adiós- me cuelga el celular definitivamente se resintió, ya en mi cuarto lanzo el teléfono a la cama.

—¿por que me pasa esto a mi? ahora vivo angustiada por ese tipo, ¿¡que quiere de mi!? maldito bastardo- patee la mesita de noche, botando todo.

Me recuesto en la cama aun llorando, y por tantas cosas el sueño me vence por completo, al menos podre dormir y relajarme. No se cuanto tiempo paso pero siento que se acuestan a mi lado, supongo que es Nathan, me hago la dormida y lo escucho susurrar.

  —¿por que siento que algo pasa y no me quieres decir? ay Alanna eres tan complicada, pero aun sigo amándote y aferrándome a ti cada día- besa mi cuello y se queda acostado en mi pecho.

se quedo un rato mas y me levante de a poco,  el también lo hizo y besa mi cachete.

 —¿ya estas mejor?- susurra.

—pensé que estarías resentido por lo de hoy en la mañana- niega, y sonríe.

—no quería causarte mas dolor de cabeza, reflexione si lo estaba pero Catalina me dijo que no me resienta, porque te pondrías mas alterada y te enfermarías- negué la cabeza y lo abrazo.

 —no pasa nada, ya me siento mejor ¿comemos?- asiente.

Salimos a comer en la calle, ya que Nathan quería consentirme, es gracioso pero muy lindo. luego de comer, regresamos al departamento y converse por teléfono con Noemi sobre su viaje, con Nathan hicimos tareas. Al menos me relaje estando con el.