-Steve.
-Hey Josh, tanto tiempo, es raro verte por aquí, a menos que necesites algo.
-Precisamente por eso estoy aquí -le dijo sonriendo, sentándose junto a él.
-¿A quién quieres que investigue ahora? ¿Sabes que esto es violar la privacidad de las personas verdad?
-Lo sé, lo sé, pero esta vez no son juegos de adolescentes, es importante.
-De acuerdo, ¿A quién?
-Tessa.
-¿Tu mujer? ¿En serio?
-No confío en ella, en lo que me ha dicho.
-¿Crees que te engañó?
-Creo que... Mintió cuando dijo que me engañó.-o-o-o-o-
-Aiden.
-No hables Ann.
-¿Por qué estás enojado conmigo?
-Hablaremos cuando lleguemos a casa -pronunció apretando los dientes.
-¿Hice algo mal? Lo siento.
-Solo no hables.
Asintió con la cabeza y siguió caminando detrás de él, ni siquiera iba a su lado.
Tocó el pañuelo en su cuello y se lo quitó, él se enojaría aun más si lo veía.
Lo guardó dentro de su abrigo y continuó su camino.
Su teléfono vibró y al ver de quien era el mensaje se sorprendió ¿Cómo había conseguido su número?
-Camina Ann -le ordenó el rubio al ver que la chica se había detenido.
-L-Lo siento, voy detrás de ti.
-¿Qué mirabas en el celular?
-Solo... Una notificación.
Si no estuviera tan sumido en sus ideas, no le habría creído.
Llegaron a su casa y él se volteó a verla.
-No vendrás más conmigo a la empresa.
-¿Pero por qué? -inquirió confundida.
-¿Lo de ese tipo no te dice nada?
-Solo se acercó a saludarme Aiden.
-¿Lo habías visto antes?
-Yo...
-No me mientas Ann.
Asintió y miró hacia abajo.
-Sí, ya lo había visto antes.
-¿Te referías a él cuándo me preguntaste si podías tener amigos verdad?
-No te enojes conmigo.
Apretó sus puños, ella tenía razón.
Bufó y la tomó del rostro.
-Lo siento.
-¿Por qué te enfadaste?
-Eres mía Ann.
Tomó las manos de él que estaban en sus mejillas y las colocó por su cintura, abrazándose a él luego.
-Soy tuya Aiden, él solo quiso ser amable.
-Lo lamento, estoy... actuando como un imbécil -le dijo abrazándola con fuerza.
Sonrió y frotó suavemente su mejilla contra el pecho de él.
-¿Sentiste celos por mi?
Esperó una respuesta, pero nunca llegó.
Levantó su rostro y él la miró.
-¿Lo estabas verdad? -le dijo sonriendo, divertida.
-Mejor no hables Ann -pronunció antes de bajar su rostro y besarla.
Sonrió contra sus labios y pasó sus manos hacia sus mejillas, acercándola a ella. Sabía que sí, aunque no lo aceptara.-o-o-o-o-
-J-James -exclamó nerviosa al ver el estado alterado del muchacho.
-¡Él la aleja de mi! ¡¿Quien demonios se cree que es?! -gritó aventando todo lo que estuviera a su alcance.
-James tranquilízate.
-¡Él no entiende que ella será mía! ¡Mía!
-¡Él es su dueño! ¡El que no entiende aquí cual es su posición eres tú!
Soltó lo que tenía en sus manos y se quedó en su lugar, aturdido.
-Me preocupas, no sé porque demonios tienes estos arranques de locura, pero si continuas con ellos, tendrás que irte de mi casa.
-¡Tú no entiendes nada Roxane! ¡Compré esas malditas acciones y no pude hablarle ni un minuto!
-Si logras calmarte, te mostraré algo importante idiota.
Se pasó una mano por su cabello rubio y se giró para observarla.
-¿Qué es?
-¿Ya estás calmado?
-Maldita sea contigo y tus vueltas, sí, ya estoy calmado.
-Vete a la mierdas James, es más, sal de mi casa, no quiero que sigas destruyéndola, y cuando te calmes realmente, vuelve.
Cerró los ojos y respiró varias veces profundo.
-Lo siento Roxie, tienes razón, iré... Por mis pastillas y luego hablaremos calmadamente, como dos adultos.
-Más que ansiolíticos tu necesitas algo para la puta locura que tienes -pronunció en un tono molesto al ver la mayoría de sus jarrones y cuadros destrozados por el suelo.
El muchacho volvió unos diez minutos después, más relajado.
-¿Te sientes bien ya?
-Si, lo siento Roxie.
-¿Seguro no quieres destrozar nada verdad?
-No -le dijo sonriendo-, ya me siento bien.
-James en serio me preocupas. Me preocupan tus cambios de humor tan repentinos.
-Estoy bien, solo fue un momento de enojo.
-Ya también me enojo y no destrozo todo a mi alrededor.
-Somos diferentes.
-Eso es más que obvio.
-En fin ¿Qué ibas a mostrarme?
Le mostró un celular y luego se lo dio a él.
-¿Para qué quiero esto? Yo ya tengo uno, y un modelo mucho más nuevo que este.
Rodó los ojos con fastidio.
-Solo busca en los contactos.
Desbloqueó la pantalla y vio que solo había uno... Uno muy especial.
-Ann -Murmuró incrédulo al ver la foto de la chica.
-De nada -le dijo sonriendo.
-Pero ¿Cómo lo conseguiste?
-Tengo mis trucos cariños -pronunció guiñándole un ojo.
-La llamaré -exclamó a punto de hacerlo, antes de que la rubia se lo quitara de las manos.
-¿Eres idiota James? No, no es una pregunta, es una afirmación. Ella en este momento está con Aiden, si la llamas, él lo descubrirá, y no tengas la menor duda de que sabrá que eres tú.
-¿Entonces para qué me muestras esto?
-He estado hablando con ella por mensaje... Creo que es lo mejor por ahora, y Aiden no lo sabe.-o-o-o-o-
Tenía que encontrarla, sabía que no había sido sincera, y más que nunca quería hablar con ella ¿Por qué le había mentido?
Entró a su casa apresurado, encontrándose a su madre a los pies de la escalera.
-Hasta que has vuelto hijo, ¿Qué tal si..?
-Ahora no ma, estoy ocupado -le dijo pasando por su lado.
-¿Estás buscando a esa "mujer"?
-Sí, estoy buscando a MI mujer.
-Ella vino y luego se fue.
Se detuvo en el tercer escalón, girándose para verla.
-¿Tessa volvió?
-Claro, busco unas cosas suyas y luego se fue, dijo que no te preocupes.
Negó con la cabeza y suspiró.
-Estás mintiendo ¿Por qué lo haces mamá? ¿Por qué la odias tanto?
-Ella no es buena para ti, es una prostituta, no es humana, solo te buscó para que la sacarás de aquel horrible lugar, por tu dinero.
-Y te guste o no, ella es mi mujer madre, a mi no me importa su pasado. Y si a mi no me importa, mucho menos debería interesarte a ti.
-Josh-
-Si no puedes aceptarla, entonces ya no serás bienvenida en ésta casa.
-¡¿Cómo puedes decir eso Joshep?! ¡Yo soy tu madre!
Sonrió cínico.
-Parir no es ser madre Adelia, hasta los trece años me cuidaron siete niñeras diferentes, tú jamás estabas, tú nunca cumpliste tu rol.
-¡No te permito que me hables de ese modo!
-Y yo que hablas así de Tessa -masculló con rabia-, no la conoces, ni quisiste jamás hacerlo.
-¡Vuelve aquí! -le gritó al ver que comenzaba una vez más a subir las escaleras.
Josh la ignoró, tenía una persona mucho más importante por encontrar. La única mujer que compartió más cosas con él que su propia progenitora.-o-o-o-o-
-Señora Phoenix, no sabe como nos alegra tenerla aquí -pronunció una joven muchacha de cabello negro hasta los hombros y ojos color avellana.
-Bueno, dije que vendría y aquí estoy -Expresó la castaña con una leve sonrisa.
-¡Claro que sí! Pero no creímos que fuese cierta su propuesta a primera instancia. Creímos que quizás era alguna de broma de muy mal gusto de algún chiquillo.
-Claro que no, mis intenciones fueron muy verdaderas al llamarlos.
-Es fantástico tenerla aquí señora Phoenix, he visto su trabajo ¡Y es realmente fascinante!
-Muchas gracias -expresó en una sonrisa incómoda -, pero preferiría que solo me llamara Tessa.
-Claro Tessa.
-Por cierto, no he traído ninguna carpeta con mi trabajo, como debes imaginarte, aquí quiero hacer algo diferente.
-Pero los modelos que diseñaba para su marca eran bellísimos.
-La marca pernecia a mí... Marido, es por eso que quiero probar algo diferente.
-Oh, ya veo, quiere algo así como independizarse de él.
-Sí, algo así -murmuró.
-Bueno, en SweetHell estamos encantados con la idea de que usted diseñe para nosotros. Todo lo que crea es único y tendencia cuando sale al mercado, más aún, cuando su nombre-
-No, no quiero que usen mi nombre, sé que sería beneficioso para ustedes, pero no quiero que lo usen como promoción.
-¿Por qué no? -inquirió confundida.
-No quiero que me asocien a Joshep cuando vean algo creado por mí ¿Puedes entenderlo?
-Claro que si cariño, ¿Prefieres mantenerte en el anonimato o usar un nombre falso?
-Llámame Alison Schade... Nuevo empleo, nueva vida.
-¿Alison Schade? ¡Me encanta!...
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Muñecas de compañía
Science Fiction¡Hoy 13/04/18 cumplimos un año!❤? Había sido creada con un único propósito, y ese era el de ser una "acompañante", aunque todo aquel que compraba una A.N.N 098 sabía que su uso seria otro, él de juguete sexual. Pero con ella fue diferente, su "am...