capitan

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Aviso:
A partir de este capitulo, aparecerán escenas de sexo lésbico esplicito, si no desea leerlas, por favor solo siga de largo. Solo para mayores de 18 años.

Regina levanto con un terrible dolor de cabeza, el sol que entraba por la ventana le impedía abrir sus ojos, quizo darse vuelta, pero se encontró con el brazo de Emma que la abrazaba por la cintura. No lograba recordar nada, solo sabia que estaba en el barco y que había besado a la rubia, trato de moverse con cuidado y se sobresaltó al ver el estado de su camarote, totalmente destruido... Comenzó a recordar la ira que se había apoderado de Ella y la confensión que le había hecho a Emma sobre Daniel, se sintió más aliviada al saber que ya una parte de su historia comenzaba a quedar atrás. Se levantó dejando a Emma dormir un rato más y fue a preparar café.
Se sentó en el salón, y mientras bebía su taza, recordaba el sabor de los labios de Emma,un sabor totalmente embriagador y adictivo, hacia años que nadie la besaba así, se sentía muy extraña, como si algo hubiera cambiando en ella, como si estuviera más liviana que de costumbre, su odio al mundo comenzaba a disminuir, que habia hecho Emma, que Le estaba provocando. Podría ser capaz con tan solo un beso haber cambiado su vida para siempre.
Comenzó a sentir miedo, culpa, inseguridad, su comportamiento de anoche fue demasiado, y tal vez Emma no lo soportaría.
sumergida en Sus pensamientos no escucho cuando la rubia se sentó a su lado.

-buen día... Dijo Emma dándole un ligero beso en los labios.

-buen día, ¿quieres café?

-si Gracias

Regina se levantó a buscar una segunda taza de café.

-oye, Emma yo...

-no pasa nada, todo esta bien.

-no, déjame hablar.... Lo de anoche, de verdad, no hubiera querido que me veas así...

-es parte de tí, ya te dije lo superaremos. No pretendo que me des ninguna explicación.

-emma, sus ojos se llenaron de lágrimas.
No puedo obligarte a que me ames, mira lo que soy, soy un monstruo, solo estoy llena de odia, de bronca de un pasado que me atormenta a cada segundo. No soy lo que te mereces, yo no puedo amarte,no puedo dejarte quererme, cuando bebo, pierdo el control y no quiero que nunca más me veas así..

-regina yo...

-dejame terminar por favor, tu estas llena de luz, tienes una vida perfecta y amas lo que haces, necesitas estar libre, necesitas a alguien que te aprecie cada noche y cada día, necesitas alguien que te tome de la mano para caminar y alguien que te ame con todo su corazón.

-¿quien dijo que eso tiene que ser asi?
Yo quiero esto, a tí en mi vida, a la mujer Que me besa como si no hubiera un mañana, a la mujer rota aun así se Vuelve a armar, aquella que ya no sabe de amor,pero que puedo enseñarle día a día, no quiero solo a alguien que me de la mano para ir de las calle, no que me diga estúpidamente cada día que me ama, quiero a aquella que aun con el corazón congelado algún día me lo diga de verdad. Quiero estar con vos, sea mucho o poco, sea fácil o difícil... Es a tí a quien quiero en mi vida regina. No me voy a dar por vencida, ya estoy completamente enamorada y no vas a hacerme dejarme.

-puede ser testaruda miss Swan, cuando quiere.

-no sabes de lo que soy capaz...

regina arqueo una ceja sorprendida.
-tu ganas, y discúlpame.
Voy a ir a acomodar un poco,Tu termina el café.

La morena se levantó y fue a recoger las cosas de su camarote, levanto los vidrios y puso todo en su lugar. Lo dejo tal cual estaba el primer día, si zelena se enterara ,montaria un gran escándalo.
Tomo una ducha, se vistió y fue hasta la cocina, Emma estaba apoyada mirando las olas desde la ventana.
Se veía perfecta, con sus rizos rubios cayendo por su espalda, su cara totalmente relajada.regina se acercó despacio y la abrazo por la espalda, haciendo sobresaltar a la rubia. La giro despacio y junto sus labios con los de ella en un suave y dulce beso.

Save Me From This HellDonde viven las historias. Descúbrelo ahora