Capítulo 7

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-ammm ¿Jess? - agita su mano, moviendo la mía.

-¿eh? - respondo confundida por la imagen que acabo de ver en mi cabeza. ¿Encerio Jesthenne, es lo único que pudiste decir un "eh?".Geoffrey sólo sonríe y niega con la cabeza divertido.

-De nuevo, ¿Quiéres ser mi novia? - sonríe, se ve tan lindo.

-Sí, si quiero ser tu novia.- los clientes del lugar, así como los empleados, comenzaron a aplaudir y a gritar.
Ni siquiera sabía que nos observaban. Ambos nos ponemos de pie, nos abrazamos y al separarnos, la gente pide ¡beso! ¡me siento tan incómoda! Creo que Geoffrey lo notó porque rió y me abrazó de nuevo pero ahora por los hombros. La gente seguía aplaudiendo.

¡Vamos Jess ahora son novios!, haz lo que te toca, no quieres quedar como tonta en público ¿o si?
¡callate consciencia!
Me separo, con una mano tomo a mi ahora novio de la nuca y con la otra acaricio su mejilla y lo beso, nuestros labios se mueven en perfecta sincronía, es un beso suave y lindo. Nos separamos por falta de aire, pegamos nuestras frentes, nos vemos a los ojos directamente y sonreímos.

*********

-Gracias por esta noche tan maravillosa. - me giro a verlo.

-No, gracias a ti mi amor, por aceptar mi propuesta, la verdad estaba muy nervioso, no sabía a cual iba hacer tu respuesta. -dijo tomando mi mano y besándola.

-Te he demostrado que te quiero, no tenías por qué estarlo.

-pero no sabía si me querías como novio o amigo.- sonrío y el también.

-Royce, quisiera que nuestra relación sea discreta, sólo por un tiempo.- digo nerviosa.

-Tranquila, te entiendo.- me regala una sonrisa.- ¿Es por James?

-Sabes que no me gusta hablar de él.- respondo firme.

-No puedes guardarte todo, un día tienes que sacarlo.- voltea la vista por la ventana de su lado.

-Pero yo decido ese día, y ese, no es hoy. - No llevamos ni una hora de novios ¿y ya estamos peleando?

-Perdón, sólo que me tienes tan intrigado con ese tema.- pone su vista en mi.

-Cuando esté lista te contaré todo, lo prometo, pero no ahora.- lo tomo de la mano.

-No te preocupes linda, no te estoy presionando.- besa mi frente.

-Ya tengo que entrar.

-Debes de estar cansada por tu viaje. - asiento - entonces... ¿Nos vemos pronto?

-Tenlo por seguro. - se acerca y nos besamos, no fue un beso largo pero tampoco corto. Sale del auto, me abre la puerta y me ayuda a salir.

-Buenas noches, princesa.- dice agarrándome de la cintura y acercándome a él.

-Buenas noches- le doy un beso en la mejilla.

-Te quiero.- y me regresa el acto.

-yo igual- sonreímos y él se aleja- adiós.

-Adiós.- me avienta un beso, sube al auto y veo como éste se va alejando. Me acerco al portón para colocar el código de la casa pero antes de que llegue hasta él, se abre y entro algo extrañada.

-Buenas noches señorita.- dice Esteban sobresaltandome.- oh, lo siento, no era mi intención asustarla.

-Está bien, no fue nada. -toco su hombro como señal de que nada paso.

-Creo que para cuando venga el joven Geoffrey no le tengo que preguntar. ¿verdad?- me mira con cara pícara, a lo que Río.

-Es verdad, sólo avísame cuando vaya llegando.

-Así será señorita.- asiente.

-¿Quieres tu paga ahora mismo o hasta en la mañana?- pregunto.

- en la mañana está bien, no se apure.

-De acuerdo.- sonrío- con permiso.

-propio, buenas noches.

-Gracias igual para ti.

Camino hasta llegar a la puerta de la casa, entro y escucho a ha alguien hablando, pero no es la voz Mad ni la de Sonia.
Me quito los zapatos para no hacer ruido, sigo el sonido con cautela y me lleva a una de las salas de estar.
¡¿PERO QUÉ?!
Me quedo sorprendida por lo que veo.

DOS CAMINOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora