Prólogo

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Llegó la hora. Todo está listo para hacer lo que he estado planeando durante mucho tiempo.

Aquí hay un solo objetivo: Acabar con la joyería Bieber.

Recuerda bien ese apellido, no lo olvides nunca.

Esta familia tiene mucho más dinero del que tú y yo podemos imaginar, pero ese no es el punto.

Yo no quiero su dinero, los quiero a ellos.

La dueña de la joyería es Bonnie, viuda de Bob Bieber, una mujer inútil y superficial, pero si quieres la verdad, ella me da miedo.

Te advierto que debemos tener especial cuidado con esta mujer.

Los que la conocen dicen que es mejor tenerla de amiga que de enemiga, el problema es que ella no tiene amigos.

Sé que tuvo tres hijos: Jeremy, Ellie y Brad. Uno más decepcionante que el otro.

El mayor se llama Jeremy, prepotente, insoportable y muy, pero muy, peligroso. Es el actual presidente de la joyería.

Tiene una sonrisa encantadora, pero nunca te dejes confundir por Jeremy Bieber, es capaz de hacer cualquier cosa con tal de lograr lo que se propone.

Luego de años casado, Jeremy se separó de su esposa, Pattie Mallette, una diseñadora de modas con quien tuvo un hijo, Justin. Único nieto de Bonnie y futuro heredo de la joyería... si tan solo él quisiera serlo.

La segunda y única hija de los Bieber es Ellie, dicen que es una mujer de buenos sentimientos, pero yo no lo creo. Si es una Bieber, tiene que ser una infeliz.

Ellie también fracasó en el amor, su ex esposo resultó ser un estafador que le terminó robando hasta el aire que tenía para respirar, desde entonces vive bajo la sombra de su madre, quien nunca le ha perdonado ese error.

El menor de los Bieber era Brad, un joven obsesionado con los juegos y las apuestas que fue asesinado hace diez años luego de ser secuestrado, todo esto ocurrió a pesar de que la familia Bieber había pagado el rescate que pedían sus raptores. Ese suceso marcó la vida de esta familia para siempre.

Meses después de ese lamentable hecho, la enfermedad de Bob Bieber, el patriarca de la familia, empeoró y murió al no poder soportar esta terrible pérdida.

Pero no sientas lástima, ninguno de ellos tiene límites. Son capaces de mentir, engañar e incluso traicionar a su propia familia.

En esta historia falta alguien: Yo

La persona que va a declararles la guerra utilizando sus mejores armas.

En fin, esta será una guerra a muerte, donde solo existe una posibilidad:
Ganar

El Guardaespaldas IIIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora