El corazón de Justin se aceleró.
— Esto tiene que ser una broma.
— Lamentablemente, no — dijo la rubia. — Sophia exige que le sean reconocidos sus derechos como madre, así como la custodia parcial del niño.
— Dylan es mi hijo y ella no me lo va a quitar.
— Tranquilo, Jus — dijo Maluma. — Eso no va a pasar.
— Escucha, Justin. Aunque Maluma me ha hablado lo suficiente sobre Dylan los últimos meses, necesito conocer de tu boca todos los detalles — explicó Amanda. — Desde el momento en el que eligieron a Sophia como madre de alquiler, pasando por el nacimiento del niño, hasta cómo llegó a tus manos. Es importante saber cada detalle.
— Entiendo. Todo comenzó hace seis años. Yo le propuse a Maluma formar una familia y luego elegimos a Sophia como la madre de alquiler de nuestro hijo.
— ¿Y entonces?
— Maluma me abandonó sin dar explicaciones. Yo creía que Sophia había quedado embarazada con su muestra, pero resultó ser mentira. Ella había quedado embarazada de su novio antes de conocernos.
— ¿Y qué pasó con la muestra de Maluma?
— Por alguna razón, que todavía no sabemos, mi mejor amiga fue inseminada con la muestra de Maluma. Jacob, el mejor amigo de Dylan, resultó ese niño que quisimos tener.
— Supongo que tienes a mano el acuerdo que firmaste al momento de contratar a Sophia.
Justin frunció el ceño.
— ¿Cuál acuerdo?
— ¿No firmaste ningún acuerdo previo con Sophia?
— Yo no firmé nada...
— ¡Justin! ¡Eso fue un grave error!
— Yo no sabía nada. En ese momento yo estaba confundido y destruido porque Maluma me había dejado. No tenía cabeza para firmar nada.
— Esto complica mucho más las cosas. Al no haber dejado por escrito ningún acuerdo, existe un vacío legal por medio del cual Sophia puede reclamar sus derechos como madre.
— ¿Y cómo sería eso? — preguntó Maluma.
— Sophia puede decir que entregó a su hijo en un momento de inestabilidad emocional.
— ¡Eso no puede ser! — protestó Justin. — ¡A ella no le importa Dylan! ¡Lo entregó por dinero!
— Como haya sido. La pelea no va a ser fácil. Debo ser honesta con ustedes. Tenemos algunas cosas a nuestro favor, pero también tenemos muchas cosas en contra.
— ¿Entonces nos rendimos antes de comenzar? — preguntó Justin.
— No necesariamente, pero por lo general, en este tipo de casos, el juez suele favorecer a la madre del niño. Porque la ley siempre protege a la madre.
ESTÁS LEYENDO
El Guardaespaldas III
FanficCinco años han pasado desde que Justin Bieber se mudara a Nueva York, ahora, convertido en un genio publicitario de Calvin Klein, comenzará a hacer, de manera inesperada, lo que nunca quiso: Trabajar también junto a su padre en la joyería familiar. ...