JUDAS

Confesión

El dieciséis de Febrero se cumplían dos años de la desaparición física de Jesse Turman y su madre, quién murió por causa de los disparos perpetrados por su esposo Jack Turman, quien a su vez permanecía en detención psiquiátrica en una institución de máxima seguridad, acusado de haber asesinado a su esposa tras una crisis mental provocada por la muerte de su hija.

En una silla de aquella institución esta sentada una enfermera y a su lado esta Jack, notablemente recuperado de sus afecciones mentales.

- Espero que pronto puedas estar del todo bien, me alegra que hayas mejorado -

- Gracias Shirley has sido de mucha ayuda todo este tiempo -

El abogado de Jack le había comentado que, si se comprobaba que su estado de salud mental mejoraba, iría directo a juicio, y por el atroz crimen, quizás seria pena de muerte. Turman sabia eso perfectamente, sin embargo no le asustaba, fuere cual fuere la decisión del juzgado, ya que él se sentía ya muerto.

- ¿Crees que puedes hablar hoy de lo ocurrido aquel día?  Expreso la enfermera a Jack

- Porque me has inspirado confianza Shirley, puedo contarte lo que realmente vi, pero antes quiero que sepas que no habló de esto con nadie desde aquel momento -

- ¿No lo haces por dolor?-

- No. Lo hago por él -

- ¿De quién hablas? -

- Hace tiempo, cuando a penas tenía seis años, fui con mi padre a una reunión secreta. Al llegar al sitio habían personas muy extrañas, estaban empezando a tomarse de las manos y abrieron un círculo entre ellos. Mi padre me dejo a un lado, con una hoja blanca y un lápiz, para que dibujara cualquier cosa que quisiera, supongo que mientras ellos hacían su especie de ritual, al final de la dichosa reunión, mi padre me tomó de la mano para irnos, mientras que el dibujo que yo había hecho, estaba en mi otra mano. Mi padre estaba afanado de llegar a casa y así fue, paso un tiempo muy corto en el trayecto hacia el hogar. Mas tarde mi padre observó el dibujo que yo había hecho, estaba en la mesa del comedor olvidado por mi. Fue algo desgarrador, ver a mi padre llorar mientras observaba aquél dibujo -

- ¿Qué habías pintado en ese papel?-

- A él. Yo dibujé al ser mas desgarrador y cruel, burlón y asqueroso -

- Si quieres puedes seguir contando, o descansar, siento que te perturba -

- No te preocupes, puedo continuar, ya nada me importa -

- ¿Quién era el del dibujo Jack?-

- El traidor. Judas -

Shirley empezó a reír en ascenso por lo que Jack contaba, puesto que le parecía gracioso todo aquello, Jack bajó la cabeza para mostrar su decepción.  Envuelta en carcajada, Shirley pide disculpas a Jack y sugiere que continúe. El accede con un poco de inseguridad, ya que quería demostrar su lucidez

- Quizás pienses que estoy loco, por lo que te cuento -

-No, Jack. Yo te creo cada palabra que me cuentas, cada gesto y acción que haces. Se que lo que me dices es verdad y también confío en tu mejoría. Lo que no estoy de acuerdo es que me llames Traidor -

Judas estaba sentado frente a Jack Turman.