Empujo el estúpido carrito del súper con ambas manos. Detesto con mi alma venir de compras, pero eso díganselo a mi madre, esa mujer no deja de fastidiarme nunca. Pongo en el carrito unas cuantas pastas, productos enlatados y...¿aceitunas?¿quién en su sano juicio compra aceitunas? Oh, sí, la desquiciada de mi progenitora.
Observo la fecha de caducidad de las bolsas de harina, no puedo evitar acordarme de aquella vez que me hizo devolver una bolsa igual porque tenía un par de días con la fecha vencida, tanta paranoia terminó causándome náuseas.
Siento que alguien se aferra a mi pierna y rápidamente volteo hacia abajo. Un pequeño niño como de un año aproximadamente me sonríe, mostrando unos blancos y bien alineados dientecillos.
Lo observo interrogante, esperando a que diga algo.
-Mamá - balbucea.
Me pongo a su altura, fijando mi vista en el oso de peluche que sostiene entre sus manos. Qué adorable.
-Niño, ¿has perdido a tu mami? - le digo, él forma un puchero con sus labios y sus grandes ojos azules comienzan a llenarse de lágrimas. - Hey, no llores, yo te ayudaré a buscarla.
Sonríe a medias y levanta sus manos en mi dirección. Blanqueo los ojos pero lo tomo en brazos, avanzando por los pasillos del súper con él a cuestas. Aquí la cuestión es, ¿quién es su madre?
-Enano, me vas a decir cuál es tu mamá, ¿vale? - ríe, yo simplemente niego.
Señalo a una mujer a la distancia, él niega. Observo a mi alrededor, analizando a todas las mujeres que aparecen en mi campo visual, pero ninguna de ellas parece tener algún tipo de parecido con el niño. Seguimos por el pasillo de productos de limpieza, y nada. Una chica camina desesperada en nuestra dirección, abre sus ojos azules como platos al vernos y suspira.
-¡Dios mío, al fin te encuentro! - toma al pequeño de mis brazos, yo simplemente frunzo el ceño.
De cerca puedo apreciar que tiene un parecido enorme con el niño, aunque ella es muy joven, igual no me sorprendería que realmente fuese la mamá.
-Maldito pedófilo, ¿pretendías llevarte a mi hijo? - la miro con molestia.
¿Qué?
-Yo no... - me interrumpe justo cuando estoy por explicarle.
-Llamaré a la policía - toma su móvil, se lo arrebato antes de meterme en problemas.
Bien, yo quería ser buena persona, pero ya todo se fue al carajo.
-Tranquila, cabra loca. Yo no tendría porqué darte explicaciones, pero igual lo haré. El bebé llegó a mi lado, lo tomé en brazos y lo ayudé a buscar a la irresponsable de su madre, ya que ella es tan descuidada que lo dejó por ahí abandonado - le sonrío sarcásticamente.
-Yo... - ahora soy yo el que la interrumpe.
-Ni siquiera pienses en disculparte, no sirve de nada - le sonrío al niño. - Adiós, pequeñajo.
Él vuelve a reír y agita su mano como despedida. Le devuelvo el móvil y me voy de ahí directo a la caja.
Otra razón más por las que odio venir al supermercado.
No sé porqué siempre este tipo de situaciones me pasan a mí, menuda suerte. Igual no pienso negar que la chica es muy bonita, pero eso no quita lo molesta que es.
Luego de pagar todo, salgo del lugar y me adentro al auto de mi cuñado, su espléndido Ferrari negro. Mi hermana se casó con un gran tipo, tremenda suerte tiene. Llego a casa, doy un portazo cuando término de pasar con todo y bolsas.
-Anda, tira la puerta, no hay problema - mi madre aparece por la puerta de la cocina.
-No me molestes, suficiente tengo con esa chica que me puso de malas en el súper.
-¿Logró ponerte el humor peor que siempre? No creí que eso fuera posible - pongo las bolsas sobre la mesa.
-Ya vez que sí - respondo tajante.
-Jayden, ¿piensas vivir así de amargado toda tu vida? - llevo una mano a mi barbilla, fingiendo pensar en su pregunta.
-Sí, moriré pronto después de todo, rotundamente sí - me fulmina con la mirada.
-Te he dicho que no hables de esa manera, tanto pesimismo te hace daño.
-Mercy, estaré en mi habitación, y no me molestes, por favor - empiezo a subir las escaleras.
-No seas igualado, niño - reprende.
Le doy un pulgar arriba y me adentro a mi recámara.
Ya bastante he tenido por hoy, primero esa chica y luego mi madre, jodidas mujeres y sus formas de arruinar mis momentos de paz.
_______________________________
¡Hey!
Acá el primer cap, no es la gran cosa, pero es una pequeña probadita de lo que se viene. Jayden es un amor, ¿cierto? :v
Voten y comenten, ya las leo.
El Jayden y yo las loveamos.
¡Besos!
ESTÁS LEYENDO
Tentación mortal #2
RomanceLa vida de Jayden no ha sido precisamente la que todo chico de 20 años lleva. Está destinado a lidiar con un tumor en el cerebro siempre, o por lo menos hasta que puedan operarlo. Odia estar enfermo, odia tener ataques constantemente, odia el no pod...