Tentación mortal #2

Capítulo 9.

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Pongo los platos sucios en el lavabo, observando a Jax, quien ladea su cabeza en mi dirección.

-Tu madre va tardar un par de horas, ¿hacemos algo divertido? - asiente entusiasmado.

Lo bajo del taburete, justo en eso tocan el timbre de departamento. Ambos nos echamos a correr, reímos al llegar a la puerta.

-No puedo creerlo - murmura Grace al verme.

-Hermanita - le sonrío divertido.

Me abraza ligeramente, luego choco mi puño con el de mi cuñado. El pequeño abraza y besa la mejilla de los dos, feliz por la visita.

-¿Cómo es que ahora eres el niñero de mi sobrino? - pregunta Ronan cuando estamos sentados en el sofá.

-Es una larga historia, tu hermana es la responsable de todo - ríe.

-No lo dudo, está algo loca, como la tuya - susurra lo último.

-¡Te oí, tonto! - golpea su brazo, causando que yo suelte una ligera risa.

<<Estos dos se aman demasiado, ojalá yo pudiera tener una relación así>>

-Sabes que te amo, preciosa - la rodea con sus brazos, ella sigue haciéndose la indignada.

Le doy un par de autos de juguete a Jax, él empieza a juguetear con ellos en el piso.

-¿Que tal va el embarazo? - Grace me mira.

-Tengo dos meses, Jayden, tampoco es como si fuese a parir mañana - pongo los ojos en blanco.

-Lo que quiero decir es, ¿qué se siente tener un bebé dentro de ti? - forma una sonrisa vaciladora.

-Todavía ni se mueve, lo único que he sentido dentro de mí es el pene de Ronan - niego exasperado, el susodicho se parte en carcajadas.

-Tendré unas húmedas y para nada agradables pesadillas esta noche, gracias por la información - mi mirada fulminante los hace volver a reír.

Nos quedamos unos segundos en silencio, eso hasta que las imprudentes preguntas de mi hermana me amargan el momento.

-¿Paula sabe sobre tu enfermedad? - respiro hondo, negando con la cabeza.

-Se lo diré cuando crea que es el momento indicado, mientras tanto no quiero que nadie le mencione nada, por favor - asienten, compartiendo una mirada cómplice entre ellos.

-¿Entre ustedes pasa algo? - le dirijo una mirada rara a Grace.

-No sé a qué te refieres, pero no. Es un milagro que estemos viviendo juntos, al principio casi nos queríamos asesinar - reímos.

-Eso mismo pasó con nosotros, tal vez ustedes terminen enamorados también - niego rápidamente.

-Que Dios no lo quiera - niega divertida.

-Sólo pasábamos a comprobar que realmente eras tú, ya nos vamos porque tenemos la primera cita con el ginecólogo - se levantan, yo sonrío.

-Cuñado, si yo fuera tú cambiaría a ginecóloga, no creo que sea lindo que otro hombre le vea el tesorito a tu chica - murmuro.

Sé que Grace odia que la moleste, pero yo amo hacerlo como buen hermano que soy.

-¡Ah, pero si ya se lo dije a tu hermana, pero no quiere hacerme caso! - se cruza de brazos como niño pequeño.

-¡Jayden! - suelto una carcajada.

-Hagan sus cosas, y cuando quieran pueden venir a visitarnos - Jax asiente con una sonrisilla.

-Vale, nos vemos - salen del departamento, miro al pequeño.

-Sígueme - ambos caminamos hasta mi recámara, tomo unas cuantas cosas y nos volvemos a la sala.

El enano se sienta a trazar líneas de colores en el cuaderno que le he dejado junto con los lápices, emocionado con su primer dibujo. Yo me acerco al sofá grande, sacando mis pinceles de diferentes tamaños y mis pinturas. Pongo algo de música clásica, dejándome llevar por la paz que se siente en el lugar.

Mi lista de canciones termina cuando mi dibujo sobre la pared está hecho completamente. Unas ramas de árbol y unos pájaros negros adornan en la pintura blanca de la pared, dejándole un respaldo hermoso al sofá. El pequeño de los Davis sonríe viendo el dibujo.

-Nito - murmura.

-¿Es bonito? - asiente, sonrío simplemente.

El sonido de unas llaves se escucha, seguido entra Paula con su mochila de siempre sobre sus hombros.

-¡Hola! - su hijo corre a su encuentro, ella lo levanta en brazos con una sonrisa.

Aveces quisiera ser como ella, tener esa sonrisa en el rostro siempre a pesar de las adversidades.

-¿Cómo estuvo tu día? - pregunto acercándome a ellos.

Dejo un beso en su mejilla y le ayudo a cargar su mochila.

-Estuvo bien, gracias por preguntar. - su mirada se dirige hacia la pared, sus labios se entre abren un poco. - ¿Y eso?

-Quise hacer un pequeño dibujo, espero que no te moleste que lo haya pintado en tu pared.

Niega con una sonrisa.

-Es hermoso, tienes un gran talento que no sabía que existía.

-Tengo muchos talentos, quizá te los muestre pronto - susurro sobre su oído.

-Siempre tan pervertido, Allen - muerdo mi labio inferior.

-No hablaba de eso, pero ya que malpensaste todo, también podría mostrarte aquello - sus mejillas se ponen rojas.

-No he pensado mal sobre nada.

-¿Segura? - mi sonrisa vaciladora la hace evitar mi mirada.

-Muy segura, lo que quiero decir es que tu obra de arte me encantó - le guiño un ojo.

-Estoy seguro que no sólo mi dibujo te encanta, si no yo también.

Y con un beso en la mejilla la dejó estupefacta, pensando en esa declaración que probablemente es cierta.

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¡Holays! xD

¿Me extrañaron? Yo sé que sí, babys. Les dejé la obra de arte del Jayden en multimedia.

Espero que les haya gustado el cap, hecho con musho amor :^ Voten y comenten qué les pareció, por favor.

¿Les gustaría que el siguiente capítulo lo narrara Paula? :3 Dejen su comentario aquí si es lo que quieren.

¡Besos!