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Al abrir los ojos Taylor estaba mirandome. Sonrei al ver la preocupacion en sus ojos.
- Por que tan preocupada - susurre nego dando una sonrisa incomoda y yo suspire. - Ronald solo quiere molestar, no tienes por que preocuparte. - se quedo inmovil. La verdad era que no tomaba sus palabras como algo serio, estamos hablando del primo de Cassiel.
- No lo quiero cerca de ti - la mire un largo rato, cuando habia cresido tanto.
- No lo volvere a ver. - asintio y no pude evitar lanzarla a la cama y aplastarla. Escuche sus gritos y risas.
Al salir de la casa me dispuce a terminar el trabajo pronto para volver cuando Caleb despertara y llevarlos a dar un paseo.
Todo consistia en entrar en el despacho disparar y salir sin problemas ni inconveniente.
Las calles desoladas lo hacia mas rapido, pose mis ojos al cielo y la brisa acaricio mi rostro. Al mirar el edificio frente a mi supe lo que habia que hacer.
Cubri mi rostro y tome el arma en mis manos, al entrar me dirigi hacia el despacho, la secretaria abrio los ojos sorprendida y yo sonrei. Di un golpe en la mesa y grite esta se callo al suelo y yo asenti.
Mientras lo hacia imagenes de mi hermana pasando por lo mismo atravesaron mi cabeza. Entre al despacho y sin pensarlo dispare. Que do muerto al instante, ahora a correr.
Al salir a la calle respire profundo y quite la mascara para correr calle abajo, a lo lejos escuche las patrullas, al girar en uno de los tantos callejones alguien choco conmigo.
Me detuve y levante la mirada Ronald me observo con curiosidad. Tenia la respiracion a mil por hora y la adrenalina en mi sangre lo mire nervioso pues se suponia que el no estaria frente a mi.
En ese momento las patrullas se escuchaban demaciado cerca, abri los ojos y Ronald me miro a los ojos. Me removi incomodo y este tomo mi brazo y me empujo contra la pared de cemento cuando las patrullas pasaron frente a nosotros.
Deje de respirar cuando su cuerpo se acerco y su respiracion choco con mi rostro. Me quede inmovil, sonrio de lado y acerco mas su rostro, movi el rostro a un lado y busque en mi cintura el arma.
- Te estoy ayudando - susurro cerca.
- No necesito tu ayuda - dije molesto, cuando la patruya se alejo lo empuje.
Levanto las manos y las cejas, ese simple movimiento me dejo mas incomodo.
- Aun eres un crio, de no ser por mi te hubieran encontrado, meresco un pago no crees.
Sonrei levantando el rostro y mirandolo - que quieres - asintio dando otro paso hacia mi.
- Tienes algo que me esta volviendo loco - suspire cansado de su estupides - trabajemos juntos.
