Harry: ¡Sara! .- Gritó desde su coche mientras Dana y yo salíamos de la Universidad.
Dana: vete con él, yo he quedado con Niall para tomar algo .- Nos despedimos con un beso y me acerqué a mi novio.
Harry: sube .- Dijo con una sonrisa abriendo para mí la puerta derecha del copiloto.
Yo: ¿por qué no me avisaste de que vendrías a recogerme? .- Pregunté poniéndome el cinturón.
Harry: ¿no te ha gustado mi sorpresa? .- Arrancamos el coche y se adentró en una calle diferente a la que me iba yo para llegar a mi casa.
Yo: ¿sorpresa? .- Dije sin entender.
Harry: te invito a comer en el nuevo restaurante que abrieron hace unas semanas, es un pequeño regalo adelantado por tu cumpleaños.
¡Mi cumpleaños, lo había olvidado!, mañana cumpliría diecinueve años. Y este era el último mes para acabar la Universidad y... ¿volver a España?. Pero es absurdo, ¿por qué estoy saliendo con Harry si en un mes me iré a Sevilla y no le volveré a ver en mi vida?, ¿qué voy a hacer?. Por el momento me decidí por ocultarlo.
Harry: mañana tendrás muchas sorpresas preciosa .- Añadió.
Después de unos minutos paramos en un bonito restaurante con mesitas fuera. Harry me ofreció una silla caballerosamente y se sentó frente a mí.
Harry: podrías haber dejado tu mochila en el coche .- Dijo mirando la carta del restaurante.
Yo: llevo mis cosas, no me fío nunca .- Sonreí.
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Narra Dana:
Yo: ¿salís esta misma noche? .- Pregunté por teléfono.
Padre: sí .- Contestó el padre de Sara .- Esta noche llegaremos a Madrid y cogeremos el primer vuelo que sale a las doce de la noche, tardará alrededor de dos horas y media en llegar a Londres, de todas formas tu madre y yo nos presentaremos en el sitio ese que acordamos a las dos de la tarde.
Yo: pero recuerda, cuando llegueis al hotel debeis llamarme para avisar, no queremos fastidiarle la sorpresa a Sara .- Sonreí, Niall estaba a mi lado comprando unas camisetas elegidas por mí para Sara, lo sé, mentí a Sara, pero era la única forma de que no sospechase nada.
Padre: entendido, pero tendré que estar como mucho tres días porque mi trabajo no me permite más tiempo, quizás tu madre se esté un par de semanas y hasta os podeis volver con ella a España, ya que queda un mes.
Mi cara entristeció y miré a Niall, no le dejaría por nada del mundo, me daba igual, si tenía que quedarme aquí para poder estar con él, así lo haré.
Yo: vale, hasta luego y no te olvides el regalo, por cierto, ¿qué es? .- Pregunté.
Padre: los amigos de clase, tu madre y yo le hemos hecho un álbum de fotos y comprado varias cosas, seguro que le encantará. Bueno, te dejo, voy a preparar la maleta, hasta luego Danita .- Yo reí, no me llamaban así desde los doce años.
Niall: ¿van a poder venir? .- Yo asentí con una amplia sonrisa.
Dana: ¡tengo muchas ganas de ver a mi madre! .- Exclamé alegre .- Y me encantará ver la cara de Sara cuando vea a su padre.
Niall rió al verme tan ilusionada, me sujetó la cintura y me robó un beso.
Niall: vamos guapa.
Fuimos a casa y Niall me ayudó a hacer deberes, yo no quería, pero él se empeñó.
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