Mayo recién nacía, anunciando la mitad de la primavera. Jacqueline había sido reincorporada en contra de su voluntad a "The Legacy", lo cual parecía haber contentado a todos, casi como si se tratara de un chiste.
"¡Tontos!", pensaba mientras cosía la bandera. ¿Qué tanto andaban risueños? ¿Cuál era la gracia de que el capitán la castigara con ese tipo de trabajos tan insignificantes? ¡Listo! Una puntada más y...
—¡Auch...! —Se pinchó un dedo que, pronto, llevó a la boca—. ¡Rayos!
—¿Estás bien, Jack? —Terry inquirió atando unos cabos.
—¡Solo me pinché, maldición! —exclamó terminando con la labor—. ¿Por qué diablos no me dejan hacer lo que sí sé?
—¡Pregúntale al capitán; está allí!
—¡Por supuesto que le preguntaré! —aseguró poniéndose de pie dejando la bandera sobre un barril—. ¡Le preguntaré y le exigiré, porque no puede tratarme como a un niño enclenque! —giró atropelladamente, llevándoselo por delante.
—¿Terminaste con eso, Jack?
—S-sí, capitán —habló turbada.
—¡Qué bueno, porque mi cuarto necesita ser aseado!
—¡En seguida, señor! —Se hizo a un lado para ir al camarote. Él la quedó mirando con una sonrisa y, luego, subió al puente, dónde Erick estaba a cargo del gobierno.
—Se te ve alegre, "capitán" —Jones canturreó.
—Pues, tengo mis motivos.
—¿Se pueden conocer? —cuestionó ladino.
—Por supuesto. Todo va marchando bien; protesta, mas, no me desafía.
—¿Lo de las nalgadas funciona de maravillas, eh? —habló divertido, pues, hasta ahora, no había sido necesario, con solo sugerirlo, Jack empalidecía y se volvía dócil.
—Pues, sí. —Badalló, mientras, el maestre carcajeó por lo bajo—. ¿Qué sucede? —Lo miró.
—Nada; nada —respondió aún entre risas y Janick lo estudió sonriendo, considerando que ese hombre, no tenía arreglo.
Días más tarde, avistaron un galeón español para lo cual se prepararon para engañarlo cambiando la bandera.
—¡Por fin! —Jack exclamó—. ¡No más costuras, no más limpieza...!
—Jack, el capitán te quiere en la bodega —Bret le avisó.
—¿Qué...?
—A la bodega, mon petit —Paul sugirió con sutileza.
—¿Pero, por qué? ¡Es totalmente ingrato de su parte!
—¡Jack, no es momento de discutir! —Jones la reprendió a unos cuantos pasos. En eso, apareció Janick yendo rumbo a ella.
—¿Capitán —se arrimó a él—, por qué no me deja pelear como al resto? —La única contestación que tuvo fue una mano sujeta para enviarla hacia la escotilla que era abierta con rapidez por James y Roger—. ¿Capitán, por qué?
—Como en los viejos tiempo, Jack —Blaze descendió; al ver que ella no parecía dispuesta a seguirle, la aferró de la cintura algo molesto—. Tú te quedarás aquí y no aceptaré discusión alguna.
—¡Pero...!
—Nada, Jack. —Sacó de su cinto la pistola de Rooth, tras dejarla de nuevo tocar suelo—. Toma; ya sabes qué hacer.
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El Legado del Capitán Rooth
RomanceJacqueline Renoir, es una niña que desconoce sus verdaderos orígenes, no conoce a su madre ni siquiera en alguna pintura y se rumorea que su padre no es tal. Criada entre la indiferencia y el odio, de su padre, el Barón Renoir, y de una sociedad de...