Capítulo 32

799 54 2
                                    

Me levanto como nueva, súper descansada, me hizo bien dormir temprano anoche, aunque no me desvelé en el avión.

Me pongo mis pantunflas levantándome de la cama y mi teléfono suena en la mesita de noche noto que es un número desconocido y lo alcanzo y contesto:

—Bueno, quién es? —Pregunto tragando saliva.
—Mi amor. —Escucho su voz y sonrío.
—¡Hola, mamá! Cambiaste el número
—¿Como amaneciste? Si, cariño, estoy hablándote del otro móvil. ¿Va todo bien ? —Pregunta.

—Todo bien, ya más descansada y tú ? ¿Y papá, melody y ryan? —Le pregunto.

—Están todos bien, amor. —Responde de inmediato.

—Ah bueno, y cómo va todo mamá?

—bien, cariño, ahora voy a llevar a mel al colegio y tú, desayunaste? —Me pregunta.

—Voy a desayunar algo ahora y tú?

—Yo por igual, pues bueno ahorita te llamo por videollamada que no tengo mucho saldo y se me hace tarde, te cuidas amor.

—Igual Mamá, te quiero.

—Y yo a ti, Mi princesa.

•••

Me doy una ducha y me pongo esto.

Bajo y me quedo de pie un momento un poco nerviosa, porque la verdad me siento un poco extraña en la casa, no soy de las personas de entrar en confianza muy rápido

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Bajo y me quedo de pie un momento un poco nerviosa, porque la verdad me siento un poco extraña en la casa, no soy de las personas de entrar en confianza muy rápido.

En la mesa está Zabdiel y Richard, los dos me miran y yo no sé que hacer, la verdad estoy muy nerviosa, lo único que quisiera hacer es abrazarlos, la verdad solo lo hice una vez en un Meat And Greet, y siento que hace una eternidad de eso.

—Buenos días, me imagino que tu eres Mar porque ya conocí a Luis y Luisana. —Me dice Zabdiel.

Sus rulos están alrededor de su frente y lleva puesto un suéter que deja al descubierto sus brazos y es naranja. Le queda muy bien ese color.

—Sí, ella misma. —Digo sonriendole y saludándolo con la mano. Saludo a Richard también.

—Me dijeron que eres de RD, una de mis vecinas. —Dice mirándome fijamente unos segundos y yo rogándole a Dios que no recuerde que fui la chica del supermercado el día.

—Así es Richard, somos compatriotas. —Le digo dedicándole una sonrisa de boca cerrada.

—Pero, yo creo que te he visto en otro lugar antes.. —Dice y lo interrumpo.

—No creo. —Digo rápidamente.

—Si, te he visto. —Replica analizando mi rostro e intentando recordar.

Ay diosito que no se acuerde.

Esto era lo que faltaba, pero tarde o temprano el sabrá que soy esa chica, porque Erick lo sabe perfectamente.

¿Un Famoso Se Podría Enamorar De Su Fan ? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora