¿Un Famoso Se Podría Enamorar De Su Fan ?

Capítulo 40

Erick nos interrumpe y me toma por sorpresa verlo aquí.

¿Que hace aquí?

Es un cinico para aparecerse así después de lo que pasó.

—Mar.. Puedo hablar algo contigo? —

—Por Dios, Erick. Crees que no es suficiente con la pelea que armaron allá abajo? —Replico.

—De acuerdo, disculpame por eso. —Dice de repente.

—No es a mi a quién tienes que pedirle disculpas. —Le digo mirando a Yashua.

—Mar.. —Me dice mirándome con frustración.

—Si? —Le pregunto enarcando una ceja.

—Por favor quiero hablar algo contigo acá afuera. —Asiento y salimos dejando a Yashua en mi cuarto.

Él estaba ajeno a nuestra conversación, al parecer está satisfecho con lo de la pelea.

—Que es lo que me tienes que decir? —Pregunto ya estando en el pasillo.

—Qué le dijiste a Christopher cuando me pelee con tu amiguito? —Pregunta con interés.

Es que el cree que soy estúpida? Es obvio que él sabe que le dije y habló sobre eso con Chris.

Pero por qué viene con esa excusa?
¿Será una excusa para hablarme? Si? No.

—No le dije nada, le dije que ustedes tenían problemas y ya. —Respondo y suelta un suspiro.

—Gracias, por no decirle nada. —Me dice dedicándome una sonrisa de boca cerrada.

—De nada. Pero tú tienes que hacer algo. —miro fijamente esos ojos verdes que lucen oscuros en este momento.

—¿Es en serio? ¿Tengo que hacer algo? —Me pregunta haciéndose el desentendido.

—Erick.. —Entrecierro los ojos.

—Mmm.. —Se sostiene el mentón pensando.
—Bueno está bien, pero hay una condición. —Me dice y se acerca poco a poco hacia mi.

—Que? Mas condiciones, cubanito? —Retrocedo disimuladamente, pero me mantengo firme.

Es que cuando Erick se acerca hay peligro.

—Sí, oye me gusta que me digas cubanito. —Susurra con esa voz juguetona.

Que te convence de hacer todo lo malo que el te proponga.

—Que bueno. —Pronuncio con frialdad alejándome de él.

El siempre con su jueguito de acercarse poco a poco para besarme y luego decir que es un error. No quiero caer de nuevo en eso.

—Y bueno.. V-vas a disculparte si o no? —Pregunto, mi voz sonando un poco temblorosa.

—Sí, pero no te he dicho mi condición. —Me dice y lo miro ceñuda.

—Entonces estabas hablando en serio? —El asiente y sonríe como un demonio, yo entorno los ojos.

—Bueno, pues adelante, dime y yo te diré sí o no, y no vayas a salir con alguna tontería. —Le advierto y el sonríe.

—Que me des un abrazo. —Suelta de golpe y con seriedad. No hay rastro de diversión en él, está serio como pidiéndome que haga eso de la manera mas honesta.

Dios mio. Siento como a mi estomago llegan esos unicornios y mi corazón retumba en mi pecho.

—Quieres.. un abrazo? —Suelto una carcajada y el frunce el ceño.