·Forbidden Love·

·Capítulo 28 : Dudoso·

<Anastasia>

El correr de los días 

Entro en la planta de Logística como estos últimos días lo estuve haciendo, mude algunas de mis cosas a la oficina de Oliver mientras esta suspendido, bien merecido tiene el castigo, se lleva mejor con los papeles que con los mismo empleados de su planta, y Owen .. bueno él sigue en lo suyo. 

Tras hacerse cargo de mucho de lo que Oliver dejo se ocupo bastante en concentrarse en trabajar y no follar tanto con sus zorrinovias. Aprendió que cuando se trabaja se debe concentrar mucho mas que en retirarse antes del horario. Una lección bien aprendida para él, cosa que en la universidad no cumplía ni la mitad de las materias. 

Entro saludando a la mayoría, los conozco en su parte y en otros no, hombres mas que mujeres. ¿Por qué? .. porque los hombres mas simples de llevar, no tienen peleas y son mas enfocados, y en cambio las mujeres que vienen son mas de carácter varonil, solteras en su preferencias. 

Las relaciones entre empleados esta prohibido a menos que la apruebe yo, porque soy la dueña y porque si me parece justa la causa la apoyo, sino pido que traten de contenerse. Mezclar lo profesional con lo laboral hizo tener ese problema con Oliver y la zorra de Katie Down. 

Este piso al contrario de presidencia, es todo en temática pura como el blanco, al pasar todo el día planificando, dibujando, borrando, pintando, etcétera, hace saturar a la cabeza de colores y formas, lo que el blanco a la vista calma y modera ese estrés, ayuda a desestresarse de toda actividad mental constante de planificación. 

Muchos no lo notan, pocos me lo agradecen el placer a la vista de no pensar nada por unos minutos, cuenta con tres salas enormes de juntas, equipado con lo mejor en tecnología y cuenta con su propia sala de descanso, aquí se trabaja mas duro que en otras plantas y por eso deben tener de todo propio en su planta. 

Owen se mudó en la oficina que era de Katie Down, que raramente estaba del lado de Oliver, ¿casualidad o coincidencias?, no creo en ninguna de las dos. Cada tanto hago visitas a las plantas para revisar como va el trabajo pero me doy cuenta que me deje estar al no venir. 

Las juntas de las mañanas las hemos dejado hasta que vuelva Oliver. 

-¡Buenos días a todos! - digo al pasar antes de entrar en la oficina. 

-¡Buenos días señora Steele! - gritan algunos cuando termino de entrar. 

Darwin creo que sufre mas esta repentina mudanza mía a esta planta, entre Owen, Oliver y yo, lo tenemos loco de atar. Se reparte como puede pero trato de no depender mucho, me las arreglo sola con Massimiliano. 

-¡Primita! - dice Owen algo alegre, golpetea suave la puerta abierta.

-Owen, ¿que tienes para mostrarme? - le digo pero se viene a tirar a mi regazo dejando la puerta cerrarse sola - ¿que pasa ahora?

-Perdón .. perdóname, no quise insultar de esa forma, ¡estaba ofuscado por culpa de la idiotez de Oliver! -  suspiro y lo abrazo. 

-¿Y tu error? ¿no cuenta? - es grandote para que se tire conmigo pero lo dejo. Por suerte están las persianas bajas que dan a las mesas de trabajo. Hay pocos cubículos, sólo mesas largas de trabajo. 

Los arquitectos estrellas tienen su oficina y escritorio de trabajo, si necesitan guardar cosas están los archiveros o casilleros personales. 

-¡También! .. - besa subiendo por mi cuello hasta mi boca. 

Nos quedamos mirando, y pienso por dentro ¿que haré con este niño?

-Owen .. ¿sabes que lo hago por el bien tuyo y de la empresa? - le pregunto esperando que sea consciente de su castigo.