·Forbidden Love·

·Capítulo 32 : Arrepentimiento·

<Anastasia>

Estoy por entrar en la cocina para almorzar mis batidos como siempre, pero un guardia de la planta uno me agarra justo.

-Señora Steele .. disculpe que le interrumpa pero hay unos hombres desconocidos en la sala de entrada del edificio junto al señor Owen, ¿los dejo pasar? - ¿que trajo a la mafia?.

Massimiliano ordena a los guardias no dejar pasar nadie a menos que estuvieran avisados, lo raro es que Owen a esta hora debería estar trabajando a mil revoluciones, no venir con un grupo de gente a casa por aburrimiento. 

Lo pienso regañar pero cuando acompaño al guardia a la primera planta para ver me quedo congelada, esta casi toda mi junta sacando a Oliver. 

¿Por qué diablos los trajo? y ademas de eso, ¿con que responsable dejo la empresa a cargo?.

Sí por mas raro que parezca esta situación me preocupo primero por la empresa antes de lo que me pasa. 

Cierro los ojos por no correr en camisón y bata para echarlos a la calle. La impotencia no me deja pensar bien pero como debo averiguar cuales fueron los motivos, debo hacerlos subir a la segunda planta para tomar un café por lo menos, parecen ratas de laboratorios encerrados, pido que los suban pero antes voy con Fausto. 

Me recibe estudiando mi cara, me sirve un batido de frutas y otro de yogur de arándanos. Le digo que subirán invitados, y se pone a hacer café, cuando oigo la puerta abrir, veo entrar a Owen con Wes, Avan y Zachary. 

Sigo concentrada en desayunar, es mi segundo día sin ir, y me siento mas plena que nunca. ¿Por qué no me tome vacaciones? .. ¡ah si! la constructora. 

-Primita .. ¡he traído a los chicos! tienen algo que decirte - arqueo una ceja y espero mientras tomo mi yogur de arándanos. 

Los tres no se quedan quietos sino que están mas nerviosos que nunca. 

-¿Piensan hablar o me van a hacer esperar todo el día? - digo al terminar mi yogur y sigo con tomar mi segundo batido de frutas, esta rico esta mañana, tal vez sea la imagen que tengo delante de mis ojos que hace disfrutarlo. 

-¡A mi me arrastraron aquí sin tener la menor idea de lo que pasa! - dice Avan que se acerca a tomar los cuatro cafés que sirvió Fausto que se retira a otra sala imaginando que queremos hablar a solas. 

-¡Yo también! Owen nos dijo que debíamos venir a convencerla de volver - miro hacia Owen, Zachary se encoje de hombros despreocupado para sentarse junto a Avan. 

Toman café, en realidad Owen trajo a todos para que Wes tenga el apoyo de ellos y de una vez arregle las cosas conmigo. 

-¿Y tu Wes? sólo has venido para caminar de un lado a otro? - lo digo casi en un suspiro y me quedo mirando su rostro, para él nada es como en este momento. 

-Jefa .. lo siento, ¡no lo haré! - dice pero me parece haber escuchado mal. 

-¿Que lo sientes? ¡no te entiendo! - le digo al levantarme de la mesa para servirle unas galletas a estos rufianes que trabajan para mi, después de las palabras diré algo que los pueda impactar. 

-¡Lo siento por haber faltado compromiso a mi puesto de trabajo con la empresa! .. no pienso hacer la encomienda especial del gobernador, averigüé por detrás y al parecer es mas jodido de lo que me comento, esa mujer esta embrazada, Lexington por mas que vaya a juicio tiene todas las de perder .. - aplaudo de manera muy pausada, casi con sarcasmo.

Todos se me quedan mirando y parecen entender por qué estuve faltando estos días al trabajo, pero no sólo es por Wes, es por todo, creo que me voy a tomar en serio lo de las vacaciones, desde que tome esta empresa dejé de tener tiempo para mi.