Puntadas

Décima puntada (episodio 1)

Mel y yo nos quedamos dormidas sobre su cama, nos despertamos bruscamente pocos minutos después cuando mi mama llego al cuarto, la puerta estaba con seguro así que golpeó fuertemente, mire la hora en el reloj de pared que tiene mi amiga en su cuarto, ya era de madrugada, me levante a abrir y descubrí a mi madre del otro lado.

Ella entro, Mel se restregó los ojos y bostezo tapándose la boca, yo estaba más dormida que despierta, no sabía si pasaba algo afuera o si mi mama simplemente se aburrió de estar sola, Melissa se sentó y mi mama se sentó a su lado.

- ¿Qué paso? –le pregunto a la vez que bostezo

Marcos y Shawn pidieron a todo mundo que se retirara y se fueron con unos señores en el Jeep, me pidieron las llaves del auto por qué no alcanzaban y yo tengo que cuidarlas

- ¿necesitamos que nos cuides? –digo sentándome a su lado

-  No creo que pueda protegerlas de los verdaderos peligros pero al menos hago el intento

Le sonrío, trato de recostarme sobre la cama pero hay muy poco espacio, me recuesto sobre la pared, Mel recuesta la cabeza sobre las piernas de mi madre y entonces añade.

- ¿Me dirán que paso?

Asiento y empiezo a contarle todo a mi madre, exceptuando la parte del diario, dije que Shawn y yo pensamos que quizás fue al bosque y por eso fuimos, mi madre hizo un comentario de eso "¿no pasó nada esta vez? Dilataron mucho" le dije que solo hablamos y que intentaremos ser amigos, le conté de la pequeña conversación que tuvimos sobre la guerra en el auto y que cuando llegamos solo cruzamos pocas palabras.

Omití todo el asunto del romance entre Marcos y Melissa, mi madre es genial pero no creo que entienda que un hermano y hermana se puedan amar como ellos, si para mí que soy la mujer con la mente más abierta que existe en el planeta es complicado ahora para ella, también omití sobre el abuso que sufrió Mel, es algo demasiado privado.

No me gusta omitir estas cosas ni ninguna a mi mama porque para ocultar algo tengo que disfrazar otras cosas con mentiras y a mi madre no le miento, no es la primera vez que le miento, de niña lo hacía, tampoco es que mi madre nunca haya dicho una mentira y aprendí de una santa, mi madre mentía mucho y constantemente para hacerme parecer como buena chica ante mi padre.

Cuando llegue a la adolescencia y me di cuenta que ella me entendía comencé a confiar más en ella y de repente las mentiras ya no fueron necesarias, le comencé a contar todo a mi madre como si fuera una amiga y es porque así se portaba ella y fue así como me enamore de mi madre, ella es genial y muy bella, si mi madre no fuera bella mi padre no se hubiera fijado en ella.

Mi padre era un hombre muy apuesto, ella lo conoció cuando él se hizo el examen médico por primera vez en el ejército, ella dice que en aquel entonces no era tan guapo, dice que entre más pasaban los años más atractivo se ponía, mi mama estaba haciendo pasantillas o algo así, estudiaba enfermería, ella era mayor que mi padre por dos años pero siempre aparentaba menos.

Una vez vi una foto de ellos dos juntos, ella tenía el rostro de una niña de quince cuando en realidad tenia veinte y un cuerpo voluptuoso, siempre ha sido delgada, ni si quiera el embarazo le afecto, sus senos son más grandes que los míos, ella dice que le crecieron más después que yo nací, su cintura es como la mía, pequeña y un trasero enorme, incluso es algo que a ella le molesta de sí misma, mi mama y yo nos parecemos pero ella es más alta.

Papa de joven no era tan fortachón como cuando murió, era igual de alto y tenía los mismos ojos claros, el mismo cabello negro, liso y sedoso, las fotos de aquel tiempo quedaron en mi memoria y todos aquellos que las vimos porque fueron destruidas.