9. Un día normal

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[Jungkook]

El resto de la semana, no pasó algo realmente interesante. Todos los días eran lo mismo. Por la mañana, iba a mis clases de rap y me sentaba en el mismo lugar detrás de Hoseok, ya que parecía que eso le molestaba a Yoongi (aunque eso sólo fueron los primeros días; después pareció indiferente ante mi presencia detrás de su amigo), además de que no había hecho ningún amigo en esa clase y mis únicos conocidos eran los chicos ya mencionados y Namjoon.

Después de esa clase, siempre iba a las clases de música, donde Yoongi tocaba su piano y Jin su guitarra. Por mi parte, yo había estado practicando, así que sentía que cada día era mejor al momento de sincronizarme con el resto de la orquesta. Lo que descubrí, es que me encantaba la manera en que Yoongi-hyung tocaba el piano, pues parecía que lo hacía con un gran sentimiento, como si el alma se le fuera en ello, y eso me parecía admirable; aunque eso no quitaba el hecho de que siguiera pensando en él como el mismo animal salvaje de siempre.

Entonces, cuando era hora del almuerzo, siempre me sentaba con Jimin, Tae y Jin. Era divertido estar con ellos, ya que Tae siempre tenía algo gracioso y sin sentido qué decir y Jin nunca dejaba de lado sus chistes malos (aunque uno no podía evitar reírse gracias a su graciosa risa contagiosa), además de que Jimin también era divertido y bueno conmigo. Se sentía tan bien estar con ellos, especialmente porque eran los primeros amigos que tenía en toda mi vida, amigos con los que sentía que de verdad podía contar.

Luego del almuerzo, me tocaba ir a la clase de canto, donde también me sentaba cerca de mis amigos; donde, además, me di cuenta de lo talentosos que eran: Jin con su voz tan melodiosa, Tae con su gruesa pero suave voz y Jimin (quien tenía, en lo personal, la voz que más me gustaba) con su suave y aguda voz. En verdad los admiraba, ya que podían lograr alcanzar notas que yo aún no podía.

Era entonces, cuando me iba a la clase de baile, siempre acompañado de Jimin (y donde también mirábamos a Hoseok). Me encantaba aprender nuevos pasos de baile o nuevas estrategias para inventar nuevos pasos de baile propios, y no dejaba de admirarme de Jimin, ya que él de verdad sabía mucho al respecto y siempre me ayudaba con pasos que no podía hacer. Por su parte, Hoseok tampoco era tan malo, de hecho, era uno de los mejores, tal como el director ya había dicho días atrás. Sin embargo, él tenía sus propios amigos en la clase, por lo que no me acercaba demasiado a hablar con él, en especial porque muchas veces lo pillaba mirándome de una manera extraña. No entendía a qué se debía, pero tampoco me importaba demasiado como para querer preguntárselo directamente.

Después, debía irme a mi clase de actuación, donde tomaba clases con Tae y Jin, quienes eran realmente buenos en ello. Me sorprendía porque cuando Tae debía actuar, su expresión no era la misma de niño inocente, como siempre, sino que lograba controlarse y actuar de acuerdo al papel que le daban.

A la última hora del periodo de clases, tenía pintura, donde compartía clases con todos, y siempre me sentaba cerca de mis tres amigos, mientras que al otro lado siempre estaban juntos el animal salvaje, su esposa y su compinche. Había notado que la mayoría del tiempo, incluso a la hora del almuerzo, se sentaban lo más alejados de nosotros, como si fuéramos unos totales desconocidos; aunque Tae siempre intentaba hablarles y, a excepción de Yoongi, los otros dos siempre eran agradables con él, pero a nosotros casi no nos hablaban.

Después de clases, cuando nos tocaba cumplir con nuestros castigos, siempre formábamos las mismas parejas que al principio, y gracias a esto, había pasado muchísimo tiempo con Jimin, lo cual no me desagrada. Además, no me había preguntado nada acerca del incidente del lunes pasado, cuando mi camisa se había llenado de sangre, lo que me hacía sentir más relajado con él. Jimin era muy interesante y agradable, aunque había notado que no tenía una gran autoestima, por lo que siempre procuraba decirle lo genial y talentoso que era, con lo que no tardaba en aparecer su típico sonrojo, el cuál le quedaba perfecto en sus mejillas porque lo hacía ver muy tierno.

Beyond The Scene (Jikook, Yoonseok Y Namjin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora