Beyond The Scene (Jikook, Yoonseok Y Namjin)

16. La primera noche

[Jin]

Una vez que me bañé, fui directamente a la habitación que desde ahora compartiría con Namjoon. Los demás ya se habían ido a sus respectivas habitaciones y las luces estaban apagadas. Al entrar a la habitación, miré que mi compañero de cuarto estaba tendiendo algunas mantas sobre el suelo a un lado de la cama.

—¿Qué estás haciendo? —le pregunté mientras entraba y cerraba la puerta detrás de mí.

—Una cama improvisada —me dijo él sin dejar de hacer su cometido.

—¿Para qué? —seguí preguntando mientras me sentaba en la cama y lo veía.

—Porque no dormiré contigo —contestó. Cuando terminó, tomó una de las almohadas de la cama y la puso en el suelo, sobre las mantas.

—No es como si pensara hacerte daño —le dije frunciendo el ceño, pero él no me contestó.

No sabía en qué pensaba, y tampoco es como si quisiera saberlo. Tal vez, después de todo, seguía teniéndome asco.

—Aunque, tampoco te rogaré para que duermas en la cama —murmuré mientras me acostaba.

Él apagó la luz y se acostó en el suelo sin agregar nada más.

—Buenas noches —le dije, cerrando los ojos.

—Dulces sueños, princesa —lo escuché decir entonces, y por alguna razón, lo imaginé sonriendo mientras lo decía, teniendo como última esa imagen mental suya antes de dormir.

************

[Hoseok]

Ya estábamos acostados en la habitación que compartíamos, Jungkook y yo. Él estaba a un lado de la cama y yo estaba en el otro, sin tocarnos. Lo único en lo que podía pensar era en los ruidos del exterior y en lo que habíamos hablado en la sala minutos antes de venir a la cama. Sabía que lo del director era algo estúpido, que era demasiado exagerado que alguien como él fuera capaz de asesinar a alguien, pero eso no quitaba el hecho de que la casa en sí daba bastante miedo.

Sobre la ventana, veía que entraban las sombras de los árboles que se movían gracias al viento y algunos otros ruidos de los animales del bosque que rodeaban la casa. Aunque podría ser que no fueran ruidos de los animales, sino de algo más. Temía que, por la ventana, la cual Jungkook había dejado abierta, entrara otra polilla o alguna clase de insecto infernal.

Tal vez estaba haciendo demasiado ruido con mi respiración, porque entonces Jungkook llamó mi atención.

—¿En serio tienes tanto miedo, Hoseok? —me preguntó de repente.

—Sí —contesté, pero noté que mi voz temblaba un poco —. ¿Tú no? —le cuestioné, esperando que compartiera mis temores.

—Claro que no —dijo riendo.

—No te rías, no es gracioso —lo reprendí, al ver que él estaba impasible.

—Vamos, calma —me dijo, sin dejar ese tono animado de su voz —. No tengas miedo —insistió —. ¿No hay nada que pueda hacer para poder calmarte? —me preguntó.

—¿Por qué tan interesado? Ni siquiera somos amigos —le recordé.

—¡Ouch! —exclamó —. Yo sí te consideraba uno —susurró a mi lado —. De todas formas, a como vamos, siento que no me dejarás dormir por la noche con tu respiración tan agitada. Vamos —insistió —, deja que te tranquilice. ¿Hay algo? —preguntó.

—Bueno —comencé a hablar —, hay una canción que Yoongi me cantaba antes cuando tenía miedo para calmarme —le dije.

—¿Yoongi?, ¿cantando? —inquirió comenzando a reír —. No me imagino a ese animal cantando —dijo.