Beyond The Scene (Jikook, Yoonseok Y Namjin)

87. Lo más lindo de la noche

[Jin]

Una vez que bajamos de la rueda de la fortuna, vimos que los demás nos estaban esperando abajo, así que nos acercamos a ellos.

—No, de ninguna manera —decía Yoongi, totalmente en desacuerdo con algo que Tae había dicho, ya que se encontraba mirándolo a él.

—¿Por qué no? Él aceptó —se defendió el menor.

Los demás sólo veían la escena: Jungkook con una sonrisa de complacencia, Jimin con una pequeña sonrisa, casi burlona, y Hoseok con nerviosismo.

—¡He dicho que no! —exclamó enojado.

—Está bien, Yoongi —le habló su novio, pacíficamente, aunque sin dejar su turbación de lado.

Ante sus palabas, el otro suavizó su expresión, mirándolo con un poco de preocupación.

—¿Qué pasa? —preguntó Namjoon en ese momento, pues ya estábamos muy próximos a ellos.

—Hobi-hyung se subirá a la montaña rusa —informó Tae con emoción, ignorando la mirada que le lanzaba Yoongi.

—¿Hoseok?, ¿en serio? —inquirió, sin poder creérselo, mirando al susodicho.

—No, no se va a subir —siguió Yoongi con su negativa, y entonces tomó a Hoseok de una mano y comenzó a caminar, llevándoselo con él.

Los menores rieron y los siguieron, sin dejar de burlarse, incluso Namjoon. Yo los seguí también, un poco preocupado con la situación. Entendía por qué Yoongi estaba tan preocupado, ya que Hoseok era tan miedoso y le tenía un pavor horrible a las alturas y tenía entendido que se mareaba fácilmente; quizás hasta creía que podría colapsar en media montaña rusa o algo así. Fuera como fuera, Yoongi no quería que se arriesgara de ninguna manera, pero yo sabía que el orgullo de Hoseok también estaba en juego.

—Estaré bien —decía Hoseok, intentando zafarse de su agarre.

—No, no es cierto —lo contradijo, sin pensarlo siquiera.

—Deja de portarte como una madre protectora, hyung, para eso tenemos a Jin-hyung —dijo Jungkook, caminado a su lado, alcanzándolo.

—Sí, no se va a morir por subirse al juego —le siguió Tae.

—Voy a estar bien —insistió el otro, haciendo que el mayor se detuviera, aunque sin soltarlo aun.

Pareció pensar en ello un momento mientras miraba hacia el suelo con el ceño fruncido. Después de unos segundos, finalmente cedió.

—De acuerdo —murmuró, soltando su agarre, pero no se le veía muy convencido.

Ante su respuesta, los menores comenzaron a dar saltitos de alegría y a tomar a Hoseok de cada lado, comenzando a llevarlo hacia la montaña rusa. Namjoon sólo rio un poco, y los siguió, mientras que Yoongi soltó un pequeño suspiro y comenzó a caminar detrás de nosotros.

—Ya verás que será muy divertido —decía Tae.

—Sí —continuaba Jungkook —; la mejor parte es cuando subes y luego bajas a toda velocidad hasta que sientes que tu cabeza se puede desprender de tu cuerpo por tanta presión —le dijo, con normalidad, consciente de la manera en la que se lo tomaría el otro, y es que era muy fácil dejarlo caer ante el miedo.

Aunque el chico hubiera aceptado, ya no se le veía tan decidido cuando ya nos encontrábamos frente a la montaña. Vi que habría mucho los ojos y miraba expectante la manera en la que el vehículo iba con rapidez sobre los rieles de ésta, subiendo y bajando, y en el fondo se escuchaban las exclamaciones de la gente que gritaba de emoción o de miedo.