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~Flashback~

— Lali, ¿no querés jugar conmigo?

— Mi mamá dijo que no podía, perdón — dijo la pequeña, la cuál estaba sentada en el piso jugando con su única muñeca.

— Por favor... ya casi no jugamos juntos. ¿Te pasa algo?

— Mi mami dijo que no podía jugar con vos, y la tengo que hacer caso.

— ¿Es qué hice algo?

— No sé.

— Lali, por favor. Vení, tengo que enseñarte algo. Es solo un segundo.

Lali suspiró y se levantó del piso. Dejó la vieja muñeca, la cuál había sido el último regalo de su padre, quién había muerto antes de que ella naciera, a un lado con mucho cuidado y se fue con Peter.

— Ahora, ¿a dónde vamos?

— Al jardín.

— Hace mucho calor allí.

— Tonta, dale solo es un minuto, después te dejo tranquila, ¿si?

La nena suspiró y le siguió. Tenía 5 añitos, y aunque era muy bajita para su edad, era muy muy madura. Ser huérfana de padre la había ayudado a crecer mucho. Sabía hacer cosas ella sola, y también a cuidar a su mamá y a protegerla. Sí, Majo y Lali se protegían mutuamente.

Los pequeños llegaron al jardín. Por aquel entonces, aquel árbol, aún estaba dentro de lo que era el jardín, aunque después, lo pusieron afuera del área. Justo, los pequeños se pararon en aquel árbol, abajo de él. Aquello que iba a pasar próximamente, sería una de las escenas más importantes de su vida.

— Ayer ví una linda película — dijo Peter sonriendo.

— ¿Y? — Lali se tomaba muy en serio las palabras de su madre sobre no hacerle caso a Peter.

— Y me gustó que el protagonista hiciera una cosa al final.

¿Qué cosita sería?

— ¿Qué cosa? — le preguntó Lali. La pequeña no tenía ni idea de lo que iba a pasar a continuación. Era demasiado inocente todavía, mucho más que Peter. Lali aún no había comenzado el colegio, de momento, su madre la estaba enseñando a leer y a escribir en casa, cuando Majo tenía ratos libres. Peter ya una al colegio, y era de los nenes más inteligentes de la clase.

— Esto — Peter se fue acercando mientras tenía los ojitos cerrados. Lali se quedó quieta, a la espera de que pasara lo que tenía que pasar.

Peter acercó sus labios a los suyos, y la dio un tierno beso en la boca a Lali. Ella estaba anonadada, ni siquiera podía hablar. Peter se fue alejando lentamente:

— ¿Lali?

Lali estaba callada.

— ¿No te ha gustado? ¿No me vas a hablar más?

Lali simplemente negó con la cabeza.

— No te enojes linda. Yo solo quería darte un besito, me gustas mucho de verdad. ¿Querés ser mi novia?

— Somos muy chiquitos. Hasta los 15 no voy a tener novio, se lo he prometido a mi mami.

— A los 15, te voy a pedir que seas mi novia, y no podes decirme que no. ¿Me lo juras?

— Te lo juro.

— Nunca voy a tener otra novia que no seas vos.

— ¿De verdad? — preguntó la pequeña de forma inocente.

— De verdad, no me quiero perder a la chica más linda del mundo por nada.

Lali lo abrazó, no podía dejar de hablarlo a Peter por mucho que la dijera su mamá que no debía hacerlo.

Pero, por una de las ventanas, Claudia lo había visto todo. La daba asco que su hijo hubiera besado a la nena de la mucama. A una simple nena, que en un futuro iba a trabajar como prostituta, o mucama... no iba a ascender en la sociedad, Claudia lo tenía claro.

Pero Lali y Peter se pasaron toda la mañana jugando en el jardín, disfrutando todo lo que podían. Ellos no sabían, que aquella iba a ser su último día juntos.

~Fin de Flashback~

El Perfume - TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora