Por JR:
Lentamente abrí mis ojos, encandilándome un poco con la brillante luz frente a mí. Cuando por fin pude distinguir un poco el entorno que me rodeaba, pude notar que me encontraba en una habitación de hospital. Aunque había una pregunta que no paraba de rondar en mi cabeza. ¿Qué es lo que me había pasado? ¿Cómo había llegado ahí?
De pronto, la puerta de la habitación se abrió, permitiéndome ver como tres mujeres ingresaban en esta. De inmediato supe que una de ellas era la enfermera debido a su ropa. Pero las otras dos...¿Quiénes eran?
—JongHyun, hijo, que bueno que por fin despiertas.—habló la mayor de las tres. Sus ligeras arrugas la delataban. Aunque no entendía muy bien a quien se refería, ¿Acaso me estaba hablando a mí?—Dime, ¿cómo te sientes, te duele algo?
—L-lo siento, pero...¿Quiénes son ustedes?—pregunté confundido, desconociendo por completo la identidad de aquellas dos mujeres. Peor aún, desconociendo mi propia identidad.—Mejor dicho, ¿quién soy yo?
Ambas mujeres me miraron con asombro y desconcierto, volteándose rápidamente hacía la enfermera, la cual revisaba todos los aparatos a los que estaba conectado y con los cuales los médicos me monitoreaban a cada rato.
—Enfermera...¿Qué le pasa a mi hijo, porqué no me reconoce?—preguntó de nuevo la mujer mayor, la cual miraba fijamente a la enfermera en busca de una respuesta.
—No lo sé, señora, lo mejor será que vaya por el médico.—respondió la chica con tranquilidad, haciendo una leve reverencia antes de encaminarse a la puerta.—Enseguida regreso.
—¿JongHyun, de verdad no nos reconoces?—preguntó esta vez la chica menor, la cual por cierto era bastante linda.
—Lo lamento pero, no, no tengo ni idea de quienes son ustedes.—respondí incómodo, encogiéndome de hombros. No sabía muy bien que decir en aquellos momentos. En mi cabeza solo había un enorme vació, tal y como si acabara de nacer. Era como si hubiesen borrado todos mis recuerdos.
—Hijo, mírame bien, soy yo, tu Omma.—indicó la mujer mayor, tomando suavemente mi mano entre las suyas, dedicándome una cariñosa sonrisa. Una que me hizo estremecer sin saber muy bien por que.—¿De verdad no logras recordar a tu madre, a la mujer que te dio la vida?
—Ya le dije que no. No insista, por favor.—alegué realmente incómodo, sintiendo como un agudo dolor se apoderaba de mi cabeza.
A los pocos minutos, el médico hizo aparición. Según explicó, mi amnesia se debía al fuerte golpe que recibí en la cabeza, justo al caer de unas escaleras por accidente. Pero eso tampoco lo recordaba, en realidad, no recordaba nada de nada. Ni siquiera quien era yo.
Pasaron los días, pero mi mente seguía como toda una hoja en blanco, dispuesta a no recordar. El médico dijo que sería cuestión de días, semanas o meses para que recuperara mi memoria y todos mis recuerdos. Incluso dijo que podría tardar años, todo dependiendo del nivel de estrés al que pueda llegar a estar o sentir en algunas situaciones. Pero, como dijo, todo era cuestión de tiempo.
Cuando por fin el hospital me dio de alta, me dirigí a casa de mi madre, donde según ella yo seguía viviendo. Es más, estaba a nada de casarme con la chica linda. Su nombre era JaeBin. Aún si ellas dos me ayudaban, diciéndome como era mi vida antes del accidente, yo aún no estaba del todo seguro. Yo...no tenía forma alguna de cerciorarme de sus palabras.
Pero que puedo decir, es mi madre. ¿Cómo podría desconfiar de ella? ¿Qué clase de hijo desconfiaría de su propia madre? Algo agobiado, intenté retomar mi vida, esa que me fue interrumpida abruptamente. Por lo mismo, decidí avanzar con los planes de boda que dejé pendientes, ya que esta estaba muy cerca, casi a la vuelta de la esquina.
No sabía si estaba haciendo lo correcto, esperaba que sí, pero después de todo las cosas no parecían ser tan malas. Tenía una buena madre, una que se preocupaba por ayudarme a recuperar la memoria, mostrándome fotos de cuando era pequeño. Y por otro lado, tengo una prometida realmente linda, una que está decidida a ser la futura madre de mi hijos.
El día de la boda, todo había salido perfecto, JaeBin se veía hermosa, como una novia sacada de un cuento de hadas.
—Estoy tan feliz, JongHyun, no puedo creer que por fin soy tu esposa.—comentó con alegría, acurrucada bajo uno de mis brazos, esto mientras nos encontrábamos de regreso a casa. JaeBin había accedido a pasar nuestra luna de miel en casa, más que todo por comodidad y por orden de mi madre.—No te imaginas cuantas noches soñé con este día, con ser tu esposa. Te prometo que voy a ser la mejor, te voy a dar muchos hijos, todos los que tú quieras.
—Estoy seguro de que así será, Binnie.—mencioné de vuelta con una cálida sonrisa, solo para luego depositar un tierno beso en sus labios.
Pocos minutos después, llegamos a casa, notando como un auto se encontraba estacionado fuera de ella. Sin tomarle mucha atención, el auto se adentro en la casa, dejándonos bajar a los pocos minutos. JaeBin no se separaba de mí en ningún instante, es más, me tenía agarrado por el brazo mientras daba pequeños saltos de emoción. Lo único que podía hacer era sonreír ante su ternura.
De pronto, una voz que por alguna razón se me hizo familiar, hizo aparición detrás de nosotros. En cuanto nos volteamos, pude observar a un...¿Chico? La verdad no estaba seguro, tenía ropa de chico pero sus facciones, son tan finas como las de una chica. Incluso más finas que las de la propia JaeBin. Su piel era aún más blanca, casi podría decirse que estaba hecha de porcelana. Y sus ojos, había algo en ellos, algo que me hacía perderme en su mirada.
—Kim JongHyun.—llamó con un tono de voz bastante débil, desconcertándome por completo. Sus ojos, ahora que los miraba bien, estaban cristalizados. Pero...¿Porqué? ¿De dónde nos conocíamos? ¿Cómo es que sabe quien soy y donde vivo? Se supone que este lugar está algo apartado de la ciudad.—¿Qué significa todo esto? ¿Quién demonios es ella?
—Discúlpame, pero...¿Tú y yo...nos conocemos?—pregunté confundido, no pudiendo apartar mi mirada de la suya. Por alguna razón, sentía que lo conocía pero...¿De dónde? ¿Quién era ese misterioso y lindo chico de cabellos rubios? ¿Porqué su voz se me hacía tan familiar?
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''En mis recuerdos''
FanfictionJR y Ren son dos jóvenes enamorados, a tan solo unos meses de su boda. Pero, una pequeña visita a casa de su madre, por parte de JR, cambiara las cosas. JR perderá la memoria, mientras que Ren, deberá luchar para recuperar al amor de su vida. ¿Podrá...