Por JR:
—¿Está seguro que esto me ayudara, doctor?—pregunté desconfiado, dudando si en verdad aquellas pastillas que el médico me estaba recomendando fuesen de ayuda para mi problema de amnesia.
—Totalmente seguro, como ya le indiqué antes, este es un tratamiento a largo plazo, ajustándose a su condición médica.—explicó de nuevo con amabilidad.—Basta con que tome el medicamento a la hora indicada y poco a poco irá recuperando la memoria. Aunque tampoco puedo prometerle que recuperará el cien por ciento de sus recuerdos.
—Entiendo, doctor.—comenté un poco más tranquilo aunque no del todo convencido. La verdad es que no tengo nada más que perder. El doctor Park es muy conocido, por no decir el mejor en su área y en todo el país.
Antes de venir, investigue un poco sobre él y su trabajo, y para ser sincero no encontré un solo paciente al cual no haya podido ayudar o solucionar su problema. Sin tardar mucho más, salí de aquella oficina dispuesto a ir por ese dichoso medicamento. Y mientras me encontraba de camino a la farmacia no pude evitar pensar de nuevo en ese chico, Ren. Por alguna razón no he podido sacarlo de mi pensamiento, entre más trato de recordarle o de recordar lo que pudo haber existido entre los dos, no logro conseguir respuesta alguna.
Solté un suspiro, sintiendo la mirada del taxista sobre mí, haciéndome sentir aún más patético. ¿Sí en verdad había tenido algún tipo de relación con ese chico, debería ser capaz de recordarlo, no? Y esa pregunta no hizo sino hacerme sentir de cierta forma culpable, ya que si estaba comprometido con JaeBin, eso significaría que le estuve siendo infiel y quien sabe por cuanto tiempo. Una vez el taxi se detuvo frente a la farmacia, me di prisa en pagar y bajar de este. Al hacerlo, mi mirada se centro en un grupo de amigos, o al menos eso parecían.
Aunque en cuestión de minutos pude reconocer al menos tres de ellos, eran los mismos del otro día en el restaurante. La loca chica castaña que me había dado una buena bofetada, el chico alto y...también estaba él, Ren. Y por más que estuviese al otro lado de la calle, podía observar con claridad como este lloraba y como sus amigos le consolaban. En ese instante sentí un gran odio por mi mismo, pese a no recordarle, no puedo ni siquiera imaginar que yo fuese capaz de jugar con un chico tan...tan...tan lindo como él. Y sí, no lo niego, el chico ese tiene su encanto.
Rápidamente sacudí mi cabeza y me dispuse a entrar en la farmacia, sé que entre más rápido comience mi tratamiento, más pronto podré responder cada una de esas preguntas sin respuestas que dan vueltas en mi cabeza. Una vez dentro, tuve que esperar unos diez minutos hasta que la fila desapareciera y por fin fuese mi turno.
—Buenas tardes, joven Kim.—saludó la chica en caja con una amable sonrisa.
—Buenas tardes...—respondí un tanto desconcertado, por la forma en como me saludaba, podría jurar que lo hacía como si ya nos conociéramos de hace años.
—Déjeme adivinar...¿Viene por lo mismo de siempre?—preguntó la chica aún sonriente y amable.—Sabe, ya se me hacía raro que ni usted ni su novio se dieran una vuelta por aquí, con lo frecuentes que son.
—¿D-disculpe?—pregunté de vuelta, pasando algo de saliva con dificultad. Sus palabras me habían dejado atónito. ¿Lo mismo de siempre? ¿Novio? ¿Frecuentes? Nuevas dudas surgieron en mi cabeza.—¿A qué se refiere con lo de siempre?
—Bueno, ya sabe, los condones y el lubricante.—mencionó en un tono bajo, a penas audible para los dos.— ¿Es qué acaso ya se le olvido? ¡Oh! No me diga que viene por otra cosa, si es así le ruego una disculpa.
—No...yo...solo necesito esto por ahora, gracias.—dije mientras le hacía entrega de la receta del doctor Park.
De pronto noté como los ojos de la chica se abrían con sorpresa, releyendo la receta una y otra vez. Al ver como esta no parecía abandonar sus pensamientos no tuve otra opción más que aclarar mi garganta, logrando ganar la atención de la chica de nuevo.
—Lo lamento, ahora mismo le traigo su medicamento.—comentó nerviosa, justo antes de darse media vuelta y perderse entre los estantes llenos de medicamentos que se encontraban tras la ventanilla. Un par de minutos después regreso con una pequeña caja color blanca entre sus manos.—Aquí tiene, joven Kim.
—Gracias.—comenté de vuelta, sacando mi cartera para pagarle. Una vez me entregó el cambio me dispuse a salir del lugar, pero la voz de la chica me hizo detener a pocos pasos de la puerta.
—Por cierto, espero que la prueba de embarazo haya salido positiva.—mencionó a mis espaldas con un tono alegre, aunque yo no compartía el mismo sentimiento de alegría. Al contrario, me sentí realmente angustiado y culpable.
¿Una prueba de embarazo? Eso quiere decir que ese chico, Ren...¿Podría estar esperando un hijo mío? No, no puede ser cierto. De lo contrario...¿Para que compraría tantos condones y lubricante? La sola idea hacía que la cabeza me diera vueltas, lo mejor era regresar a casa lo antes posible y descansar.
Rápidamente salí de la farmacia y por extraño que suene, no pude evitar buscar con la mirada a esos chicos de antes. Pero, como era de esperarse, ellos ya no estaban. Incluso opté por cruzar la calle, esperanzado con poder verles. Y es que, a decir verdad, sentía una enorme necesidad por hablar con ese chico, de aclarar las cosas. Pero por más que buscaba y registraba el parque con la mirada, no fui capaz de dar con Ren, ni con ninguno de sus amigos que le acompañaban.
Y justo cuando decidí tomar un taxi y volver a casa, mi mirada se enfocó de nuevo. Esta vez no en alguien, sino más bien en algo. Había un gran árbol en ese parque, y por alguna razón, se me hacía de cierta forma familiar. Como si ya lo hubiese visto antes, como si tuviese alguna especie de recuerdo en particular con él. Sintiendo ahora un fuerte e intenso dolor de cabeza. Sin pensarlo, tomé el primer taxi disponible y regresé a casa. Tratando de no pensar en nada durante el camino, dejando mi mente totalmente en blanco. Aunque me era imposible, ya que las palabras de esa chica con respecto a la prueba de embarazo, retumbaban en mi cabeza como un enorme eco. Uno el cual no dejaba de repetirse una y otra vez.
![](https://img.wattpad.com/cover/106989767-288-k108158.jpg)
ESTÁS LEYENDO
''En mis recuerdos''
FanfikceJR y Ren son dos jóvenes enamorados, a tan solo unos meses de su boda. Pero, una pequeña visita a casa de su madre, por parte de JR, cambiará drásticamente no solo sus planes, sino también sus vidas. JR perderá la memoria, mientras que Ren, deberá l...