La historia oculta de " Una Disculpa Al Modo Sajayin" ¿cómo se habrán conocido Vegeta y Bulma? ¿qué fue lo que causó que estos dos se quedarán juntos?
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Terminé de colocarme mis tacones y tomé mi bolso. Llevaba un vestido muy provocativo que había comprado hace tiempo pero no había tenido la oportunidad perfecta para estrenarlo.
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Hasta hoy.
Salí de mi cuarto y cheque mi reloj de bolsillo. Eran las siete de la noche. Iría a uno club nocturno cerca de aquí y cumpliría lo que le dije a Vegeta.
Es un idiota por creerse la gran cosa cuando no lo es. Me divertiré con otro, obviamente sin tener sexo. Solo pasar el rato.
Bajaba las escalaras de mi casa y como era de esperarse Vegeta se encontraba cenando en el comedor. Al verme casi se atragantaba con la comida, acción que hizo que sonriera y bajara las escalaeras aún más sensual.
-Ya me voy-dije y tome la perilla de la puerta principal. Al abrirla, Vegeta la había cerrado prohibiendo mi salida. Que rápido, pensé.
-¿A dónde crees que vas vestida así?-me interrogó con el ceño fruncido.
-Te dije que saldría a divertirme.
-No
-¿No? Já, ¿quién te crees para prohibirme salir? No eres mi padre ni nada por el estilo-lo desafíe.
-He dicho que no y punto-me miró desafiante.
-Ah, ¿así qué me necesitas aquí contigo?
-Claro que no. Solo que tienes que estar aquí para lo que se me ofrezca.
-Imbécil. Yo no soy tu sirvienta, y ya dejate de payasadas y quitate de mi camino-lo empuje un poco haciendo que tambaleara un poco y que su expresión no fuera nada favorable. Equivocada decisión tomé yo.
Vegeta gruñó y me tomó de ambas muñecas acorralandome así en la puerta ya mencionada. Se acerco a mi enfurecido hasta quedar a pocos centímetros de mi cara.
-¡No me vuelvas a poner un dedo estúpida! -me advirtió. Sonreí divertida y solté un suspiro.
-Y si lo hago, ¿que?, ¿volverás a violarme? Recuerda que ahora yo disfruto de eso-lo miré victoriosa. Era un idiota si pensaba salirse con la suya-¿qué acaso no puedes estar sin mi? ¿Tanto me quieres a tu lado?-prosegui.
-Bah...-me soltó-largate a acostarte con quien quieras-se volteó y me dio la espalada.
-De acuerdo-abrí la puerta-no lo iba a hacer pero si es lo quieres lo haré-terminé y salí dejando al hombre con la palabra en la boca.
