Gormiti: eclipse eterno

13. Captura

Entonces el portal se cerró, dejando a Obscurio atrapado en la tierra y a su ejército en Gorm

Se paró y su herida en la espalda comenzó a arder

-Ah, claro, primero tengo que arreglar eso -Entonces acercó sus manos a donde estaba su herida y la cerró, juntando la carne con sus garras, haciendo una costura provisional- Eso debería bastar por un tiempo. Ahora lo que queda es estar... -Entonces chupó su dedo y midió hacia donde iba el viento- Dos kilómetros al suroeste en... -Miró la posición del sol- tres horas. Suficiente tiempo.

Menos de tres horas después, exactamente dos kilómetros al suroeste.

El día era brillante, ahora que el ejército de la oscuridad se había marchado el sol brillaba alto en el cielo, como lo hacía normalmente.

En un laboratorio en las afueras de la ciudad, una alarma comenzó a sonar a toda fuerza, en menos de cinco minutos, una fuerza entera de soldados y científicos partió para un punto específico de un radar muy específico. Exactamente dos kilómetros al suroeste del templo de la oscuridad.

Nada de eso fue coincidencia. Obscurio no tomó un lugar y un momento aleatorios, todo fue profetizado cientos de años antes por su colega y compañera, Lunaris la vidente. Así es como Obscurio sabía los posibles resultados de la batalla, y cuál le beneficiaba mas.

Pero Lunaris había fallecido sin haberle dicho cómo resultaría todo, asesinada por el autoproclamado "caballero de la luz".

Obscurio apenas sabía lo que debía hacer, pero eso no era un problema, pues el titiritero estaba por conseguir marionetas nuevas.

Una vez que llegaron tanto militares como científicos, rodearon a Obscurio, que estaba sentado con las piernas cruzadas, meditando, sonriendo. A diferencia de los dos pobres tipos a sus costados, que estaban por amarrarlo con unas correas diseñadas para soportar a un camión en caída, supuestamente, el no podría romperlas, ni quería hacerlo.

Entonces le dispararon unos dardos tranquilizantes que lo durmieron. Lo amarraron y lo metieron en una jaula en un camión. Despertó en una caja de cristal en un edificio. La verdad, se sentía algo sorprendido, no por el cristal, podría romperlo si quisiera, pero Lunaris le había especificado todo lo que debía hacer, la cantidad de días que debía esperar, hacia donde debía ir, todo, aún con su vasto conocimiento en el multiverso y la magia, el nivel de detalle de las predicciones le era sorprendente.

-¿Te gusta? Pedí que lo agrandaran para ti -Dijo una voz, Obscurio Instantáneamente se volteó a ver el origen.

Del otro lado de la caja, unos metros después del límite de esta, había una pared con otro cristal, detrás de este había un hombre con saco y corbata, uno de los científicos, que hablaba a través de un parlante.

-¿Huh?

-¿Entiendes lo que digo?

Obscurio movió la cabeza de arriba hacia abajo

-De acuerdo...

El científico comenzó a anotar un montón de datos en su libreta, incluyendo un pequeño dibujo de Obscurio, y un detalle de sus alas y manos, entonces comenzó a hacer notas de voz en su grabadora portátil.

"Día 1, estoy emocionado de que me eligieran para estudiar al sujeto. Adjunto haré una descripción detallada del mismo." Parecía demasiado entusiasmado 

"Mide unos dos metros y medio. Casi todo su cuerpo parece presentar entre tonos negros y violáceos, no lleva prendas distinguibles. Su rostro se asemeja al de un animal de la familia de los felinos, pero posee cuernos de un bovino o un rumiante, es difícil saber, pues presenta un patrón nunca antes visto en algún otro cuerno de animales, pero eso no es ni remotamente lo mas asombroso." 

"Presenta alas similares a los de un animal de la familia chiroptera, pero cubiertas de espinas. Están plegadas, claro está, calculo que, suponiendo que puede volar, desplegadas deben medir entre cuatro y seis metros." Entonces hizo una pausa para tomar agua.

"Es bípedo y sus piernas y pies son similares a las nuestras, lo cual indica unas ciertas similitudes con la raza humana, incluso parece entender nuestro idioma. En el tórax parece musculoso, si fuera humano, sería uno extremadamente saludable. No presenta vellos distinguibles. Su mano derecha parece ser similar a la humana, ¿Podrá manipular objetos complejos como herramientas o maquinarias?, Lo cual me lleva al siguiente punto, su mano izquierda parece estar hecha de alguna clase de metal recubierto de espinas, como un lucero del alba, un arma medieval." 

"Si me preguntan, honestamente no creo que sea de este mundo, en ninguna parte de este planeta la evolución ha provocado cambios tan... particulares en un ser vivo"

Entonces Obscurio se dio vuelta, se disponía a ir a la esquina mas silenciosa de la caja, la mas alejada del parlante.

"El sujeto parece tener una especie de quemadura en el medio de la espina dorsal, mas o menos a treinta o cuarenta centímetros por arriba de la cintura, como si hubiera sido expuesta a fuego intenso por un largo período de tiempo. Comenzaré a detallar sus actitudes."

Obscurio lanzó un suspiro, cerró los ojos, cruzó las piernas y comenzó a meditar.

"El sujeto adoptó una posición a la meditación hindú, y su respiración se ha vuelto mas pesada, quizás esté durmiendo, no lo sé... Me pregunto, de dónde habrá aprendido a hace eso, mi primer pensamiento lógico es que él lo aprendió de los hindúes, que practican esa pose con regularidad, pero eso desencadena una oleada de preguntas como ¿Cuánto tiempo hace que está aquí, en Venture Falls?, pero entonces me pregunto ¿Que edad tendrá?, porque, hipotéticamente, si tuviera la edad suficiente, podría ser que los hindúes hallan aprendido esa pose de él, y no al revés, ¿verdad?"

Obscurio  esbozó una sonrisa, mientras el científico seguía hablando y escribiendo y hablando aún más, desarrollando teorías e ideas que probablemente lo harían sonar como un loco cuando se los entregue a sus jefes, pero eso no parecía importarle, de hecho, parecía feliz de haber sido él el encargado de investigar este revolucionario descubrimiento.

"... Creo que... Podemos aprender mucho de él, parece cooperador. Quien sabe, tal vez él aprenda algo de nosotros."

"Oh, seguro que voy a aprender mucho, de hecho, ya me estás inundando con conocimiento, pequeña bolsa de carne" Pensó el señor de la obscuridad.