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Capítulo 8

Me acomodo en el asiento para disponerme a dormir un poco, estoy realmente cansada y necesito dormir cuanto antes, cierro mis ojos para descansar cuando no pasan ni dos segundos que James y Jasón comienzan a susurrar.

No les digo nada, solo me sigo haciendo la dormida para poder oír.

-Crees que resista la presión y los riesgos de ser narco?

-La verdad no lo se, viste como mato al tipo solo por que la molesto. He pensado que lo mejor es que no se involucre en este mundo.

-James, toda tu familia vive y mure por la organización, era el deber de tu padre enseñarles a los dos todo sobre este mundo. y el creyó que alejándola nadie la conocería y no estaría en peligro nunca y mira.

-Se que papa, hizo todo lo posible para mantenerla oculta y sin embargo hasta dieron sus vidas por seguir ocultándola, pero medio mundo sabe quien es, y hasta la bautizaron como la diosa oculta de Broblocks.

-Tu hermana tiene que aprender hacer quien debe ser, ya es hora de que el puesto de tu madre lo tome ella. Tienes que entrenarla James, Broblocks necesita tener a su otra heredera.

-Mis tíos están de acuerdo con el entrenamiento que se le comenzara a dar, pero necesito tenerla lejos de la ciudad, ya la secuestraron una vez y se que si Connor lo logro. Los demás van a intentarlo también.

-Ya vimos que en mi casa no la podemos tener, en la tuya tampoco y el las bases de mandos menos, pero si podemos llevarla a una de las casa que usábamos de entrenamiento a las afueras de la cuidad, allí nadie sabrá su ubicación y así aprovechamos de mandar a las otras chicas que nos trajeron para que se entrenen y tu hermana no esta sola durante todo ese tiempo, y una vez el entrenamiento terminado todas salen listas para matar y tu hermana a dirigir parte de Broblocks.

-Me gusta esa idea, solo hay que movilizar todo para que lleven a las demás a las a fueras de la cuidad y las instalen en una de las casa, y después yo me encargo de llevar a Amy.

Un suspiro se escapa de mis labios, haciendo que la conversación cese.

Así que abro mis ojos poco a poco, y me acomodo mejor en el asiento. Recuesto mi cabeza sobre el cristal de la ventanilla y comienzo a mirar el paisaje nocturno que otorga la carretera.

-Amy, estas bien?

No aparto la mirada de la ventanilla a pesar de que mi gemelo me esta hablando.

-Porque no estarlo, solo quiero descansar y después me llevas a donde tengas que hacerlo y listo. No es la primera vez que me alejan por un tiempo.

Oigo el suspiro de mi hermano, y siento como el asiento a mi lado se hunde y una mano roza mi brazo delicadamente, giro mi rostro para encontrarme esos ojos azules con gris, mirarme atentos.

-Amy, nadie te va alejar. James solo te llevara a que te den un entrenamiento de cómo usar armas y cosas así, unas vez que estés bien entrenada volverás a tu casa.

Asiento algo cansada y Jasón lo nota, y me jala hasta dejarme sobre su pecho.

-Que haces?

-Estas cansada, debes dormir y te estoy ofreciendo que me uses de almohada.

Sonrió levemente y me acomodo mejor, no se en que momento pero mis ojos me comienzan a pesar y Jasón comienza una series de caricias en mi cabello que me relajan mas, llevándome a cerrar los ojos y caer en un sueño profundo.

Me estiro un poco y doy la vuelta sintiendo la suave superficie y la seda que rosa mi cuerpo.

Me incorporo de un brinco y miro mi alrededor, estoy en una habitación amplia y muy organizada. Me levanto y comienzo a caminar por toda la habitación mirando cada detalle detenidamente.

Escucho unas voces y camino a la puerta que esta a un costado, la abro cuidadosamente y cierro tras de mi. Camino por el lugar hasta llegar a una sala realmente hermosa.

Miro a mi gemelo y a su amigo, sentados en su sofá frente a una enorme televisión. El sonido de unos tacones me hace girar mi cara para encontrarme con una cabellera rubia acercándose.

Miro a mi gemelo levantarse y rodear la cintura de la plástica y darle un dulce beso en los labios, mientras Jasón solo los mira con mala cara, sobre todo a la rubia.

Observo a mi hermano perderse con la rubia tras una puerta y cansada aun y con hambre, me acerco al sofá donde esta Jasón.

-Me puedo sentar?

Jasón me mira de reojo y palmea el asiento a su lado, no lo pienso y me dispongo a sentarme.

-Dormiste bien?

Giro mi rostro para verlo, y me encuentro con esos ojos azules con gris que hipnotizan.

-Si, gracias. Necesitaba descansar realmente.

Sus ojos me escanean y una sonrisa traviesa cruza su cara.

-No es nada, creo que necesitas cambiarte de ropa.

Lo miro con una ceja arqueada y este solo me mira divertido.

-Vamos, además no creo que quieras escuchar los gemidos de la plástica novia de tu hermano.

Asiento y nos levantamos del sofá, directo a la salida del departamento. Bajamos en el ascensor en un total silencio hasta llegar al estacionamiento, Jasón me guía por el lugar hasta llegar a una camioneta gris último modelo.

Ruedo los ojos, y subo a esta. Miro a Jasón rodear la camioneta y subir en su lugar poniendo en marcha la camioneta, miro las tiendas y edificios. Y las personas caminar despreocupadamente por las calles y siento un poco de envidia.

A los pocos minutos miro que nos estamos estacionando frente a una gran tienda de ropa, giro mi rostro hacia Jasón y este me mira detenidamente.

-Espera, no tengo nada de plata encima.

Este me mira y baja de la camioneta, la rodea y me abre la puerta y ayuda a bajar.

-No tienes que pagar nada, yo te invite a salir de mi departamento. Así que yo pago todo.

Me sorprendí un poco al escuchar lo del departamento, y un poco incomoda al saber que el pagara la ropa que elija y por lo que veo. Todo dentro de esa tienda es realmente caro y yo no me quiero aprovechar de Jasón.

-Jasón, todo allí adentro se ve que es muy costoso, no quiero que gaste tanto dinero solo para que me quite este vestido.

Lo mire rodar los ojos, y sentí su mano tansuave tomar la mía, y jalarme sutilmente para comenzar a caminar a la entradade la tienda. 

El NarcotráficoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora