BE THE ONE » duamila

Come back to me

-Woah-los chicos levantaron el alcohol y bebieron de inmediato. Dua rodeó mi cintura con su brazo y me atrajo a ella, besando mi mejilla varias veces, el aroma a frutas se mezclaba con licor, la música en el máximo volumen y algunos chicos bailando cerca de donde nos encontrábamos.

Comencé a reír y ella continuó, en el sofá se unió a nosotras Charli, con una nueva ronda de shots.

Parecía que no se cansaban de beber, y yo seguía sin probar nada.

-Te quiero, te quiero, te quiero mucho- Dua me dio otro beso, y apoyó más su cuerpo al mío. Ashlee estaba afuera con Troye y dos chicas más, los podía ver desde la ventana riendo y charlando.

-Camila, tú vas a iniciar- Charli me entregó un shot, se lo intenté regresar pero lo negó- si es primera vez que lo pruebas, quiero estar presente y eso va a ser ahora-.

-No, no quiero beber nada-.

-Vamos cariño, solo es un poco, un trago amargo y luego tienes unos labios a los que besar-miró hacia Dua quien estaba sonriendo, levantó una ceja y me regaló un guiño.

-¿Podemos ir a otro lugar?-.

Charli lo escuchó y comenzó a reír, atenta de cualquier movimiento que Dua o yo podíamos hacer.

-Mila, eres rápida-.

Troye y Ashlee ya habían llegado junto a nosotros, otros amigos de Dua esperaban la señal de Charli para que iniciaran a beber, ella me miró seria indicando que también lo hiciera. Buscaba cómo librarme de Charli pero parecía imposible, sentí como Dua enlazaba sus dedos con los míos.

-Camila nos va a indicar-me señaló, dejado toda la atención en mi- te esperamos- los demás chicos me miraron, Dua no me respondía nada.

Vacié el alcohol en mis labios, sintiendo como quemaba al atravesar por mi garganta, mi lengua reaccionaba al amargo sabor mientras intentaba no escuchar los gritos de emoción de los demás chicos en la fiesta, la música retumbaba en mis oídos y sentí la fuerza del agarre de Dua comenzar a llevarme lejos.

Me puse de pie para seguirla, nos estaba conduciendo a la piscina. Pero en las escaleras hacia abajo, se detuvo dejando que reaccionara casi al instante.

-Te quiero mucho Camila- mis manos se posaron en su rostro, y terminé atrayendo su cuerpo a mis brazos, reposando mi cara en su cuello, respirando su perfume que aún se mantenía adherido a su piel.

-Yo igual te quiero Dua-.

Ella estaba riendo, con su abrazo alrededor de mí.

[...]

-Bien, hoy regresamos-.

-No, no quiero que este fin de semana termine- me aferré a su brazo y ella comenzó a reír.

-Vamos, hay un lugar que me gustaría que conozcas-.

Caminamos en silencio, cerca de la orilla, sentía como mis pies se hundían en la arena mojada y el mar cálido se acercaba en el camino, miré hacia atrás viendo como las huellas de nuestros pasos poco a poco se desvanecían hasta desaparecer completamente. Sujeté la mano de Dua y continuamos caminando.

Al llegar al lugar de las rocas ella me ayudó a llegar al borde, donde el paisaje se podía admirar desde arriba, el atardecer estaba iniciando nuevamente, Dua se sentó a mi lado.

Estaba jugando con su mano, mientras terminaba apoyándome en su hombro para comenzar a hablar con los pensamientos en alto.

-Nunca huí de ti, corría lejos de un sentimiento que no comprendía, tuve miedo de caer en algo nuevo, desconocido...pero lo que me haces sentir es aún más fuerte, comprendí que estaba enamorada de ti y que ya nada más debía importarme, gracias por intentar esto conmigo-.

Ella estaba mirándome de una manera en la que podía perderme perfectamente.

-Lo seguiré intentando hasta que el sol deje que salir-.