59.- Al final del día...

7.2K 692 226
                                    

Katari había desaparecido en medio de una luz cegadora, y en su lugar, estaba una mujer... una mujer de cabellos rojos y una mirada esmeralda.

Lilian Potter sostenía en su regazo a su hijo.

—¿Lily? —Severus estaba asombrado.

—Hola Sev—.

—¿Qué estás haciendo aquí? Tu estas... —.

—Lo sé, pero no pude irme, no así... tenía que protegerlo y gracias a ti pude hacerlo—.

—¿A mí? —.

Lily estaba sentada sobre sus rodillas en el suelo, mientras la cabeza de su hijo descansaba sobre sus piernas y ella acariciaba su cabello. Lentamente, Harry fue abriendo los ojos y la visión de su madre lleno su vista.

—Sabía que había algo extraño en Katari—.

—Hola hijo, has crecido mucho—.

Por respuesta, Harry se abrazó a su madre rompiendo en llanto. La había extrañado tanto y siempre estuvo ahí.

—Te extrañe—.

—Lo se mi pequeño, nunca quise dejarte—.

—¿Cómo es que estas aquí? ¿Eres su mensajero? —.

Lily sonrió, su hijo estaba en lo correcto, a medias.

—Casi mi pequeño. Nunca me fui, no realmente. La noche que fallecí, mi espíritu no pudo irse, no seguí a tu padre, no podía dejarte así. Entonces vi a Severus y primero me preocupe, pero luego vi esa mirada, ya sabes, cuando ha decidido algo y no va a dejarlo en paz, y supe que él te cuidaría en nuestro nombre. Cuando Severus conjuro ese peluche, él había hecho una promesa solemne que la magia aceptó y creo un guardián usando esa promesa y la magia que había surgido de mi sacrificio. Un guardián (o más bien guardiana) que me permitió vivir dentro de ella y mi espíritu se alimentó de la magia que la había creado—.

Severus entendió a qué se refería Lily. La magia le había permitido a Lily Potter, estar cerca de su hijo y le dotó de magia suficiente para protegerlo en momentos de necesidad. Cuando los amuletos llegaron a sus manos, ella había actuado como intermediario, al estar muerta y ser solo espíritu, la magia de los amuletos no la lastimaba y le permitía a su hijo guiar la magia de los mismos sin sufrir grandes consecuencias.

—Entonces ¿Te iras otra vez? —.

—Ese es mi destino Harry. Se me permitió quedarme para protegerte, pero ahora estas a salvo. Voldemort ha muerto y pagara por sus pecados en el otro mundo—.

—Lily, ¿Has estado viéndonos todo este tiempo? —Severus sabía que Lily estaba despidiéndose.

—Si, y debo agradecerte el buen trabajo que has hecho con Harry. Has sido un padre maravilloso para él y me alegra ver qué has encontrado la felicidad con alguien más. Ella me agrada, y estoy segura de que James estará feliz de saber que tenía una prima—.

—¿Te volveremos a ver? —Preguntó Harry ansioso.

—Algún día, cuando su tiempo aquí se acabe. Que no será pronto—.

Lily Potter se levantó, haciendo que su hijo se pusiera de pie.

>> Me tengo que ir Harry, estoy segura de que a la muerte no le importara que sea su mensajera—.

Harry se quitó los amuletos de su pulsera de cuero y se los dio a su madre. Era extraño para el pensar que su madre en realidad nunca se fue, pero reconfortante al mismo tiempo.

>> Adiós mi niño, te amo. Adiós Sev, gracias por cuidar a mi hijo—.

—No tienes que agradecer nada. También es mi hijo—.

Una Serpiente De PelucheDonde viven las historias. Descúbrelo ahora