-Tu... ¿Qué haces acá? - diablos, yo y mi mala suerte, ¿no?
Mi mirada sin poder controlarse lo recorrió de arriba-abajo, empezando por su pelo oscuro y desordenado, continuando por sus ojos de color extraño y su boca pequeña. Bajando por todo su cuerpo para volver a subir y encontrarme con sus ojos. ¡estaba para chuparse los dedos!
-Es un mundo libre... Adabella- al terminar de decir eso me dio una sonrisa pícara.
- ¿Cómo sabes mi nombre? - debo admitir que el que supiera mi nombre me dio un poco de temor, ¿acaso era un acosador?
-Me temes- ¿acaso también leía mentes, se acercó más a mi acorralándome contra la pared. Nuevamente.
-No- bueno tal vez un poco, pero eso no tenía por qué saberlo.
-Ah no, y... ¿ahora? - acerco mucho más su cara haciendo que quedara más cerca y su aliento se mezclara con el mío.
-No- iré al infierno por mentirosa
-Eres una muy mala mentirosa Ada- cuando termina de decir eso se aleja y antes de perderse entre la multitud se da media vuelta- ah por cierto me llamo Nikolaos
Cuando escuché su nombre casi pude derretirme. Su nombre en mi mente sonaba constantemente. Diablos este chico me va a volver loca.
-Hola bella, ¿Qué haces pegada a la pared?.
- ¡Mierda! Maldita sea Gordon, casi haces que me dé un infarto.
-Lo lamento- si claro, si realmente lo sintieras no te reirías.
Baboso.
-Ya... no importa.
-Y bueno ¿Qué haces acá?
-Vine con Ann- es lo único que digo. No me siento cómoda con él al lado sabiendo lo que hacía antes.
-Okay... nos vemos en la universidad.
Cuando Gordon se va puedo respirar con tranquilidad y eso acaba a la música subir de volumen y ver como Nikolaos entra a la pista a bailar muy pero muy pegado con una linda peli castaña con muy poca ropa y eso de alguna u otra forma me enfurece.
Unas manos me tapan los ojos y una voz masculina me susurra al oído haciendo que sonría al reconocerla.
- ¡Alex! - salto encima de él mientras reímos.
Alex es un amigo de la infancia que hace un año o más se mudó a Canadá. Seguíamos manteniendo contacto, pero el en ningún momento me aviso de que vendría este mes. Sabía que estaba preparando un viaje pro no para este mes se suponía que fuera para los siguientes.
- ¿Por qué no me dijiste que vendrías este mes?
-Era una sorpresa. Te extrañe mucho.
-Yo también- nos volvemos a abrazar. Lo extrañaba demasiado
-Y ¿Dónde está Ann?
-Ella debe de estar bailando, ya sabes cómo le encanta.
-Si eso imagine. Y bien ahora dime ¿Quién es el tipo de ella? Y ¿Por qué me mira como si me fuera a matar?
Cuando volteo a ver me encuentro con Nikolaos bailando con la castaña y mirándonos con su ceño fruncido.
***
Ya eran alrededor de las unas pasadas y yo ya estaba muy, pero demasiado borracha.
Alex hace mucho rato se había perdido con una chica en el piso de arriba y Ann no tenía ni cinco de idea de donde estaba.
Cuando vi a Nikolaos en la barra me empecé a dirigir hacia él, pero, me detuve abruptamente cuando la castaña salió de la cocina y se le colgó para luego besarlo.
Estaba a punto de cometer una locura y seguramente mañana me arrepentiré de esto, pero hoy culpare al alcohol.
ESTÁS LEYENDO
Tatuajes En La Piel
RomancePor culpa de perder una apuesta con su mejor amiga, Adabella tendrá que entrar a clases de boxeo donde lo conocerá. El mundo tal y como lo conocían será destruido, creando uno nuevo lleno de amor, desafío y mucha pasión.