Someone said they live together
Ran out the door together
She was holding hands with Trevor...Al escuchar la música sonar por la radio de su auto, suspiró. Yoongi no sabía demasiado inglés, pero se consideraba un músico. Así que cuando una canción llegaba a tocarle el alma con la melodía, buscaba la traducción para así, poder entenderla por completo.
Se sabía de memoria la letra de the less i know the better. Por alguna razón, el rubio se identificaba demasiado con la canción, pese a que no poseía a nadie a quien amar, tenía la esperanza de encontrar al amor de su vida en alguna parte del mundo, esperando pacientemente por él. Sin embargo, Yoongi sabía que la vida siempre tendía a hacer las cosas a su maldita manera, buscando la forma de hacernos lamentar haber nacido.
De pronto, cuando estaba completamente absorto en sus pensamientos, su auto se detuvo. Yoongi bufó molesto y golpeo el volante, sacó su móvil para ver la hora 7:45 am. Tenía exactamente 15 minutos para llegar al trabajo.
Bajó del vehículo, molesto, volvió a bufar cuando se dio cuenta del camino de combustible que había dejado justo detrás suyo. Era obvio que ese no sería un buen día; su auto tenía una maldita fuga y eso era una maldita mierda.
Tal vez sería mejor ir a pie, pero Yoongi no podía simplemente dejar su estúpido auto en el sitio. Posó la vista en la pantalla de su móvil y se dirigió a contactos. Cuando marcó el número, su jefe no tardó mucho en responder.
— Tengo un pequeño problema aquí. Tal vez no pueda llegar a tiempo al trabajo. Mi auto se ha descompuesto a medio camino. Tendré que llamar a una grúa, no sé...
— Yoongi,si no llegas antes de las 9:00 am, te pondré falta. Amigo, perderás todos tus estímulos.
El chico suspiró.
— Lo sé, pero no puedo hacer nada. Estás haciéndome el gran favor de darme una hora de tolerancia. Creo no puedo pedir más. Gracias, hyung.
— Está bien Yoongi, espero que puedas lograrlo.
— Yo también lo espero.
Yoongi colgó la llamada y en seguida buscó en internet el número de una grúa. Por suerte no tardó mucho en encontrarla.
Cuando respondieron, el chico se sintió realmente aliviado, le habían prometido que la ayuda llegaría rápido, pues por suerte, la grúa se encontraba cerca.
Mentira.
Decepcionado de la vida, Yoongi pateo la defensa de su auto. La gente que pasaba por ahí, miraban al chico, creyendo en que era demasiado extraño como para andar suelto por las calles. El rubio decidió ignorar toda esa mierda y continuar con su cólera.
Sin embargo, Yoongi diviso a la grúa, que se acercaba diligente. Mataría al bastardo tardón, quien quiera que fuera. Miró la hora en la pantalla de su iPhone y negó con la cabeza. 8:30, sí tomaba un Taxi, tal vez lo lograría.
La grúa se detuvo, Yoongi levantó una ceja expectante, quería conocer la cara del conductor antes de matarlo.
— Lo siento, la unidad que se encontraba cerca, tenía otro servicio. Fue un error del supervisor. — Un joven pelirojo con la sonrisa más radiante que Yoongi pudo haber visto en sus 24 años de vida, apareció enfrente suyo.
El chico tragó saliva ¿Era ese hombre real?
— ¿Sabes que voy tarde al trabajo? Pudieron haber llamado y así hubiera buscado otro maldito servició.
El joven se disculpó.
— Tiene razón. Es por eso que le daremos un 30% de descuento. — Respondió, sin dejar de sonreír.
Yoongi se estremeció, sintió su corazón latir con fuerza y tragó saliva.
— Bien, ya que están tan arrepentidos, creo que lo aceptaré. — Cedió.
El chico acrecentó su sonrisa, Yoongi creyó que tal vez había muerto en un accidente automovilístico y ese hombre no era nadie más que su ángel de la guarda, listo para recogerlo. Sí, Yoongi quería que lo recogiera como quisiera.
Cuando la grúa comenzó con su trabajo, Yoongi se cruzó de brazos, mirando desde la distancia, al joven en el interior del vehículo. Su perfil parecía haber sido pulido por Dios mismo y la forma en la que el chico sacaba su lengua para remojarse los labios, era una puta obra de arte.
Suspiró, habían sido demasiadas veces en la que se había sentido atraído por un sinfín de personas. Hombre, mujeres, trangénero, incluso, alguna vez en su vida, tuvo sexo con una persona a la que consideraba totalmente Queer. Pero aquel pelirojo, había sido el único que le intrigaba verdaderamente. Como si tuviera una fuerza magnética capaz de someter a Min Yoongi y llevarlo hasta su lado, para no soltarlo jamás.
Deseaba conocerlo, saber sus gustos y sus disgustos, su pasado y estar en su futuro. Quería besar cada cm de su cuerpo y sentir la lengua del chico, acariciando la suya.
Cuando el auto estuvo sobre la grúa, el chico se bajó con la terminal, listo para finalizar con su trabajo.
— ¿Pagará con tarjeta de crédito o en efectivo? — Preguntó.
Yoongi carraspeo la garganta.
— Tarjeta. — Dijo.
El chico asintió.
Yoongi no pudo dejar de verlo, ni un solo segundo. Sabía que sí permitía que se marchará, las probabilidades de volver a encontrarse con él, disminuirían.
— Lo llevaré directo al taller, puede pasar a recogerlo más tarde. — El pelirojo sonrió, Yoongi posó la vista en el chico y asintió. — Perdone las molestias.
Cuando el chico comenzó a caminar hasta la grúa, listo para irse, Yoongi actúo sin pensar.
— ¡Oye! — Exclamó, llamando la atención del muchacho. — ¿Crees que puedas llevarme? Voy tarde para el trabajo.
Una mierda Min Yoongi, no podrás llegar a tiempo, aunque te lleve el mismísimo Gokú. Pensó.
El chico asintió.
— Claro, sube. — Respondió.
Yoongi asintió y montó en el auto.
— Gracias. De verdad.
Cuando la grúa comenzó a avanzar, ambos se sumieron en un corto silencio. El pelirojo encendió la radio y cuando Yoongi escuchó la canción sonrió.
— ¿Es Tame Impala? — Preguntó.
— Sí, es de mis bandas favoritas. — Respondió el chico.
Yoongi acrecentó su sonrisa.
— También de las mías. Es más, está canción es...
— Una obra de arte.
— Sí, eso. Wow. — Se mordió el labio inferior. — ¿Cuál es tu nombre? — Preguntó por fin.
— Jung Hoseok ¿Y el tuyo? — Min Yoongi.
Cuando Hoseok asintió, Yoongi supo que el momento por el que tanto había esperado, había llegado. La sonrisa de Hoseok era suficiente para devolverlo a la vida y el rubio se prometió así mismo, que conseguiría ser el motivo de Hoseok, para sonreír.
Quítate tú que llegó la caballota, la perra la diva, la potra. JAJAJAJAJAJA
Ok, no. Creo que no podré actualizar la semana que viene. Tal vez sí, tal vez no. Mis exámenes vienen perros, pero aún así, no representan un problema.
Gracias por leer y si les gusta esta histora, please seganme. Me encantaría llegar a los 2K antes de año nuevo.
Espero que este capítulo les haya gustado y prepárense para lo bueno.
Comenten mucho y voten porfis. Las amo mil.
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You can be my Daddy |Jin BTS|
FanfictionHoon Yoon Ji una chica distraído y desaliñada, sufre un extraño accidente de tránsito, provocando atención medica inmediata. Es ahí en donde conoce al doctor Kim SeokJin. Un chico guapo y seductor con sed de ambición. Ji decide que SeokJin es la pe...