El ambiente incómodo inundaba el comedor. Yoongi comía en silencio al lado de su novio, mientras InHa, quien visitaba la casa por primera vez, miraba a WonHo con admiración. No era posible que existiera un hombre tan perfecto en el mundo. Era la segunda vez que la joven se encontraba a un ser humano tan apuesto, pues su prima, la hermana de Hoseok, tenía un prometido igual o más hermoso. Como si ambos fuese ángeles o en su defecto Demonios. No sabía comprender la naturaleza de su belleza, pero le causaba excitación, admirarlos. Aunque WonHo no era un joven al que solamente quisiera admirar; lo deseaba, como jamás creyó desear a alguien. Quería sentir su cuerpo encima suyo, quería pertenecerle, necesitaba volverse su dueña. Pero las cosas no eran tan bonitas como las imaginaba.
Era obvio que el muchacho sentía una fuerte atracción por YoonJi y aunque dolía, InHa tenía el presentimiento de que aquello era completamente obvio, pues a diferencia suya, YoonJi poseía una belleza extravagante, un cuerpo delgado y seguridad que estaba segura, jamás lograría poseer.
— YoonJi... ¿No tienes hambre? — Yoongi, fue el primero en romper el silencio. El muchacho miró a su hermana quien apenas y había probado bocado y suspiró. — ¿qué sucede? — preguntó.
Yoonji negó, sin mirar al joven y sonrió, llevándose sin ganas un pedazo de carne a la boca. WonHo la miró desconcertado y esbozó una débil sonrisa. En el fondo sabía que la chica no sentía nada por él, pero no estaba dispuesto a darse por vencido.
— ¿Quieres un helado? Te llevaré por uno cuando terminemos de comer. — Habló, dedicándole la más hermosa sonrisa a la muchacha.
Ji lo miró y le regreso la sonrisa. Ladeando el rostro mientras posaba la vista en su amiga.
— ¿InHa también puede ir? — Preguntó. — Es mi amiga y hoy está de visita. No puedo dejarla.
WonHo asintió sin mirar a InHa.
— Yo no tengo ningún problema —. Respondió.
Yoongi sonrió y continuó comiendo, mientras sin querer, el silencio volvía a apoderarse de la mesa. El par de hermanos, no podían recordar la última vez que hubo tanta tensión en la casa.
Por su parte, InHa no supo interpretar aquel sentimiento que comenzaba por corroer su alma. No sabía sí se sentía feliz por la inesperada oportunidad de conocer al chico, o triste por no valer ni un poco la pena como para que el joven no se girará para verla. Ese día, la chica llevaba el cabello cubriéndole gran parte de los ojos, su ropa era tan holgada como siempre y por una vez en su vida, deseo verse bonita.
— Yo puedo quedarme. — Dijo, en in intento volver a la realidad. WonHo jamás se fijaría en una mujer tan poca cosa como ella, estaba claro —. No quiero interrumpir.
Hoseok formo un puchero.
— Vamos, InHa. Ve —. Le pidió. Sabía mejor que nadie como se sentía la jovencita y por más que lo hubiese deseado e intentado, jamás había logrado encontrar una solución para ese pequeño problema.
YoonJi posó la vista en su amiga y sonrió, de una manera completamente distinta a como le había sonreír a WonHo anterior mente.
— ¡Vamos! — Pidió —. No molestas. Yo quiero que vengas.
WonHo suspiró y por fin se dignó en mirar a la molesta amiga de YoonJi.
— Claro que no molestas. Eres amiga de YoonJi ¿no es así? Para mí es un placer conocerte.
InHa sintió la asquerosa hipocresía en las palabras de WonHo. Pero había logrado que el joven la mirara. Asintió, esbozando una tímida sonrisa. Su corazón dio un vuelco, por qué había descubierto en los ojos del muchacho, un brillo que no deseaba dejar en libertad nunca más.
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You can be my Daddy |Jin BTS|
FanfictionHoon Yoon Ji una chica distraído y desaliñada, sufre un extraño accidente de tránsito, provocando atención medica inmediata. Es ahí en donde conoce al doctor Kim SeokJin. Un chico guapo y seductor con sed de ambición. Ji decide que SeokJin es la pe...