Veintiuno

1.7K 134 4
                                    

Faltaba poco para que comenzara el partido contra Shiratorizawa. Hitoka ya se había dirigido a las gradas; hoy estaban más tensas que ayer, lo cual era comprensible, ya que se trataba del partido final donde se definiría al equipo ganador.

—¡Te estoy diciendo que no parezco sospechoso! —escuchó Hitoka a un chico gritar, al cual Saeko traía consigo en contra de su voluntad.

—¡Vi a un chico sospechoso merodeando por ahí, así que lo capturé cuando intentaba huir! ¡Debe ser un espía de Shiratorizawa!

—¿¡Qué!? ¡Espera! ¡Soy un familiar! ¡Soy el hermano mayor de Kei Tsukishima!

—¿¡El hermano mayor de Tsukishima!?

—¿¡Gwa!?

Hitoka no articuló palabra, al igual que los demás; estaba sorprendida. Su novio no le había mencionado nada acerca de un hermano. No sabía cómo actuar o qué decir.

—¡Shhh! ¡Shhh! —empezó a decir Akiteru, en pánico. —¡Me dijo que no viniera a sus partidos!

Pero Kei ya sabía que su hermano estaba ahí; lo había escuchado, por lo que volteó a las gradas irritado, mientras su hermano se escondía como pudo.

—Este par de hermanos no se parecen en nada, salvo quizás por su apariencia.

Y así comenzó el partido. Hitoka agradecía la compañía de Akiteru, Makoto y Yusuke porque tenían un amplio conocimiento del voleibol y gracias a ellos entendía mejor lo que estaba sucediendo. Además, también agradecía la compañía de Saeko, quien la acompañaba en su falta de conocimiento del voleibol.

—Si ellos no piensan en una manera de hacerle frente a ese zurdo... —empezó a decir Saeko.

—Entonces ellos, que fueron entrenados por diestros, ¡no serán capaces de hacer algo! —terminó diciendo Hitoka.

—Al menos Kei... —empezó a hablar Akiteru. —No es el tipo de jugador que confía únicamente en la intuición. Kei no tiene fe en su propia fuerza. Tampoco cree en la intuición que ha estado entrenando.

—¿¡Qué estás diciendo sobre tu hermano!? —lo interrumpió Saeko.

—¡Lo estoy elogiando! —se defendió Akiteru. —Mi hermano se calma al punto en que es un poco aterrador, solo confía en lo que ve delante de él.

Justo en ese momento, Kei saltó para bloquear a Ushijima, pero apenas pudo tocar esa bola, frustrando al de anteojos. Hitoka podía jurar que en ese momento chasqueó la lengua de la frustración. Sí, era verdad, había cosas que Hitoka aún no sabía de su novio, como el hecho de que descubriera que tiene un hermano hoy. Pero también había cosas que conocía bien de él, como el hecho de que estaba decidido a bloquear esos remates.

Kei llegó a bloquear varios remates de otros jugadores, pero cuando se trataba de los de Ushijima, solo decía "Un toque". Hitoka podía notar el sobreesfuerzo que estaba haciendo Kei, su persistencia en tratar de bloquear esos remates rompebrazos.

—¿Qué sucede? —le preguntó Hitoka a Akiteru al verlo analizando la situación tan concentrado.

—Algo raro sucede con Kei. Aunque puede que me equivoque.

—¡Parece más enfocado de lo normal! -le dijo emocionada la rubia.

—¿Kei tiene otros amigos aparte de Tadashi? —preguntó algo confundido pero feliz Akiteru, mientras tanto Hitoka se sintió un poco mal al ver que él no le había hablado de ella a su hermano.

Mientras tanto, en este punto del juego Kei se sentía totalmente frustrado "Un toque, un toque, un toque" lo único que decía era eso pero, en un momento a otro apareció su oportunidad.

Enamorada de TsukishimaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora