CUARENTA Y OCHO - TIEMPOS DIFICILES

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Marizza:No te dijeron nada?

Dijo Marizza incomodándose. Pablo la miró de cerca y negó con la cabeza. 

Pablo:Bueno.. estuve re poco tiempo despierto antes de que me trajeran para aquí...

Dijo en tono de excusa. Marizza miró los ojos inocentes de Pablo. Quería evadir la respuesta pero sabía que Pablo tenía derecho a saber la verdad.

Marizza:Pablo... tu viejo.. y tu hermano, ellos...-

Marizza se había sentado pero Pablo le cogió la pierna. 

Pablo:Porqué te sentás? Échate conmigo por favor, te necesito asi junto a mi

Marizza se volvió a echar de costado para poder mirar mejor a Pablo. 

Marizza:Pablo...

Pablo:Qué? Qué pasa? No me vas a decir nada?

Pablo estaba perdiendo la paciencia y antes de que pudiera detenerse, Marizza ya estaba yendo al grano

Marizza:Ellos fallecieron Pablo, el auto cayó y explotó con ellos adentro... no se pudieron salvar

Dijo por fin. 

Hubo un silencio larguísimo. Pablo no sabía que decir. Se quedó pensativo y Marizza le fue acariciando la cara, sacándole el pelo de los ojos.

Marizza:No sabés cuánto lo siento.....

Dijo besando a Pablo con ternura. Pablo suspiró, frunciendo el ceño. La noticia aún hundiéndose en su cerebro. 

Pablo:No tengo viejo? No tengo hermano ya?

Dijo en una voz robótica, mirando a un punto fijo de la pared de la habitación. Marizza le cogió la cara por el mentón y lo obligó a mirarla. 

Marizza:No es tu culpa y no hay nada que se pudo hacer, Pablo. No te pongás mal por favor

Pablo se alejó un poco de Marizza, moviendo la cabeza hacia atrás. 

Pablo:Cómo que no me ponga mal? Es mi viejo, habrá sido una basura en vida p.. pero igual era mi Papa!!!!

Dijo, y sus ojos se le llenaron de lágrimas, mientras la voz se le cortaba. Suspirando, Pablo se tranquilizó, bajando el tono, ya que Marizza estaba mirándolo un poco asustada.

Pablo:No se porqué me pongo asi... ellos me odiaban de todas formas..

Marizza vio como Pablo trataba de poner un tono sarcástico a su voz, sonriendo pero su cara estaba llena de dolor igual. 

Marizza:No digás eso....

Dijo sintiendo pena por su novio. 

Pablo;Abrazáme, abrazáme fuerte Marizza

Dijo Pablo de repente, acurrucándose contra Marizza, quien lo abrazó domo mejor pudo dado que estaban en la cama de clínica que temblaba inestablemente con cada movimiento de los chicos. 

Marizza:Va a estar todo bien, yo voy a estar acá con vos todo el tiempo

Le aseguró Mariza mientras la pareja se abrazaba. 

********************

Mas tarde, Mia y Marizza estaban abajo en la cafetería de la clínica, comiendo algo. Eran ya las 8 de la noche. Mia y Manuel habían llegado hace poco para ver a Pablo, y Manuel se tuvo que ir en representación de la banda a una reunión. 

Marizza se había pedido una lasaña, y estaba comiéndosela muerta de hambre mientras Mia revolvía su café con leche sin ganas. 

Mia:Pobre Pablo, le re chocó la noticia de la muerte de su daddy

Dijo mirando su taza sin interés.

Marizza entrecerró los ojos. 

Marizza:Si... che Mia, a vos te pasa algo?

Mia:No

Pero Mia seguía con la misma cara, removiendo su café, con la cabeza apoyada sobre la mesa. 

Marizza:Mia.. te conozco, y se que algo tenés, dale decime antes de que el café consuma tu neuronit

Bromeó Marizza. Mia se sentó derecha y miro a Marizza con tristeza. 

Mia:Nada.. estos últimos días.. han estado cargados de cosas es todo... lleno de tragedias y cosas malas, estoy un poco cansada nada más

Marizza dejó su tenedor en el plato vacío. 

Marizza:Te re bancaste todo lo que estuvo pasando, Mia. Sos re fuerte, y me hiciste la gamba como nadie nunca me había hecho. Te debo mies de gracias por eso

Dijo con sinceridad. Mia sonrió. 

Mia:No fue nada

Las dos chicas se miraron y sonrieron, comprendiéndose más que nunca. 

**************

Pasaron dos semanas más y pronto Pablo estuvo de vuelta al colegio, y a su vida “normal”. Había perdido a casi toda su familia, pero de a pocos y con la ayuda de Marizza, lo iba asimilando y superando. 

Marizza:Pablo me acompañás a lo de Angie?

Marizza y Pablo estaban desayunando en la cafetería. Pablo se metió un pedazo de media luna a la boca y asintió. 

Pablo:Angie la novia de tu viejo? Ya no la odiás?

Marizza se puso colorada. 

Marizza:No la odio, si mi viejo la quiere qué puedo hacer? Aguantármelas

Pablo negó con la cabeza. 

Pablo:No... lo que podés hacer es bancartela y aceptarla, y quererla también no te parece?

Marizza puso los ojos en blanco. 

Marizza:Buuueeeeeno ya está bueno con los sermones

Pablo se rió. 

Pablo:Para que quiere verte Angie?

Marizza:Ella y mi viejo se quieren despedir de nosotros. Se regresan al sur mañana y nada, voy a ir para despedirme de ellos y de las nenas de Ángela

Al terminar el desayuno, ambos chicos se fueron en un remisse a la casa de Angie. Ella misma les abrió la puerta, llevaba puesto un mandil y estaba secándose las manos en él.

Angie:Pasen chicos.. estaba justo terminando de lavar los platos...Mari como va todo?

Ángela era la única persona en el mundo que jamás se había atrevido a ponerle un sobrenombre a Marizza. Todo el mundo siempre le decía Marizza y bueno, Sonia que el decía Marizzita, pero Angie fue de frente a decirle Mari desde que se conocieron. Sorpresivamente, esto no le molestaba en lo mínimo a Marizza. 

Marizza:Bien todo bien.. las bebas?

Pablo la miró y le apretó la mano, orgulloso de lo linda que era su novia. 

Angie:Durmiendo. Tu papi viene en un ratito para poderse despedir. Estamos como locos con las maletas...

Justo en ese instante se abrió la puerta principal y entró Martín, casi sin aliento, cargando varias bolsas. 

Martin:Hola... hola hijita!

Dijo dándole un beso a su hija y la mano a Pablo. Martín miró a Angie de reojo.

Martin:Angie... ya le diste la noticia?

Ángela negó con la cabeza, y Marizza frunció el ceño. 

Marizza:Qué noticia?

Dijo cruzándose de brazos. Martín y Ángela se miraron, y luego miraron a Marizza con incertidumbre.

"Sentimientos Rebeldes"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora