¿Morir? Cap. 34

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Narra Samuel:

Guarde un poco de ropa en mi casillero de natación después de haberme cambiado. Salí del entrenamiento bastante cansado y aun distraído de lo que hacía. Mi cabeza tenía que estar en todos lados, en la tarea, en mi entrenamiento, en el ejercicio, en lo que me dijo Frank, en lo que me dijo Andre, en lo que me dijo Alvaro, en mis clases, en el trabajo de mi papá y siempre en cada instante en Guillermo, era imposible apartarlo un segundo porque todo lo demás tenía relación con él.

Camine por los pasillos para tomar una clase que había evitado por ir a nadar, sin embargo Frank me detuvo con aquella sonrisa hipócrita, lo mire desinteresado porque no pensaba ser ni un poco cordial con él. 

-No hemos podido hablar bien en todo este tiempo.

-No buscaba hablar contigo así que podemos seguir así- iba a continuar caminando pero me volvió a detener.

-No te vayas tan rápido, solo quería demostrarte que él aun me ama, porque acepto ser mi novio de nuevo- ¿era necesario que dijera tanta estupidez? Ok, era cierta pero sonaba como un retrasado con suerte.

-Que bien.

-Samuel, no creas que no sé lo que le estabas diciendo aquel día en la escuela sobre su supuesto beso...- lo interrumpí.

-No es supueso, aquello si paso para tu información.

-Tal vez pero si alguien quiere ocultarlo es porque algo salio mal ¿no?

-Lo único que salio mal fue tomar esa decisión.

-Tarde, Sam. Él volvió a mí y no pienso soltarlo jamas- rodee los ojos desesperado,  y lo esquive para continuar caminando. Escuche que su teléfono sonó y contesto la llamada de inmediato, no iba a detenerme hasta que escuche el nombre de Guillermo en esa conversación.

-Guille no tiene nada que ver con esto, sé muy bien a lo que vengo padre- respondió con un poco de furia en la voz, paso un momento sin responder ante lo que sea que estuvieran diciendo. -Sé que soy un hombre de negocios, él no va a impedir que siga desarrollándome, aun continuo en lo que vine...Tu solo confía- y colgó con confianza. Así que entendí el porque de que estuviera de nuevo aquí, me regrese de nuevo hasta donde él bastante enojado por lo que acababa de escuchar.

Frank me miro de reojo desinteresado de lo fuera a decir, eso hasta que me atendiera por completo.

-¡Tú no viniste aquí por Guille!- grite tan seguro como de que el agua era transparente. Abrió los ojos por completo sabiendo que lo que decía era totalmente cierto.

-No tienes por qué meterte en esto.

-Claro que si ¿y sabes qué? se lo diré ahora mismo- antes de que pudiera correr hacía el árbol del menor Frank me tomo del hombro con una fuerza impresionante y me arrastro hacía un salón que se encontraba vació. Me aventó sin delicadeza contra el piso y me miro desde arriba. Juro que no sentí ni el mínimo dolor en la espalda por lo molesto que estaba al saber tal cruel verdad.

-Que no haya venido exactamente por él no quiere decir que no lo ame- dijo con la voz engrosada al doble.

-Tu lo único que quieres es ganar dinero y ya, no es verdad lo que sientes- conteste levantándome con una gran facilidad. 

-¡No puedes decidir lo que siento, idiota!- Grito lanzándome un puñetazo en la nariz haciendo que sangrara segundos después.

-Tu eres el que lo demuestra.

-Samuel, yo lo amo desde que lo conocí y nunca deje de amarlo y que quiera seguir ganando dinero no significa que me olvide de él ¿entiendes?

-¿Y si en verdad lo amabas por qué no regresaste antes por él? ¿Por qué esperaste 3 años? Seguro que si no te hubieran hecho venir por cuestiones laborales jamas hubieras vuelto.

¿Morir?-Wigetta-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora