Why don't you see me? [Taekook/Jikook]

Capítulo 8

Kim Seokjin había terminado de preparar la cena, y ahora se disponía a repartirla en seis platos.

Esperaba que Hoseok llegara pronto para que no se le enfriara la comida. Acababa de mandarle un mensaje hacía unos segundos, así que imaginaba que pronto le contestaría y estaría de vuelta con ellos.

Cuando estaba volcando el contenido de la olla en el sexto plato, la pantalla de su teléfono móvil se alumbró dejando ver que había recibido un mensaje.

Dejó los utensilios y el recipiente, ya vacío, en el fregadero y alcanzó el aparato para responder a su amigo.

Grande fue la sorpresa al ver que no era J-hope quien le había escrito. Se trataba nada más y nada menos que de Namjoon.

Su sonrisa no tardó en aparecer una vez leyó el pequeño texto que había recibido por parte del rubio. Y, rápidamente, respondió al menor y soltó su móvil para volver con el resto de los chicos, quienes estaban deseosos de empezar a cenar.

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Los días fueron transcurriendo hasta que llegó el primer día de la semana siguiente.

Las cosas no habían cambiado mucho en la semana anterior.
Namjoon seguía viviendo por su parte y, de vez en cuando, él y Hoseok charlaban mediante mensajes.

En la casa todo era igual, Suga seguía quejándose de todo lo que podía, Jin no dejaba de contar sus chistes malos, y Jimin seguía siendo tan pegajoso como de costumbre con Jeongguk. Nada fuera de lo común.

En ese instante, todos se encontraban juntos. Estaban en la sala de estar, donde mantenían una agradable conversación en la que no faltaban las risas.

De un momento a otro, la charla fue a parar en un tema en concreto: Army.

A Jin le había dado por pensar en la aplicación de V live, donde, frecuentemente, hacían directos para sus fans. Y cayó en la cuenta de que habían pasado varias semanas en las que ninguno de ellos había transmitido uno.

— Creo que a Army les gustaría ver un poco de Vmin —Dio su opinión el mayor del grupo, provocando que Taehyung y Jimin se mirasen con seriedad—. ¿Por qué no grabáis juntos esta tarde?

Los nacidos en 1995 se quedaron mirándose sin decir nada. Hasta que el mayor de la línea maknae decidió hablar con toda la normalidad del mundo.

— Me parece una gran idea —dijo con una falsa sonrisa, que parecía sincera a simple vista—. ¿Qué dices tú, Tae?

El nombrado pareció pensárselo durante unos instantes pero, sin tardar demasiado, respondió que a él también le parecía una buena idea.

A Jin eso le provocó una sonrisa. Adorada ver a sus pequeños llevándose bien entre ellos y compartiendo actividades. Por aquella razón solían llamarle la madre del grupo. Lo cual le resultaba gracioso.

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Pasaron las horas, y el momento que Taehyung y Jimin no querían que llegara, se presentó ante ellos.

El cuerpo del más alto se dejó ver tras el marco de la puerta de la habitación del de menor estatura. Éste, rápidamente, se percató de la presencia del contrario e inmediatamente lo invitó a entrar con un gesto de mano.

V entró mirando hacia los lados. Estaba nervioso. No sabía muy bien cómo reaccionar frente al de cabellos naranjas, después de las cosas que empezaban a pasar entre ellos.

— Jeongguk no está —habló el mayor—. Si es lo que buscas.

— No —contestó el menor sabiendo perfectamente que el golden maknae no se encontraba ahí—. No lo busco a él.