Capítulo 32

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— ¡Hey! ¡Por fin llegáis!

Hoseok se había alegrado enormemente de ver cómo los dos maknaes que quedaban aparecieron por la puerta de la casa. Jeongguk en un bañador amarillo, una sonrisa en sus labios y tirando del brazo de su amigo quien parecía más haber sido forzado que convencido y Jimin, en un bañador azul casi por las rodillas, que no dejaba de mirar a quien lo arrastraba.

— Me ha costado convencer a Jimin-ssi, pero ya lo traje y se bañará con nosotros.

La mayoría de los que estaban dentro del agua lo miraron con ternura, menos Taehyung quién no había podido evitar dirigir la vista hacia quien estaba siendo arrastrado por su novio.
La escena de Jimin apretando su cuello volvió a hacerse tan vívida, que casi pudo sentir los cortos dedos de éste dejándolo sin aire.

Tragó saliva, apartando rápidamente la vista de él y se concentró en las otras personas allí presentes.

Cuando Jeongguk soltó su mano para zambullirse enérgicamente en el agua, pudo sentir cómo su cuerpo se alivió por completo.
A pesar de que Taehyung jamás haría algo tan tóxico como prohibirle a Jeongguk pasar tiempo con Jimin, no podía evitar sentirse preocupado por la cercanía de ambos. No era por algo tan absurdo como los celos, sino porque ese hombre tenía unas ideas bastante oscuras en la cabeza.
Él pensaba que si había tratado de estrangularlo a él, ¿qué no sería capaz de hacer?

Rápidamente, Jeongguk se dirigió hacia donde se encontraba su novio para dedicarle una agradable sonrisa y volverse para asegurarse de que su amigo lo seguía.

Justo después de que Park entrase en la piscina, sumergió todo su cuerpo, queriendo refrescar su cabeza del calor que hacía fuera.

Jin, que lo observaba todo siempre con cierta preocupación, pensó que sería una buena idea mandarles a hacer alguna actividad en conjunto a los tres menores del grupo que se veíanahora tan alejados los unos de los otros, por lo que decidió tener la iniciativa y ver si podía conseguir que la tensión entre Taehyung y Jimin disminuyese.

— He pensado que ya que siempre soy yo el que cocina, los maknaes podrían hacer la cena por nosotros esta noche.

La expresión de Yoongi al oír aquel disparate fue claramente una forma de criticar la idea estúpida de su mayor. Con sólo sus ojos lo advertía de que nada podía salir bien de eso, estando en el punto que estaban ahora.

— ¿No os parece bien a vosotros? —realizó la pregunta dirigiéndose a los más jóvenes— Me gustaría que por una vez los menores trabajasen para nosotros. Sería una muestra muy grande de respeto y agradecimiento hacia vuestros hyungs que siempre os estamos cuidando.

A Namjoon casi se le cae el móvil al agua, tras haberse estirado para alcanzarlo del borde de la piscina. Sintió un pequeño infarto momentáneo sólo por eso.

— No creo que sea…

— Vale, hyung. Me parece una buena idea. —habló Jeongguk interrumpiendo a Jimin quien quería librarse de la incómoda escena de tener que ver a la pareja actuar cariñosa frente a él.

Éste soltó un suspiro al oír al más pequeño y cerró la boca de golpe. “Si Jeongguk quiere, que sea lo que tenga que ser.” Pensó dirigiéndole la mirada al menor.

— ¿Podemos hacer cualquier cosa o queréis algo en particular?

Yoongi miró a Jimin, que fue quien había preguntado aquello y contestó al instante.

Why don't you see me? [Taekook/Jikook]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora