Siare | EMPE #3 | Stiles Stilinski

34. Beacon Hills Memorial Hospital

Stiles

―Debí haber ido con Mia ―le dije a Scott.

―Ella va estar bien, además, te mataría si se entera que no estás buscando a tu papá.

Asentí.

―Tenemos que encontrarlo, ¿crees que venga acá? ―miré a Derek.

Ahora mismo estábamos en su departamento, vinimos a contarle todo sobre la señorita Blake siendo el Darach. Al principio no nos creyó, pero luego Scott lo convenció, no teníamos porqué mentirle. Solo queremos encontrar a mi papá, encontrarlo con vida.

Sé que aún está bien, tiene que estarlo.

―Sí, ella vendrá ―me respondió―, será mejor que se oculten, ya está aquí.

Scott y yo asentimos y nos colocamos detrás de una pared para que ella no nos notase al entrar.

― ¿Derek? ―gritó ella―, Derek, ¿dónde estás?

―Aquí ―respondió él de manera calmada.

―Gracias a dios ―la señorita Blake sonaba demasiado aliviada, ambos se abrazaron y no pude evitar querer ir y golpearla por haber dañado a Mia y por haberse llevado a mi papá.

―Algo pasó en el recital de la escuela ―empezó a explicar―, quiero contarte antes de que te enteres por ellos.

Bueno, demasiado tarde.

― ¿Por quiénes?

―Scott y Stiles ―respondió―, van a decirte cosas que no puedes creer. Debes confiar en mí, ¿sí? Confía en mí.

― ¿Qué sucede?

―Prométeme que me escucharás.

―Lo prometo.

Debo admitir que Derek parece un buen actor, yo estaría estrangulándola en estos momentos.

― ¿Puedes calmarte? ―me susurró Scott―, debemos esperar el momento correcto para entrar, no podemos arriesgarnos a que sienta nuestra presencia.

Asentí. ―Lo lamento.

Cuando volví a prestarles atención vi que se estaban besando. ¿Cómo puede besar a ese monstruo? ¡Es una asesina!

―Ya llegaron, ¿no? ―preguntó la señorita Blake cuando se apartó de Derek.

Scott me golpeó el hombro para señalizar que avanzara, él fue primero y yo iba de cerca. Cuando ella nos vio, podía notar su rencor de que hayamos llegado primero a hablar con Derek.

―Entonces, ¿te dijeron que era yo? ¿Qué soy quien se lleva a las personas?

―Le dijimos que eres la que mata a las personas.

―Oh, claro, así es ―dijo en tono divertido―. Yo hago sacrificios humanos, ¿no? ―escucharla solo hacía que me hirviera la sangre―. Sí, probablemente lo hago en mi hora de almuerzo. Así regreso a tiempo para enseñar literatura en el colegio el resto del día. Es totalmente lógico.

― ¿Dónde está mi papá? ―le pregunté, no estaba con ánimos de seguir sus estúpidos juegos mentales.

― ¿Cómo voy a saber eso? ―luego giró hacia Derek―. Derek, dime que no crees esto.

Por un momento temí que él estuviera de su lado, luego, dirigió su mirada hacia nosotros y preguntó―: ¿Sabes qué le pasó al padre de Stiles?

―No ―respondió ella.

―Pregúntale por qué casi mata a Mia ―dijo Scott, oír su nombre hizo que recordara el estado en que la tuve que dejar con los paramédicos.