INFIELES

INFIELES #41

INFIELES #41

EMMANUEL

Salí al jardín, la noche fresca recorrió mi cuerpo alborotando mi cabello visualice el camino hacia la puerta del estacionamiento preguntándome si la encontraría ahí.

No lo creí posible así que camine en dirección contraria el que llevaba al interior del jardín no tuve que caminar mucho, en una banca se encontraba Alondra con Irina. Despacio me acerque a ellas ; mi prima se disculpaba con ella mientras Alondra sacaba sus ojos con un pañuelo desechable.

-Alondra sabes lo importante que eres para mí. -Irina acariciaba el brazo desnudo de la chica -Discúlpame si te hice sentir así, pero no es verdad. Te invité porque eres mi mejor amiga y te quiero.

-Solo... -sollozo por el llanto contenido,nunca me imaginé que fuera tan sensible ¡Qué dramática!

«Katrina también es dramática» pensé, pero ella es la única mujer que soporto con todo y sus dramas, me obligue a tragarme la sonrisa al recordar a la mujer que tuve en mis brazos hace unos minutos atrás

-Señora Irina -un joven vestido con el uniforme de mesero se acercó a nosotros con urgencia

-La busca su marido... -hizo una pausa tomando aire; se le veía cansado, seguramente tenía tiempo buscando a mi prima. -Llegaron unos invitados y la necesitan adentro -Ina rodó sus ojos con frustración; estaba enfadada. Qué irónico es que ella que trabaja organizando eventos para los demás no pueda con la presión de su propia fiesta.

-Tranquila Ina, yo me encargo de Alondra -me ofrecí y ella asintió con su cabeza para después retirarse acompañada del joven.

Me senté al lado de Alondra, en mi posición tenía la mejor vista ya que podía ver a cualquiera que salí al jardín por los tres accesos.

-Lo siento... -después de varios minutos escuchándola llorar y sorber por su nariz ella habló -me he comportado como un una boba - sorbió de nuevo por su nariz. Saqué el pañuelo que reserva en el interior de mi saco

-No eres boba -sonreí mientras hacía una pausa buscando las palabras correctas, a los lejos pude ver a una pareja saliendo al jardín, él hombre tomaba por la cintura a la chica que lo acompañaba -Yo tengo que disculparme contigo -volví mi atención a ella -disculpa por no saber ser un buen compañero, sus ojos tan pendientes de mi me hicieron sentir incómodo, busque distraerme y mis ojos volaron a la pareja que ahora estaban en una escena íntima. Él hombre después de decirle algo a la chica, la cual no alcanzaba a ver muy bien gracias a unos arbustos que tapaba mi visión, él hombre se arrodilló frente a ella

"Una propuesta de matrimonio"

-Eso es lo que... -Alondra retomó la conversación -cree que... creí que tú y yo... - capturó mi atención al instante, mis ojos la estudiaban con curiosidad a la espera a su respuesta -¡Dioses! No te has dado cuenta ¿verdad? -negué con mi cabeza ¿por qué lo hacía? ¿por qué le daba tantas vueltas al asunto? Alondra clavó su mirada en el cielo me imaginaba que estaba seleccionando sus palabras. Mientras tanto yo busqué a la pareja que todavía estaban en el mismo lugar él hombre arrodillado decía algo, pero la todavía no sacaba el anillo, tal vez estaba recitando algún poema. Esperaba con ansias el momento en el que él saca el anillo, no me considero un romántico; pero ese era el "Éxtasis" del momento, ese sentimiento lo recordaba en situaciones completamente diferentes:

Una cuando una hermosa joven aceptó ser mi esposa.

Dos cuando la madre de mis hijos me rechazo.

-Estoy enamorada de ti -confesó en un murmullo; si no fuera porque me veía intensamente juraría haberlo imaginado. Aparte mi mirada de ella, esto se estaba volviendo incómodo para mí