POPURRÍ

Miedos

Son esos días en los que te levantas y no entendes bien que es lo que pasa. Como que algo cambió, como si el sueño nocturno hubiera modificado la realidad. No es incomodidad, o lo es, pero exactamente no entiendo porque, algo me inquieta, y no hay forma de averiguarlo. Desde el sobresalto matutino, camino en el mismo sitio con una extraña presión en el pecho que me agita el corazón y me hace esforzar la respiración. Me siento y se me va la cabeza, me distraigo, pero no dura mucho, vuelvo a la duda existencial. De que se que anoche no descanse del todo bien o de que ahora tengo que solucionar algo. Algo que quizá no existe o solo lo hace en mi inconsciente. Me pongo quisquillosa con los detalles, no presto atención a lo que hago, pierdo el hilo de las conversaciones y no logro terminar nada. Ahora escribo, para averiguarlo, para tranquilizarme de alguna forma u otra. O simplemente porque no se como expresar lo que me trajo el día. ¿Que parte de mi vida tengo que acomodar ? Algo no esta del todo bien y dentro mio lo se. O esta bien. Pero no me hace sentir cómoda. Vuelvo a lo mismo una y otra vez. ¿Por qué siento que hubo un giro ciento ochenta grados al que me cuesta acostumbrarme? Como si no quisiera crecer o aprender de las experiencias. Como que algo me esta haciendo volverme adulta pero en mi zona de confort me gusta ser una niña. Nadie me defiende de mis propios fantasmas. La seguridad que creí tener para enfrentar el día a día en realidad son añicos de una fortaleza que debo ir construyendo lentamente, con el paso del tiempo, de las experiencias vividas, de ser más yo, mas la persona que deberá caminar sola, sabiendo que no habra otra mano de la que aferrarse. Quizá si, en algún momento. Pero no siempre. Quizá eso es lo que me inquieta desde que me levante. Enfrentar mi terror. El terror a mi misma, a la vida, a la sociedad, a la soledad, a las compañías clandestinas, a la gente que se va, la que me deja, lo que debo soltar, lo que debo decir y lo que callo. Nunca se esta preparado para nada y yo no soy la mas indicada para hablar de confianza, seguridad, e independencia. Sin embargo son dudas que se irán con otras, problemas que se irán con peores, y miedos con los que me voy a terminar llevando bien.