LOGAN©

CAP 4: Trabajo en equipo (I...)

Logan miró su revolver; tenia seis balas,  debía aprovecharlas bien;  apretó fuertemente el gatillo dando paso a su primera bala, un sonido seco salió del cañón del arma atravesando completamente el  cráneo del zombie más cercano. Ahora le quedaban cinco  balas en la recámara del revolver y su arma no poseía silenciador.

Al disparo de Logan,  todo el grupo abrió fuego  comenzando con la masacre. Las balas salían despavoridas al cráneo de los infectados los cuales atacaban sin importar nada.

Un zombie hábilmente esquivó  el ataque de José para posteriormente embestir contra Abigail, la cual estaba más alejada.

La pelinegro, Abigail, disparaba a todo ser que se le acercaba por su izquierda con una aceptable punteria. Estaba nerviosa, aunque poseía una gran arma; un rifle de asalto:  MP 40; sentía que de esta no iban a salir vivos. Observo mientras disparaba que del tercer piso bajaban más de esas bestias.

Su rifle le provocaba un horrendo sacudon en sus brazos con cada disparo que efectuaba. De  pronto, sintió un gran peso sobre ella, lo cual provocó que cayera sin poder hacer nada al suelo, soltando en el trayecto su arma.

Aquel zombie se le había avalanzado encima, tomándola por sorpresa sin darle opción a defenderse. Intentó vanamente forcejear con la criatura, la cual al parecer era muy fuerte para ella sola. Miró por breves segundos  desconcertada y con horror los  ojos de la criatura, estaban sin vida, grisáceos, y con ansias de ver sangre.

El zombie peligrosamente comenzó a morder al la mujer. Ella evitó el primer mordisco, pero el segundo  no pudo; la criatura logró tomarla por el cuello.

Volteó su cabeza intentando sacarselo de encima pero ya era tarde, sintió lentamente los afilados dientes del zombie en su garganta. Cerró  con angustia sus ojos  y espero  su  dolorosa muerte.

Seguía cerrada los ojos sintiendo aun aquellos afilados dientes en su cuello, pero raramente no sentía que estos atravesaban su piel. Abrió finalmente sus párpados y se fijó que aquel zombie estaba con un gran agujero en la frente.

—¡Muévete! —.exclamó Logan tomándola del brazo y haciéndole entrar por una puerta hacia una habitación. No articuló ninguna palabra,  estaba desconcertada.

Al entrar a la habitación José intento cerrar la puerta pero las manos de los zombies se colaron en el filo de esta, evitando que pudiera cerrarla.

Margaret rápidamente  se acercó a la puerta y disparó a cada mano que impedía cerrar; inmovilizandolas por completo.  El tiempo apremiaba así  que José ante la ventaja que produjo Margaret, cerró finalmente la puerta; quedando momentáneamente a salvo.

Logan miró una mesa en medio de la habitación y pensó que seria de utilidad, así que la arrastró rápidamente hacia la puerta, para hacerla  más segura.

—¡Malditos hijos de puta! –.exclamó José llevándose las manos a la cabeza –. ¡Casi nos matan!

Nadie dijo nada, después del escape de ira de José solo se escucharon los fuertes golpes de los infectados fuera de la habitación.

—Gracias —.agradeció Abigail; una mujer  que aparentaba tener unos treinta años o más; tomando de la mano a Logan. El joven  le regaló  una sonrisa.

Después de un tiempo, José había hablado con los dos grupos por la radio dándoles a conocer la situación en la que se habían metido.

—¿Ahora que se supone que vamos  hacer?  —.preguntó Margaret levantándose del pequeño sofá en el que estaba sentada. Estaba cansada de escuchar aquellos zombies golpear, quería salir de ahí y rápido.