Después de un día de descanso todos parecían haber recuperado las fuerzas así que el equipo había decidido reunirse en la sala común para deliberar su siguiente paso. Una vez conocida la historia sobre los cristales no estaban seguros de si seguir con la búsqueda era la opción más inteligente.
Gabby andaba con paso rápido por los pasillos junto a Joan, quien había ido a buscarla a su habitación para asegurarse de que no se quedaba dormida.
Cuando entraron en la sala sus otros dos compañeros ya los estaban esperando. Harry jugaba con su teléfono móvil levantando levemente en ocasiones la mirada en dirección a Roxy que inspeccionaba las uñas aburrida.
-Llegamos- saludó Gabby llamando la atención de ambos que la sonrieron. Sin embargo el semblante de Roxy se arrugó cuando vio a Joan detrás de la muchacha.
Aún no le había perdonado que al enterarse de que Nathan había sido novio de Gabby quisiese echarlos de la sala y hubiese ignorado sus quejas cuando había arrastrado a la muchacha fuera de la sala.
-No puedes seguir enfadada- negó Joan al ver a Roxy girar la cabeza indignada cuando él cruzó las puertas.
-Pues mírame- espetó dándole la espalda.
El muchacho se acercó a la silla en la que estaba sentada y se arrodilló delante de ella, quedando a una altura más baja que la suya.
-Vamos, Roxy, perdona- se disculpó Joan, intentando conseguir que le mirase.
Ignoró su disculpa y estiró el cuello aún más, manteniendo un semblante serio. Joan puso los ojos en blanco suspirando y miró a Gabby en busca de ayuda, pero ella se encogió de hombros.
-Roxy, siento como me comporté el otro día- dijo Joan girándose de nuevo a esta. Tomó sus manos pese a la resistencia que en un principio opuso su dueña y las acarició con los pulgares obligándola a bajar la mirada hacia él-. Sé que me comporté como un verdadero...
-Gilipollas- terminó de decir Roxy haciendo sonreír a Joan que aceptó el insulto.
-Sabes que con todo el tema del arquero me pongo muy nervioso y eso me vuelve irascible- contó juntando los dos pares de manos sobre el regazo de ella-. Sé que no es ninguna excusa y que no debí tratarte así, pero desde que aquel arquero mató a Neal he querido acabar con él y enterarme que una vez salió con Gabby no fue una de las mejores noticias que podría haber recibido.
Al decir aquello no sólo fue Roxy quien se vio obligada a agachar la cabeza, sino que Gabby también desvió sus ojos de la escena.
-Perdóname, por favor, no me gusta que estés enfadada conmigo- pidió Joan arqueando las cejas mientras esperaba la contestación.
Mientras ella pensaba la respuesta, Harry los observaba detenidamente, analizando cada una de sus palabras y Gabby aún se mantenía ausente.
Roxy hizo más fuerte el agarre de sus manos y se lanzó a su cuello a abrazarle. Joan se incorporó del suelo sonriendo y aún con la muchacha colgada al cuello.
La sonrisa de Gabby se enterneció al verlos de nuevo unidos y se olvidó por un momento de Nathan.
-Ahora que ya está todo arreglado, ¿qué vamos a hacer con los cristales?- se apresuró a preguntar Harry interrumpiendo el abrazo de sus dos amigos.
-Deberíamos seguir con la búsqueda- pensó Roxy acercándose al sillón de tres plazas y dejándose caer en él.
-Ya escuchasteis al ilusionista, lo mismo hizo la asociación de científicos a la que estamos investigando- recordó Gabby tomando asiento también- y acabaron mal por culpa de uno de ellos.
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Impossible (Nante #1) ©
Ciencia FicciónSinopsis Siempre han existido sucesos extraños a nuestro alrededor, sucesos a los que nunca hemos prestado mucha atención. Apagones, inundaciones, lluvias torrenciales imprevistas en pleno verano, comportamientos extraños... Muchos sucesos a los que...