GANSTER- Segunda Temporada

Parte 17

Diana

El día había sido maravilloso, después de nuestra improvisada pelea de lanzarnos objetos, vimos películas y pasamos la tarde los 4 juntos hasta que anochesio, sólo por hoy Harry y Louis no atendieron sus "asuntos".

-Me daré una ducha.- beso mi frente, yo estaba sentada en el borde de la cama, de nuestra cama.

Se metió al baño que estaba en nuestra habitación, la idea de tomar una ducha con él invadió mi cabeza, camine hacia la puerta del baño y puse mi mano sobre la perilla, voy a sentirme muy tonta si la cerró por dentro.

-Amor olvidé la...- la puerta del baño se abrió de golpe, Harry al ver mis intenciones dibujo una provocativa sonrisa en sus labios y no pude evitar sonrojarme.

Su torso desnudo me permitía ver lo bien conservado que estaba, la tinta en su piel siembre me había gustado, sin decir nada, me tomo de las manos y me introdujo lentamente al baño con él. Cerró la puerta a mis espaldas y me pego contra ella, acerco su rostro al mío basándome con mucha intensidad.

Me dejé llevar por el ritmo tan intenso de sus besos y de inmediato el profundo deseo de tenerlo invadió todo mi cuerpo, quito la camisa de mi cuerpo dejando al descubierto mis pechos comenzó a acariciarlos suavemente provocando que soltara ligeros gemidos.

Entre besos y caricias nos deshicimos del resto de nuestra ropa y entramos a la ducha, el agua caliente corría por nuestros cuerpos, me sentía en el maldito paraíso, nada podía sentirse mejor que esto. Harry conmigo haciendo el amor. No quería que se detuviera, sólo él podía provocar esto en mi, era sumisa a él.

Por esta noche quiero antregarme a él cuantas veces sea necesario, esta noche sólo es nuestra.

(...)

Diez días después

Las cosas comenzaron a tomar su curso, nada había estado tan bien antes. Harry y yo estábamos más unidos que nunca, Trina y Louis derramaban miel todo el tiempo, algo verdaderamente extraño en ellos.

Trina y yo entramos a trabajar a una cafetería, hacíamos de todo, aveces ayudabamos en la cocina, eramos meseras o limpiabamos. Nuestro jefe era un buen tipo, la paga no era exactamente la mejor, pero las propinas solían ser buenas y el horario era accesible de 7:00am a 3:00pm.

Volvíamos del trabajo, Trina estaba tan cansada porque le tocó estar de mesera hoy, así que lo primero que hizo fue dejarse caer en el sofá y quedarse profundamente dormida. Yo por otra parte había ayudado en la cocina, no estaba tan cansada como ella. Fui a la cocina por un poco de agua cuando el golpeteo en la puerta llamo mi atención.

Camine hasta ella y al abrirla una ligera sonrisa se dibujo en mis labios.

-¡Peter!.-dije con algo de emoción y lo abrace.

-¡Hola pequeña!.-correspondió mi abrazo, con una cálida sonrisa.- ¿Crees que podamos salir a tomar un café?.-su mirada reflejaba cierta preocupación, y sinceramente me inquieta saber por qué.

-Claro.-sonreí.-iré por mi bolso no tardó.

Fui por mi bolso y le deje una nota a Trina diciendo que saldría. Después fui con Peter hasta un café cerca de la Universidad a la que solía asistir, pudimos haber ido a un lugar más cerca, pero este era un buen lugar y un poco más tranquilo para hablar. Nos sentamos en una de las mesas para dos, una chica pidió nuestra orden y en pocos minutos volvió con ella.

-¿Cómo has estado?.-pregunte.- Creí que tu y Milla habían vuelto a Washington.

-Es por eso que te busque.-me miró preocupado lo cual me desconserto un poco.

-¿Está todo bien?.-pregunte curiosa y él negó con la cabeza.

-Milla... ha estado actuando de forma extraña estos días...

-¿Extraña en que aspecto?.-Lo mire intrigada.

-El otro día recibió una llamada, ella dijo que no había sido nada importante pero... desde esa "llamada"  actúa diferente, pareciera que está ansiosa todo el tiempo, cada que su celular suena se aleja lo suficiente para que no escuche con quien habla, el otro día la descubrí hablando a media noche con alguien y una vez que desperté ella no estaba en el departamento, llegó varios minutos después dicendo que había salido muy temprano pero estoy seguro que no pasó la noche ahí...-Peter lucía realmente angustiado y alterado.

-¿Crees que ella este saliendo con alguien más?

-Creo que...-me miró duduso.- Creo que Milla ya encontró a Lima y es con él con quien habla.

Una sensación  de agua helada cayendo sobre mi se apoderó de todo mi cuerpo y de inmediato empecé a temblar.

-¿P-Por qué lo d-dices?.-los nervios se habían apoderado de mi.

-No estoy cien por ciento seguro, pero si te digo esto Diana es porque si estoy en lo correcto quiere decir que...

-Liam está cerca.-interrumpí y él asintió con la cabeza.

-Diana tú me importas y no quiero que ese idiota te haga daño de nuevo, pero Milla también  es importante para mí y realmente no se que hacer.-tomo mi mano.-estoy muy preocupado.

-Le diré a Harry... quizás él sepa que hacer, Peter debes llevarte a Milla lejos de aquí...-lo mire angustiada.

Sabía que Peter tenía sus preguntas acerca de mi y de lo que Harry hacía, pero agradecía que no preguntará nada porque no iba a poder decirle la verdad o sería involucrarlo.

Peter siguió contandome de sus sospechas, después de eso me llevo de vuelta a mi departamento y se fue, me prometió hacer todo lo posible por llevarse a Milla lejos de aquí lo cual era lo mejor.

Le conté a Trina todo, ella me miraba asustada en cada palabra que decía.

-¡Harry y Louis deben saber! Diana si Liam está cerca puede hacerte daño de nuevo...-estaba preocupada.

-Lo se, ya los llame, les dije que quería hablar con ellos, Trina estoy muy asustada, si Peter tiene razón y Milla se ve con Liam, Dios no quiero imaginar lo que pasará.-mi tono era angustiado.

-Liam es un hijo de perra que merece morir, él fue quien inició todo con su patético saqueo en la fiesta de Harry, él inició todo, es un maldito ganster debió deducir las consecuencias de sus actos...

Trina tenía razón, yo no entendía del todo como se llevan a cabo los "asuntos" de los gansters pero si algo si entendía es que Liam fue quien inició todo este asunto.