Parte 37

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Diana

Estaba completamente sorprendida, ¿desde cuándo Harry boxea?...

-¡Chicos saben las reglas esto es sólo un encuentro amistoso!.- dijo la recepcionista.- ¡EMPIECEN!.- grito y salió del ring.

Todos al rededor gritaban y habían bulla, quería salir corriendo de ahí, pero no podía dejar de mirar a Harry.

-¡VAMOS STYLES!.- Grito Zayn.

Entonces la pelea comenzó, Harry y Noel comenzaron a golpearse, a pesar de ser una "pelea amistosa" por la mirada de Harry puedo deducir que hay algo más detrás de esta pelea y porque no se veía tan amistosa. Noel era bueno, pero Harry era mejor. Yo estaba completamente abrumada, no me movía, no hablaba y quizás tampoco estaba respirando.

Harry miró de reojo hacía donde estábamos Zayn y yo. Cuando me vio ahí entre la multitud fijo nuevamente su mirada hacía a mi como si no pudiera creer que yo estaba ahí, lo cual fue una distracción pues Noel aprovechó para golpear su rostro provocando que Harry cayera, lleve mis manos a mi boca en un grito ahogado y entonces me sentí preocupada. Sin embargo el alivio me invadió cuando Harry se puso de pie y bastaron dos golpes para dejar a Noel noqueado, fue extraño pues pudo haberlo hecho desde el inició, quizás sólo estaba haciendo más interesante la pelea.

Todos ahí gritaban emocionados por la victoria de Harry, la recepcionista y un par de chicos subieron a auxiliar a Noel. Las chicas sexys corrieron con Harry y empezaron a hacerle toda clase de cumplidos, sin embargo Harry no apartaba la vista de mi. Pude notar que por el golpe que Noel le había dado su pómulo izquierdo se abrió un poco y se estaba hinchando y me sentí ligeramente culpable. Harry desvió su mirada y bajo del ring las chicas lo siguieron.

-Debo ir con él.- la voz de Zayn llamo mi atención y gire hacía él.- ¿Vienes?.- dude unos segundos pero asentí.

Sólo lo hacía para asegurarme de que el golpe que recibió por mi culpa no fuera serio. Si claro, sólo por eso.

Seguí a Zayn hasta los vestidores de hombres pero me detuve en seco antes de entrar.

-Descuida, no hay hombres aquí adentro.- hablo Zayn en tono divertido, yo sólo sonreí tímida y entre con él.

Harry estaba sentado en una banca dos de las chicas sexys estaban con él, una le daba masajes mientras la otra prácticamente se le insinuaba. Mierda, quiero ahorcarlas. Sin embargo Harry parecía ignorarlas.

Cuando él me vio entrar con Zayn de inmediato fijo su mirada en mi al igual que las dos chicas, una de ellas era la que entrenaba con Noel y sin duda no le dio gracia verme.

-Chicas por que no vienen conmigo.- Zayn tomo a las dos chicas de los brazos.- Yo puedo ayudarlas en lo que gusten.- sonrió coqueto.

La chica que masajeaba a Harry no hizo ninguna cara de molestia sin embargo la otra me dio una buena mirada de odio antes de salir con Zayn.

Harry y yo nos veiamos fijamente a los ojos, como si con la mirada nos dijiesemos todo. Tímida camine hacía él, rogando al cielo por que los nervios no me invadieran. Me senté a su lado y su cercanía provocaba que mi corazón latiera con fuerza. Mire el golpe en su pómulo, había un poco de sangre seca en la abertura.

Tome mi botella de agua y berti un poco sobre una pequeña toalla y sin pedir permiso comencé a limpiar su herida, pude notar como todo su cuerpo se tenso y fruncio ligeramente el seño cuando toque la herida, pero se relajo rápidamente. Me concentre en mirar sólo el golpe, sin embargo puedo sentir la mirada de Harry escaneandome.

Cuando termine de limpiar la herida, iba a retirar mi mano de su rostro sin embargo puso una de sus manos sobre la mía haciendo que la toalla cayera al suelo y que me quedara tocando su mejilla, tocarlo hizo que mi corazón diera un brinco y comenzará a latir de forma rápida y fuerte. Mire sus bellos ojos esmeralda, tan profundos como siempre y fue como si el tiempo se hubiese detenido.

Nada más existía en ese momento, nada más importaba... sólo él y yo. Debería alejarme pero no quiero, debería poner toda mi fuerza de voluntad y salir de aquí, pero no voy a hacerlo. Quiero estar aquí...

Abrió sus labios ligeramente como si fuese a decir algo, pero no lo hizo. No se en que momento pasó, pero ya estoy a escasos centímetros de su rostro, nuestras respiraciones se han hecho una y para ser honesta es una sensación reconfortante.

-Oye Styles...- la voz de Zayn me trajo de vuelta a la realidad y me aleje rápidamente de Harry.- Oh... lo siento...

-¿Qué pasa Zayn?.-pregunto Harry con su increíble y ronca voz.

-Sabine quiere saber si puede tomar dinero para pagarle al doctor...

-Si.- respondió Harry, Zayn sólo asintió y salió de los vestidores.

Solté un ligero suspiro y me puse de pie, Harry siguió mi acción.

-C-Creo que ya d-debo irme...-mi voz era pausada, Harry sólo asintió con la cabeza.

Me di la vuelta y comencé a caminar hacía la salida de los vestidores.

-Diana...-hablo Harry a mis espaldas y yo me gire hacía él.

Harry camino hacía mi a pasos rápidos, colocó sus manos en mis mejillas acercó su rostro al mío hasta que nuestras narices se rozaron.

-Sólo tú provocas esto en mi...-susurró y sin esperar respuesta pego sus labios a los míos.

Un remolino de emociones y sentimientos se generó dentro de mi, el vacío que sentía se había llenado y no había explicación lógica, pero siento que soy indestructible, siento que puedo hacerlo todo... siento que vuelo.

Un beso lento y apasionado se apoderó de nosotros y así con un solo beso los 21 meses de terapía se fueron a la mierda. Pero me sentía mejor que nunca.

Nos alejamos un poco para tomar aire, nuestra respiración se había vuelto jadelante y al menos yo podía sentir que el corazón atravesaría mi pecho en cualquier momento. Nuestra mirada era una sola y sinceramente no quería ver a nadie más. Porque los ojos siempre le pertenecen a quien los hace brillar.

El gruñido de mi estómago provocó que ambos soltaramos una ligera carcajada. Entre el montón de cosas que sentía justo ahora el hambre no podía faltar.

-¿Puedo invitarte a desayunar?.- habló Harry.

-E-Eso me encantaría.- respondí tímida y el sonrió ligeramente.

-Te veo en 20 minutos afuera.- yo asentí con la cabeza.

Harry quito sus manos de mis mejillas y me regaló una ligera sonrisa la cual correspondí. Me di vuelta y salí de los vestidores vestidos de hombres para ir al de chicas.

GANSTER- Segunda Temporada Donde viven las historias. Descúbrelo ahora