Parte 21

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Harry

Un mes después

Estoy cansado y me siento roto por dentro, ya nada es igual. Día a día vivo con miedo y dolor, hace ya un mes que Diana entró en coma y a sido el mes más difícil de toda mi patética vida.

En el transcurso de este mes Louis me convenció de dejar ir a Milla y aunque realmente yo no quería, supuse que no era su culpa del todo pues vivía bajo la amenaza de su enfermo hermano y al final fue ella quien ayudó a capturarlo y acabar con él de una vez por todas. La única condición que le puse para dejarla libre fue que debía irse lejos y nunca más volver, en menos de una semana ella y Peter abordaron un avión directo a Washington.

Deslinde a Louis de algunos asuntos para que cuidara de Diana las 24 horas del día, por otro lado Trina y yo venimos a  ver a Diana todos los días, la mayoría de veces me quedo a dormir en el hospital.

Justo ahora me encuentro sentado a un lado de su cama, contempladola sigue tan hermosa como siempre mientras que Louis revisa sus signos vitales como su rutina lo indica.

-Ella va a despertar.-la voz de Louis me saco de mis pensamientos.

-Lo hará... es una mujer fuerte.-respondí.

-Lo es, siempre lo a sido...-el sonido alarmante de uno de los aparatos conectados a Diana interrumpió a Louis, quien se alarmó al escucharlo.

-¡¿Qué está pasado?!.-pregunte angustiado.

-¡Algo no está bien!, ¡ESTA ENTRANDO EN PARO LLAMA AL DOCTOR!.-ordenó Louis.

Salí corriendo de la habitación gritando por un maldito doctor, al poco rato la habitación estaba llena de ellos y de enfermeras, el cuerpo de Diana se convulcionaba mientras que los doctores la trataban de estabilizar.

El sonido constante de una de esas máquinas hizo que mi cuerpo se helara... su corazón había dejado de latir y de pronto fue como si todo fuera en cámara lenta.

-¡NOO, MI AMOR NOO!.-Grite desesperado.

Quería correr a su lado, pero las enfermeras me sacaron del cuarto, los nervios y la desesperación se habían apoderado de mi por completo, la sensación más horrible del mundo.

Me senté en la sala de espera, estaba impaciente, a los pocos minutos llego Trina quien logró tranquilizarme un poco. Habían pasado ya varias desde que Diana entró en paro y ni un maldito doctor salía para decirnos que había pasado, estaba muerto de nervios. Después de varios minutos Louis apareció en la sala de espera y por la expresión que tiene sólo espero malas noticias.

-¡¿Louis como está?!.-pregunte desesperado, él parecía estar en shock.

-¡Amor ¿qué pasa?!.-Trina lo miro preocupada.-¡Louis di algo!...

Louis no decía nada, era el momento más horrible por el que pasaba, jamás lo había visto asi de perturbado. Un hombre mayor puso su mano sobre el hombro de Louis en señal de apoyo.

-¿Ustedes son los familiares de la señorita Tomlinson?.-pregunto el hombre.

-¡Si, si somos nosotros! ¿Cómo está ella?.-pregunte ansioso.

-Me presento antes aue nada soy el doctor Phill, soy neurólogo y llevaré el caso de la señorita a partir de ahora.

-¡¿Ella está bien?!.-pregunto Trina desesperada.

-La señorita tuvo un paro cardíaco, afortunadamente logramos reanimar su corazón a base de electro choques...

-¡¿Se llevaron tantas horas para eso?!.-pregunte molesto y el doctor negó con la cabeza

GANSTER- Segunda Temporada Donde viven las historias. Descúbrelo ahora