La Apuesta - Kookmin

01

Narra Jimin

Mi hermano y yo siempre fuimos como el agua y el aceite. Yoon Gi era el rebelde de la casa, malhumorado y egoista, un dolor de cabeza para mis padres. Yo por otro lado, era super tranquilo y de no ser por mi amigo Taehyung, diria que soy un completo antisocial. Soy el tipico chico que pasa totalmente desapercibido por la vida de las personas y mi orientación sexual me hace sentir bastante frustrado ya que, según yo, no le gusto a nadie. Tampoco es que me esfuerce mucho en conseguir una pareja, pero las veces que lo he intentado fue un fracaso.
...

Ya era de tarde, estábamos en el recreo y como de costumbre discutiamos sobre ese tema con mi hermano y Tae.

- Yo no tengo novio por que no quiero, podria conquistar a cualquier chico que quisiera, pero no quiero - obviamente eso era mentira.

- Bueno - contestó Yoon Gi, ya sabia por donde venia la cosa, él amaba las apuestas - apostemos, yo elijo un chico y tu lo conquistas -

- Puff claro - dije haciéndome el tonto, sabia que él no iba a desistir.

Comenzó a buscar en el patio un candidato apto para que él ganara la apuesta.

- Muy tonto, muy feo, demasiado lindo, demasiado idiota, oh! Ya se..... - su vista se dirijo a la mesa ruda, los bad boy del colegio - Jeon Jungkook - y como era de esperarse elijio al peor.

Mis ojos se abrieron como platos y me invadió el miedo, ¿como se supone que yo iba a conquistar a Jeon sin morir en el intentó?

- Tienes miedo hermanito? - pregunto con cara de pícaro.

- Pff claro que no - respondí desinteresado, mientras moria de miedo por dentro - Solo me darán una paliza, pero dame una semana y me acuesto con él - ya era hombre muerto. Rip Park Jimin.

- Ok tienes que mostrarme una foto con él en donde se vea que lo hicieron, si no lo haces limpiaras mi habitación por un mes. - sentenció Yoon Gi divertido.

- Si lo hago le diras a mamá que tu rompiste su jarrón - si me iba a arriesgar al menos que valiera la pena, ese jarrón me costo casi dos meses sin videojuegos.

- Trato - respondió Yoon Gi sin dudar.

Ahora tenía que idear un plan perfecto para poder acercarme al chico. Él era el terror del colegio, meterse con él era sentencia de muerte, no se como voy a hacer para llegar hasta su cama, estoy muriendo en este momento.

...

Di vueltas en mi cama toda la noche pensando en la mejor estrategia para acercarme a Jungkook sin salir herido, no me atrevia a hablarle, de seguro me pegaria si lo intentase, no lo se, jamás se me a cruzado por la cabeza tal idea.

Me levante bastante cansado ya que no dormí mucho por los nervios. Me arregle lo más que pude, tenía que gustarle al chico malo, aunque fuese algo muy difícil de lograr. Planche mi uniforme para que se viera perfecto, arregle mi cabello y me perfume, olía delicioso, espero poder llamar su atención.

Llegue a clase algo tarde por arreglarme tanto, yo no solía hacer esas cosas, yo era una alumno ejemplar. Al entrar al salón pude notar que él estaba sentado al fondo, era raro pero siempre llegaba temprano, milagrosamente, como si los planetas se hubieran alineado, el asiento que estaba a su lado se encontraba libre y con todo el valor que quedaba dentro de mi, me dispuse aterrado a sentarme junto a él.

- Te perdiste? - me dijo algo molesto.

- N-no - ya era hombre muerto.

- Entonces que haces ahí? - todos sus músculos se veian sensualmente tensos.

- Me voy a sentar aquí - dije orgulloso.

Me dio un empujón que me dejó tirado en el piso, toda la clase quedo mirando en silencio y un "NO" resonó en el salon. Me levante bastante adolorido y volví a sentarme, no iba a darme por vencido, ya estaba arto de que Yoongi siempre se saliera con la suya.

- Si lo hare - afirme serio mirándolo a los ojos, estaba decidido.

Desvío su mirada de mi y resoplo sonoramente, se levantó furioso y se fue de la clase, yo solo quería llorar por tal humillación.

Aguanté las lágrimas hasta que la profesora entro al salón, mi mente estaba en crisis y mi cuerpo adolorido, solo quería salir corriendo de ahí como él lo había echo, pero ya no quedaba valor en mi, así que solo enterré mi cara en el cuaderno y rece por qué nadie se diera cuenta. La hora transcurrió con normalidad aunque yo me sentía destrozado, no se si podré lograrlo, creo que tendre que pensar como reorganizar la habitación de Yoon Gi.

Me encontré con Tae en el patio, le conte lo que había pasado en el salon con el pelinegro, mi amigo solo se rio de mi como si hubiera contado el mejor chiste del mundo y no vio el sufrimiento en mí, por qué secretamente me gustaba Jungkook y sabía que era algo imposible para mí.

- En vez de reírte podrias ayudarme - estaba bastante molesto.

- Lo siento Jimin, es que es muy gracioso imaginarte tirado en el suelo - se sobo la panza manifestando el dolor que sentía por reírse - pero no te desanimes, al menos ya llamaste su atención -

- No es gracioso Tae - lloriquie un poco - me duele el trasero Tae, además no llame su atención, solo lo hice enojar -

- Hay Jimini - exclamó para empezar a reír otra vez, que fastidio.

Paso un rato y Tae no paraba de reirse de mi, que idiota de amigo tengo. Maldecia el momento en que acepte esta apuesta.
Debo confesar que en el fondo me encantaría compartir saliva con Jungkook, el chico sabia ser muy lindo y sexy. Las chismosas afirmaban que su espalda era una obra de arte, llena de tatuajes y que también sus brazos poseen hermosos dibujos. Me causaba mucha curiosidad su personalidad misteriosa, nadie sabia nada de él, pero tenia que dejar de pensar tonterías y ponerme a idear un plan.
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