ＮＵＥＳＴＲＯ ＳＥＣＲＥＴＯ || ʏᴏᴏɴᴍɪɴ•ᴊɪᴍsᴜ

Capítulo 17: Sabotear una cita

Caminé hasta la cafetería en la que me había quedado de ver con Taehyung, mirando mi celular de vez en cuando para ver si Jimin me había mandado mensaje pero no, nada.

Sin embargo, sentía como si alguien me estuviera persiguiendo pero cuando volteaba a ver a atrás, no había nada. Tal vez estoy un poco paranoico.

Seguí mi recorrido y cuando llegué, Taehyung ya estaba ahí. Lo saludé con un movimiento de cabeza al llegar hasta donde él estaba y me senté a su lado. La mesera del otro día nos pidió nuestra orden y se fue no sin antes echarme una mirada de arriba a abajo y sonreir. Fruncí él ceño. Mirándola bien, lo único bueno que tenía eran sus senos.

—Así que, ¿Qué pasó? —le pregunté a Taehyung una vez que se fue la chica y este me miró haciendo una mueca.

—Pues verás, hyung, Jungkook me llamó para preguntarme si podíamos vernos después de la escuela y por supuesto que le dije que si —habló haciendo movimientos con sus manos, lo cual hizo que me fijara en la ventana.

Al observar por ella, pude percatarme de una mancha un poco rara, como de moco y más allá, entre unos arbustos, una cabeza rosita se asomaba... no muy discreta, la cual se escondió cuando se percató de que  le había visto. Traté de ocultar mi sonrisa pero creo que fallé.

—¿De qué te ríes? —se ofendió de que no estuviera poniéndole atención y negué con la cabeza, invitándole a seguír su relato, lo cual hizo.

—Bueno, él punto es que me empezó a preguntar por ti y que relación tenía contigo lo cual me pareció un poco extraño, la verdad —hizo una pausa cuando llegó la camarera con nuestro pedidos y después de tomar un poco de refresco, continuó. —Bueno, ¿En qué iba?... Ah, sí, la cosa es que me hizo preguntas muy raras y de un momento a otro me empezó a gritar cosas que no puedo decir en un lugar público.

—¿Y? —tomé entre mis dedos una papa frita de mi plato y la examiné para después meterla en mi boca. —Aún no entiendo por qué pelearon.

—¡Yo tampoco! —se dejó caer en él asiento, lanzando sus manos al aire. —¡Dijo muchas cosas que no entendí!

—Iugh, no hagas pucheros, se ven feos en ti.

—¿Y en mí se ven bien?

Alcé la mirada para ver al de la cabeza de algodón de azúcar parado frente a nuestra mesa.

—¡Jimin, ¿que andas haciendo por acá? —chilla Taehyung señalando él asiento frente a nosotros.—¡Sientate, sientate!

—¡Oh! ¿Puedo? —se puso una mano sobre el pecho por lo cual rodé los ojos y después de dramatizar por unos cuantos segundos, se sentó. Se sentó a mi lado, dejándome entre Taehyung y el.

Tengo un mal presentimiento acerca de esto.

Habían pasado solo dos minutos desde la llegada de Jimin y este se había puesto a platicar con Taehyung acerca de una canción que recién había encontrado en internet cuando de repente cambio de tema.

—¿Y que hacían antes de que yo llegara? —sonrió como si hace minutos atrás no nos hubiera estado espiando y solo pasara por casualidad.

—Estábamos platicando —hablé sin mirarlo y tomando un trago de refresco.

—¡Tengo hambre! —Jimin recargó su cachete en una mano, haciéndose él sufrido.

—Puedes comer de nuestras papas —Taehyung le acercó el plato y este actuó sorprendido.

—¡Oooh no, no, no! ¡No podría!

—¡Oh, vamos, somos amigos!

—¡De acuerdo!