ＮＵＥＳＴＲＯ ＳＥＣＲＥＴＯ || ʏᴏᴏɴᴍɪɴ•ᴊɪᴍsᴜ

Capítulo 41: El cupón

Dedicado a AylinLopez783  y  azsfykjsndhgs

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La estilista nos recibió muy bien, invitandonos a pasar y a sentarnos mientras terminaba de cortarle el cabello a una señora de la cual deduzco que era la madre del mocoso que estaba sentado a mi lado. Mocoso el cual no me quitaba la vista de encima.

—¿Qué tanto me vez? —no era precisamente un secreto el hecho de que no tenia tacto con los niños. —¿Se te perdió algo?

—¿Eres hombre? —preguntó el niño, ladeando la cabeza para evaluarme mejor por lo cual fruncí el ceño.

—Si y uno muy macho, ¿Por qué?

—Pareces una chica.

—¡Maldito mocoso, acabas de invocar al demonio...!

—¡Hijo, ya vamonos! —la mamá del niño llegó, tomando su cosas del otro asiento.

—¡Mami, mami, esa chica te dijo demonio!

—¡¿Qué?!

—¡Y-yo no dije eso! ¡Niño mentiroso! —traté de defenderme. —¡Ademas el me dijo que...!

—¡Ahora si vas a conocer al demonio en persona! —me dio una fuerte cachetada, dejándome los dedos marcados. —¡Nadie le dice mentiroso a mi hijo!

Una vez que se fueron, miré a mi suegra y a mi novio, los cuales estaban tratando de aguantar la risa al igual que la estilista.

—¿En serio no pudieron hacer nada para evitar que me abofeteara? —les miré fingiendo molestia pero en realidad estaba contento ya que habia logrado sacarles una risita.

—Te veías muy lindo tratando de defenderte de ese niño, hyung.

Jimin se sentó en mis piernas sonriendo con su eyesmile. Hice una mueca hacia la estilista, dandole a entender que dejara de estar de chismosa, lo cual entendió a la perfección, volteando a ver a mi suegra.

—¿De que color te pintaras el cabello, Jiminnie? —le murmuré mientras me dedicaba a dejar pequeño besitos en su cuello.

—No sé, Yoonnie —tocó con sus dedos un mechón de su cabello rosa, mirándolo de reojo. —Estuve pensando en pintarlo de rojo pero estuve viendo fotos viejas y no sé. Realmente me veo muy sexy con él cabello castaño.

Le di un beso húmedo (el cual respondió un poco tímido ya que estabamos en público) para después separarme un poco y sostener su labio entre mis dientes, halándolo un poco, sin hacerle daño.

—Tu te vez sexy con cualquier color de cabello —ronronee.

Sonrió avergonzado y escondió su rostro en mi cuello. Realmente me encantaba esa posición.

Al final mi suegra escogió pintarselo de rojo y Jimin de castaño.

La estilista les lavó el cabello y les dió unas cuantas indicaciones para el cuidado del cabello e incluso le regaló un sobresito con shampoo y acondicionador especial para que lo usen cuando se bañen.
Llegamos a su casa y nos dirigimos a su habitación para que se bañara. No quise incomodarlo o forzarlo a algo así que simplemente me acosté en su cama y miré mi celular hasta que terminó.

La regadera ya no emitió ningún ruido, dándome a entender que ya habia acabado.

—¡Hyung, olvidé mi toalla! —gritó Jimin desde dentro del baño. —¿Puedes pasármela?

Sin pensarlo me levanté de la cam y busqué entre sus cajones alguna toalla. La tomé y toqué dos veces la puerta.

—Aquí está la toalla, Minié —exclamé.

—Pasa, hyung —me respondió en voz un poco más baja.

Comencé a sentirme ansioso.

¡Quieto, perro, no empieces de calenturiento!

—Santa mierda —jadee al verlo.

No llevaba absolutamente nada encima salvo su cepillo de dientes él cual estaba dentro de su boca ya que se la estaba lavando.

Nuestras miradas se conectaron atravez del espejo, dejándome ver que el también estaba nervioso y no era para menos. No habiamos tenido sexo desde hace más de tres semanas. Ni siquiera pudimos tener sexo en el campamento.
Lamí mis labios y le puse la toalla encima. Comencé a frotar la tela contra su cuerpo, secándolo.

—Extrañaba tus manos encima de mí —murmuró viendo hacia su cepillo de dientes el cual ya se había sacado de la boca.

—Solo... Sólo no quiero forsarte a nada, bebé —seguí con mi tarea secando ahora su trasero.

—Es por eso que eres mi vida, mi amor —susurró provocando que casi me de un un infarto al corazón ya que era la primera vez que me llamaba así. —¿Estás bien con ello?

—Estoy bien siempre que tu lo estés, pequeño.

Dejó salir un suspiro dejando caer su cabeza en mi pecho cuando hice la toalla a un lado y en cambio lo abraze por detras.

—Estoy mojado, Yoongi —cerró los ojos y le besé la oreja.

—Yo tambien lo estoy, pequeño, ese color de cabello es realmente...

—Estoy hablando del agua de la bañera, cochino.

—Ah, es casi lo mismo.

Comenzó a reírse y se dió media vuelta con un sonrisa coqueta.

—¿Alguna vez te han dicho que eres un sucio?

Toqué mi barbilla con mis dedos, meditándolo.

—Mmh no, creo que no.

—Bien, entonces te lo digo yo: eres un sucio.

—Lo bueno es que me lo dijiste tu.

Jimia niega con la cebeza e intenta alejarse para seguir secándolo pero lo tomo de las caderas, atrayéndolo de nuevo a la misma posición.

—Hay que quedarnos así por unos minutos —le acaricio con cariño él abdomen, arrullandolo.

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By:JunkyBk