ＮＵＥＳＴＲＯ ＳＥＣＲＥＴＯ || ʏᴏᴏɴᴍɪɴ•ᴊɪᴍsᴜ

Capítulo 49: Nuestro Secreto Pt. 1

(La canción de la multimedia es la que va a sonar cuando Jimin esté entrando a la iglesia)

Capítulo dedicado a:

LadyCrissG2 , Aliciadanny5294 ,
jxminsito , crazyugyeom

Capítulo final Pt. 1.

🌹

Siete meses después.

El día había llegado, al fin nos casariamos.

El cielo estaba muy lindo y no parecía con intenciones de llover. Jimin estaba en su casa alistándose con ayuda de su mamá y su demás familia: tíos y primos, que habian llegado esta mañana. No nos veríamos hasta la misa y me sentía muy ansioso ya que no nos dimos nuestro de beso de buenos días. Al menos nos dimos las buenas noches.

Habiamos pasado meses organizando la boda con la ayuda de nuestros familiares y amigos. Todo estaba listo... a excepción de mi.

—Yoongi, ¿Puedes estarte quieto un minuto? No puedo acomodarte el cabello mientras consursas por ser la mejor lombriz del mundo —me regañó por tercera vez la estilista que contrató mi madre.

—Lo siento, Natalia —murmuré sentandome nuevamente.

Moví mi rodilla repetidamente, tratando de controlar mis nervios pero eso no funcionó por lo que empecé a morder mis uñas.

—Bueno, adiós a la manicura —se mofó mi papá, entrando a mi cuarto.

Le miré soltando un bufido para después volver a mi trabajo de llegar a la raíz de mis uñas. Suspirando, me repetí en la mente que todo estaría bien y me obligué a tranquilizarme.

—Estoy bien.

—Si, se nota.

—Es hora de ponerte tu traje —dijo la chica, alejándose un poco de mi para mirar su trabajo. —Está muy bien, pero ten cuidado de no arruinarlo cuando te cambies. Te esperaré a fuera para darle los últimos retoques cuando termines.

Asentí levantándome, mis manos temblaban y estaba seguro de que en cualquier minuto me desmayaria por los nervios.

—Hijo, en serio tranquilizate o vomitaras.

—Yo no... bbuagh...

—¡Dios, Yoongi!

[🌹🌹🌹]

Terminé de lavarme la boca mientras papá limpiaba el vómito de la alfombra. Con un suspiro me dirijí a la cama, donde yacía mi traje negro con unos toques de color blanco. Tomé la camisa y la inspeccioné para después volver a dejarla sobre el colchón y comenzar a sacarme la ropa, quedando en boxers.

Me vestí con mucho cuidado ya que no quería arruinar la ropa. Papá me ayudó a acomodarme el saco para después salir por la chica y que me diera los últimos retoques.
Tomó una rosa blanca y la metió en el bolsillo mi saco, removió un poco mi cabello, despidiéndose y deseandome suerte en la boda. Le sonreí y miré a mi papá.

—Estoy muy orgulloso de tí, hijo —susurro, limpiandose una lágrima que habia derramado.

Eso hizo que todo el nerviosismo que sentía antes, desapareciera para darle la bienvenida a un nuevo sentimiento.